Álvaro Morata fue un recurso interesante y a veces decisivo para el Real Madrid hasta que se lesionó Jesé. Como número seis en una rotación para tres puestos (tras Cristiano, Bale, Benzema, Jesé y, según quién estuviera de interior, Di María o Isco), su energía y su planta parecían soluciones para Ancelotti que dieron incluso puntos en días como el de la visita al Ciutat de Valencia. Pero, sin el niño del «20», Morata pasó a ser el único hombre-gol del banquillo blanco y los resultados no fueron buenos. Las sensaciones, tampoco.
Carlo añorará sus «5 minutos»En cualquier caso, jugar en el Madrid es difícil. Por descontado, si eres Jesé vas a rendir más al lado de Benzema y de Bale que de los jugadores del Castilla, pero quien no alcanza ese excelso nivel futbolístico tenderá a sentirse frustrado porque de corto se nota todo. Según el carácter de cada uno, la respuesta es o esconderse o intentar compensar el déficit sumando en otras áreas. Morata, que es una promesa obsesionada con triunfar, optó por imprimir(se) una intensidad desmedida. Aparecía mucho, por muchos sitios y a mucha velocidad. Y así se explica el primer párrafo. Para 5 o 10 minutos funcionaba de lujo porque generaba ocasiones o peligro en muy poco tiempo. Para 45 o 90, su manera de jugar restaba demasiada precisión y reflexión a un chico que, en clave Madrid, quizá ya iba algo justo de calidad.
Sin el nivel de exigencia del Real, Morata recuperará la confianza.
La Juventus domina la Serie A y, a pesar de su prematura eliminación en la Champions, para muchos está entre los ocho mejores equipos del presente, pero resulta obvio que el nivel de su plantilla no se acerca al de la del Madrid, lo cual se notará en el juego, y a Morata le podría venir bien. No estará casi condenado a que la jugada decrezca cuando pase por él. Estará rodeado o de menos ritmo o de menos precisión, y él mismo podrá nivelarse, mantener la inercia colectiva y recuperar la confianza en su fútbol de siempre.
Y virtudes tiene multitud. Para más inri, virtudes que el ataque de esta Juve lleva necesitando desde ni se recuerda cuándo: velocidad, potencia, insistencia y acierto en los desmarques de ruptura, caídas a banda que puedan acabar en desborde y, en definitiva, cualquier cosa relacionada con la profundidad. Amén de ser 100% compatible tanto con el Apache como con Llorente. Y hasta con ambos a la vez, pues el madrileño se adapta muy bien, tanto en defensa como en ataque, a la banda izquierda. Sin entrar en cuestiones ajenas al juego, siempre tan difíciles de valorar, la plantilla de la Juventus es más completa y competitiva con Álvaro Morata en sus filas. El fichaje está bien tirado.
@Juantelar 28 julio, 2014
Efectivamente, le vino grande el rol que le tocó asumir tras la lesión de Jesé. Y se le notaba mucho que le podía la ansiedad, ese afán por demostrar, por aparecer e intentar aportar, pero que le hacía caer en imprecisiones y cometer errores.
Es una pena porque mucha gente se ha quedado con esa imagen de Morata y hablan de él como si fuese un paquetazo. Y tampoco creo que sea eso, ni justo juzgarle únicamente por una temporada. Es cierto que no tiene condiciones de crack o como para ser titular en todo un Madrid, pero sí de buen jugador. Lo demostró en el Castilla y con las inferiores de la selección. Es aún muy joven y tiene margen de mejora.
Sobre su rol en la Juventus…pues con la llegada de Allegri tengo dudas sobre cómo va a jugar y que rol le puede tocar desempeñar a Morata. Si mantiene el 3-5-2, supongo que partirá por detrás de Llorente-Tevez. Pero si varía a un 4-3-3, puede que sea titular (o que disponga de más minutos).