Hoy el aficionado gunner se ha levantado con una sonrisa que ya echaba de menos. El Arsenal fichó anoche a Mesut Ozil, genio alemán de 24 años procedente del Real Madrid. Aunque todo es opinable, parece claro que el germano es el futbolista más destacado de cuantos han aterrizado este verano en la Premier League. El pelotero mayor no ha caído ni en el mítico y necesitado Old Trafford ni en las manos del jeque citizen. Ni siquiera en el Chelsea de Mou; el bueno es del Arsenal. Un orgullo largo tiempo exigido por la masa social del club de Londres y que por fin se hace realidad.
En ese sentido, Ozil ha sido una oportunidad. Todos hemos tenido constancia de las intentonas del Arsenal por contratar al delantero uruguayo Luis Suárez. Con toda la lógica del mundo, pues como explicamos en el artículo “La determinación del Arsenal”, el Emirates viene demandando un matador como fueron Henry o Van Persie. Era la necesidad real, el fichaje que llevaba al Arsenal a un irrefutable salto de calidad. La operación no pudo concretarse y Wenger vio aumentada una presión externa ya de por sí enorme. Encarar la temporada sin refuerzos remarcables y con la hucha llena habría deslegitimado al francés casi de forma definitiva, incluso ante sus propios jugadores. En esas surgió Ozil. Un crack. Había que traerlo.
Ozil ha sido una oportunidad de mercado en la que el Arsenal ni podía ni debía pararse a pensar
Los motivos que llevan al Arsenal a hacerse con Mesut son evidentes; es un jugadorazo que mejora al 99,9% de su plantilla. Por qué Ozil ficha por el Arsenal es algo ya más complejo. El desembarco de Bale en el Real Madrid ha sido el latigazo final al ego de un futbolista que, con razón, se considera distinto. Mesut sueña con premios individuales, gloria y liderazgo, siempre fue así. El Arsenal le dará la jerarquía que tanto anhela (mandamás de un proyecto) pero difícilmente le acercará a los títulos de manera inmediata. Parece poco probable que el Arsenal 2013-2014 gane Champions o Premier y Ozil es una figura para pelear por todo desde ya. Si el teutón es el inicio del resurgir deportivo del Arsenal, no lo sabemos. En cualquier caso, será un proceso que requerirá su paciencia. Es la cara negativa de su firma por los londinenses. Lo deportivo suena un poco mejor, aunque Wenger sea algo diferente a lo que Mesut viene frecuentando.
Joachim Low y José Mourinho son los entrenadores más relevantes en la carrera de Ozil. Con ellos se ha visto la mejor versión del alemán. Ambos técnicos coinciden en una idea vertical del juego que potenciabaOzil y el Arsenal han de ponerse de acuerdo la cualidad diferencial de Mesut: la determinación. Ozil es un futbolista insultantemente decisivo, sobre todo a través del pase final. No es casualidad que los compañeros con los que mejor química ha tenido sean Cristiano Ronaldo, Karim Benzema o Thomas Müller, portentos de la movilidad aplicada a la profundidad y la asociación. En el Emirates no encontrará eso. Desde que Wenger matizara en 2008 la identidad del club (pasando del potente contragolpe de Henry al british tiki-taka), el ritmo del Arsenal es más bien bajo. Los gunners elaboran –a veces en exceso– y Mesut no es alguien que disfrute participando y masticando la jugada; lo suyo es definirla. Desde luego no puede decirse que Arsenal y Ozil hablen lenguajes incompatibles pero sí que habrá que hallar un punto de encuentro. ¿Rodeándolo de velocidad?
El actual juego del Arsenal es diferente a lo que Ozil hacía en el Real Madrid o en Alemania
Ahora mismo solo manejamos dos certezas: que Ozil será titular y que no actuará en la base de la jugada, sea esta para Ramsey, Arteta o el recién llegado Flamini. Así pues, solo queda conjeturar sobre el entorno que rodeará al mago de Gelsenkirchen. Wenger tiene opciones para elegir.
Se escuchó anoche en la redacción de 38 Ecos una teoría que merece la pena comentar. La hipótesis consistía en la posibilidad de que Ozil ejerciera como punta, el llamado falso 9, acompañado de dos extremos aptos para recibir los pases de Mesut. Estos podrían ser Podolski o Walcott, por ejemplo. La elección tiene su sentido: te permite mantener tres centrocampistas para ganar solidez, conservas el discurso asociativo vigente y nutres a Ozil con receptores para sus envíos. Dicho esto, las contraprestaciones son incuestionables. Mesut es un maestro escondiéndose tras la línea que lo marca. Como delantero esto no existe. Y aunque al internacional por Alemania casi le da igual cómo recibir la pelota (es tan virtuoso que lo soluciona todo con un giro), jugar de espaldas es una película muy distinta. Por no hablar del hecho de vaciar el área en una liga en la que Negredo, Dzeko, Van Persie y compañía rematan centros cada dos por tres. Ahora que Giroud anda entonado casi mejor no tocarlo.
Cómo rodear correctamente a Ozil para potenciarlo, una decisión clave en manos de Arsene Wenger
Con el 9 francés como estilete ofensivo, las alternativas se reducen. Walcott parece fijo en el once; aporta demasiadas cosas en términos de profundidad y energía como para arrancárselo a este equipo. El inglés no tiene el fútbol ni la sensibilidad en los movimientos que pueden tener los mencionados Müller, Ronaldo o Benzema pero al menos corre tan rápido Ozil preferiría tener a Podolski a su izquierdacomo la mente de Ozil. Faltaría definir el futbolista que escolta en la otra banda a Mesut. En realidad, más que de nombres –que también– se trata de una selección del perfil que se desea; si profundo y goleador o jugón y pasador. En el primer supuesto, el elegido podría ser Podolski. Se le niegan muchas cosas al paisano de Ozil pero sus goles nunca faltan y es de lo más tangible y seguro que tiene el Arsenal. Además, su entendimiento con Mesut ya está desarrollado en la Mannschaft. Ozil tiende a hacer del costado derecho su perfil fuerte y Lukas es fabuloso esperando en el lado débil. Esta elección mandaría a Cazorla a jugarla muy atrás, algo para lo que está más que capacitado. Si por el contrario Wenger opta por un “extremo zurdo” de tendencia interior, la opción principal sería el propio Cazorla, sin olvidar a otros como el checo Tomas Rosicky. Esto, a priori, no terminaría de agradar a un Ozil que lleva tres años jugando con una referencia agresiva y finalizadora en la izquierda tanto en el Madrid como en Alemania.
La verdad es que si uno lo piensa, la demarcación de Ozil era la que mejor cubierta tenía el Arsenal. Wilshere, Cazorla, Rosicky, Ramsey o incluso Oxlade pueden ocupar en un momento dado la zona del enganche. Poco importa; hoy el hincha londinense y los miles de simpatizantes del club andan con el hormigueo en el estómago. Es ilusión, justa y merecida. Tras tanta austeridad, la estrella de la fiesta por fin les pertenece. Luego volverá a rodar el balón y todos habrán de tener paciencia. Sobre todo aquel que cambió Hollywood por el cine independiente.
@RdGarca 3 septiembre, 2013
Es un fichajazo para el Arsenal. Como bien menciona el artículo, el principal problema de Ozil será que no tendrá jugadores con mucha movilidad rodeandole, pero esto puede ser tratado. Wenger ya probó el año pasado con Walcott y Podolski como 9. Tiene la opción de poner a uno de estos en la delantera y poner a Ozil junto a Cazorla y Rosicky.
Tiene hasta la opción de Ozil en derecha y Wilshere en la mediapunta.