«Fer, hay que conseguir que la gente sea feliz»
···
Ecos del Balón empieza con una llamada a Málaga en la que le planteo a Abel transformar lo que era un blog amateur, un entretenimiento, en un proyecto más serio. Crear algo profesional con el objetivo de que fuese el trabajo de nuestras vidas. Una irresponsabilidad, vamos.
Fueron días de muchas emociones, de muchas ideas, de muchos planteamientos locos sobre cómo iba a ser la forma que le íbamos a dar a nuestro proyecto. Pero una cosa sí teníamos clara, íbamos a crear algo para la gente, algo que girase en torno a las personas y no con el contenido como el centro de todo.
Recuerdo como si fuese ayer cómo le planteaba a Abel que todo debía girar en torno a la conversación, que teníamos que crear un contexto donde la gente tuviese la posibilidad y la capacidad de expresarse y, sobre todo, de escuchar a los demás. Si conseguíamos eso, en un contexto social en el que estamos donde la gente apenas se escucha, donde todo sucede a una velocidad incontrolable, sin espacio para la reflexión, donde la gente cada vez está más sola…tendríamos unos pequeños ratitos durante el día en Ecos donde aquellos que así lo decidiesen se sentirían mucho más acompañados y con un sentimiento de pertenecer a algo. De estar en su casa. De cohabitar, aunque fuese solo por unos momentos, en un contexto donde podían comunicarse, escuchar y ser escuchados. Unos pequeños ratitos del día para escapar de la ansiedad, el vértigo y el estrés de la vida diaria para poder respirar y encontrar cierta paz.
Y lo recuerdo como si fuese ayer, Abel al otro lado del teléfono acompañándose de toda la emoción de la que nos estábamos alimentando esos días: «Es que es eso. Fer, tenemos que conseguir que la gente sea más feliz. Tenemos que lograrlo».
Hacer más feliz a la gente son unas palabras muy grandes. Lo sabemos, claro. Son objetivos gigantes que ojalá estuviesen al alcance de nuestra mano. Pero sí que pensamos en su momento que si no la felicidad sí que podíamos dibujar ratitos durante el día para que la gente pudiese estar más a gusto, sentirse más acompañada, y más escuchada. Con ese objetivo trabajamos desde el primer día, y con ese objetivo seguimos trabajando a día de hoy. Es como hemos entendido siempre que queremos hacerlo. Porque Ecos va sobre la gente. Es de la gente.
Hoy dejan «Ecos del Balón» Abel Rojas y Miguel Quintana. Es un momento complicado y difícil para todos nosotros. Son momentos de muchas emociones y de muchos sentimientos. Dejan la que es su casa. La que será su casa siempre. Y creo que hoy es un día para que dos personas que han trabajado durante muchos años, con muchos sacrificios personales, para «que la gente sea más feliz» reciban el calor de toda la gente que nos ha acompañado todo este tiempo. Se lo han ganado.
Una de las cosas que uno no entiende cuando decide emprender es realmente la cantidad de sacrificios personales que va a tener que hacer para lograr sus objetivos. Es todo durísimo. Cuando das el paso de montar un negocio propio una de las primeras cosas que suceden es el verte rodeado de las opiniones de la gente que te acompaña en la vida, de la gente que te quiere. «¿Lo has pensado bien? Eso que quieres hacer es muy difícil. El mercado está muy mal. No lo vas a conseguir. Búscate un trabajo normal.»
Es la gente que te quiere, la que te rodea. Y te lo dicen con las mejores intenciones del mundo, porque te quieren y desean lo mejor para tí. Y escenarios más controlados, más conservadores, menos arriesgados y donde, teóricamente, las posibilidades de que alcances tus objetivos sean más cercanas siempre van a ser prioridades para ellos. Porque quieren lo mejor para ti.
¿Qué pasa con esto? Que esto te lo van a decir mucho, todos los días. Tu familia, tus amigos, toda la gente que está cerca de ti. Y aunque está absolutamente lejos de su intención, lo que están creando son focos de energía negativa que es lo último que necesita una persona que se va a meter en una aventura como esta. Porque cuando tú vas a emprender vas a necesitar kilotones de positividad, de energía. Son tantos los problemas a los que vas a hacer frente que necesitas estar lo mejor preparado posible emocionalmente hablando. Así que vas a tener que tomar decisiones si quieres que tu idea funcione.
A lo mejor vas a tener que espaciarte un poquito de las personas que sin mala intención te están cargando la mochila de piedras, a lo mejor vas a tender a relacionarte menos, aunque sea durante breves periodos de tiempo, con amigos o familiares que están en tú día a día desde siempre. Porque necesitas que tu proyecto funcione, que avance. Necesitas pilas. Necesitas que te rodee un mensaje positivo, motivador. Responsable, pero motivador, que te alimente.
Desde el día uno de «Ecos del balón» esta es una situación a la que se han enfrentado todos los miembros de este equipo. Por supuesto, Abel Rojas y Miguel Quintana, que han tenido que tomar sus decisiones, que aceptar ciertos sacrificios en sus vidas, para intentar lograr que una idea tan bonita como la nuestra fuese posible. Y esto lo han compaginado con una cara amable siempre a todo el mundo, siempre. Lo han acompañado con ese trabajo del día a día para que la gente fuese escuchada y tuviese su ratito de paz. En mi pueblo, es lo que se viene a llamar: «unos gigantes».
Y lo han hecho tan bien, han cuidado tanto a la gente, que al final es precisamente esa gente la que ha sido el motor de este proyecto. Es verdad que lo hemos dicho muchas veces, pero no sé hasta que punto la gente es consciente de cómo nos ha cargado las pilas, de cómo nos han alimentado de energía, para seguir peleando por esta locura todos los días.
Por eso sé, Abel, Miguel, que hoy vais a recibir con creces todo el corazón que habéis puesto en este viaje. Nosotros nos conocemos muy bien, han sido muchos años increíbles donde hemos vivido episodios alucinantes, inimaginables cuando decidimos subirnos a este tren, y por eso sé perfectamente lo que os incomoda situaros en el centro de la escena y recibir la atención de todos. Pero sucede en la vida que cuando trabajas tanto por la gente, las personas siempre responden. La gente nunca falla.
Son unos momentos complicados para vosotros, no lo estáis pasando bien, no lo estamos pasando bien. Pero hay algo que tenéis que tener claro los dos, todo el equipo de «Ecos del Balón», toda la gente que nos ha acompañado durante todo este tiempo, y yo personalmente, aportaremos siempre lo que esté en nuestra mano para que en la medida de lo posible seáis los tíos más felices del mundo. Nos toca.
Miguel, Abel, os quiero mucho.
Un abrazo gigante
Fernando Ajenjo
···
Despedida de Abel Rojas
Despedida de Miguel Quintana
lordcab 8 marzo, 2018
Bueno, la decisión que habéis tomado seguro que es para bien y espero que no sea por nada grave.
Sólo deciros que sin duda a mi particularmente me habéis hecho feliz, y que con vosotros he aprendido tanto que ahora veo el fútbol de una manera más racional y no tan pasional. Al final creo que es el único sitio donde se puede hablar de FUTBOL de verdad.
Mucha Suerte amig@s!!!