Osasuna cambió con la llegada de Javi Gracia. El entrenador pamplonica, que llegó para sustituir a José Luis Mendilíbar, ha sido motivo de debate por sus métodos futbolísticos. Osasuna sigue siendo un equipo compacto y entregado, como marca su historia y demanda su afición, pero hay cosas que han cambiado. Con Gracia, los navarros tienden a realizar una salida de balón más lenta y elaborada, con un mayor número de pases que en la anterior etapa. En más de una ocasión, como ante el Real Madrid, hemos visto a un Osasuna buscando la combinación entre sus jugadores como arma defensiva, algo que nos sirve para reflexionar.
Pese a tener jugadores de buena calidad técnica, el perfil del futbolista rojillo no está directamente relacionado con el juego que, sin embargo, han logrado exhibir con éxito en ciertos momentos. Esto nos lleva a preguntarnos lo siguiente: sabiendo que la precisión no será la misma, ¿está al alcance de todos el intentar sacar el balón jugado? ¿Lograrlo es algo que depende 100% del trabajo táctico (o sea, apto para todos) o existe una personalidad necesaria para poder llevar a cabo dicho plan? Y una vez dominada esta suerte, ¿es rentable? ¿Da puntos? Anoche en “38 Ecos” disfrutamos de esta apasionante tertulia. Ahora te toca a ti pronunciarte.
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Referencias:
«38 Ecos (Jornada 19 – 2013/14)»
https://twitter.com/ecosdelbalon
https://twitter.com/Arroyer
https://twitter.com/DavidLeonRon
https://twitter.com/migquintana
https://twitter.com/SomeMarcus
Peter Sword 14 enero, 2014
Estoy de acuerdo con un hecho: si usas la idea base de que ningún equipo da por bueno un empate (muy arriesgado lo veo), cierto es que puedes a llegar a crear incomodidad psicológica en el rival si te dedicas a entretener el balón. Eso no sólo puede colocarte por encima desde un punto de vista mental, sino que también puede provocar errores en la colocación de los rivales si pierden la paciencia y caen en la trampa.
Sin embargo, lo veo arriesgado, especialmente ante equipos rápidos. Porque cada balón perdido puede ser una oportunidad de gol en contra. De todas maneras, las conclusiones se sacarán al final de la liga, cuando se puedan ver los números de Osasuna.
Y, por cierto, quizá no esta temporada, pero sí en alguna de las anteriores, el Barca ha hecho lo mismo. No con la intención de entretener el balón (que también lo he visto en algún partido con el marcador a favor) sino con la seguridad de que con la paciencia suficiente acabarían encontrando el hueco que buscaban. ¿Podría Osasuna intenar lo mismo pero quedarse a medias?