Chile compite como pocas selecciones sobre la faz de la Tierra. El cuadro de Reinaldo Rueda, que arrancó el partido siendo inferior a Colombia de Queiroz, acabó sellando su pase a semifinales de la Copa América tras una tanda de penaltis a la que llegó después de cambiar el relato del encuentro. Con Pulgar por delante de los centrales, tanto en la salida de balón como en la transición defensiva, Chile planteó una especie de 4-1-3-2 en lo táctico que, con Alexis & Beausejour (por el lado izquierdo) y Fuenzalida & Isla (por el derecho), desnudó las diferentes deficiencias defensivas de Colombia… fruto de su ‘gestión’ del esférico y del espacio ocupado.
Ante una Colombia tan vertical con la pelota, que esta vez volvió a repetir el mismo plan -por fondo y forma- de su debut ante Argentina, Chile, que arrancó en un bloque medio cuando no tenía el esférico, consiguió tirar del hilo a partir de sus carriles exteriores. Con Alexis completamente pinchado al sector izquierdo, recibiendo casi siempre en una zona bastante abierta, desde donde consiguió generar varias situaciones de superioridad numérica -con Beausejour- ante Medina, el lateral derecho, Chile trató de evitar el carril central en todas y cada una de sus acciones defensa->ataque.
Chile le buscó las cosquillas a Colombia a través del juego exterior
De esta forma, manteniéndose lejos del radar de Barrios, que hasta ahora había ejercido de cortafuegos tras cada pérdida de Colombia, la Chile de Reinaldo Rueda entendió que el partido pasaba por la espalda de James y Roger Martínez, los dos extremos de su rival. A pesar de su intención de llegar al área por la vía más rápida, implicando a una cantidad importante de efectivos por el camino, Colombia no ha conseguido instaurar posesiones ‘de calidad’ en la parcela contraria. Ni para ser más eficiente en los últimos metros, vista la dificultad que ha tenido para sacar remates limpios cerca del área, ni para realizar una efectiva presión tras pérdida que, habiendo estado más compacta, le hubiese permitido atacar desde lugares ‘más rentables’ para los James, Roger Martínez, Cuadrado y Falcao.
El otro gran protagonista del partido para Chile fue Arturo Vidal. El centrocampista del FC Barcelona se situó en el perfil izquierdo, actuando de interior, desde donde consiguió darle bastante fluidez a la posesión por delante de Pulgar. Recibiendo muchas veces de espaldas al área rival, Vidal se mostró muy activo -y ciertamente preciso- en sus acciones al primer toque. Cierto es que, a pesar de esta buena actuación individual por parte del ‘8’, y de que el plan, en lo colectivo, lograra superar con creces a Colombia en su propio campo, a Chile le costó también lo suyo materializar todo esto en ocasiones claras. Por calidad y cantidad. Sin embargo, el mensaje que deja después de estos 90 minutos es mucho más ambicioso: “Estamos fuertes; nos estamos levantando”. Palabra de Arturo Vidal.
Ricardo Javier 29 junio, 2019
Hay que tenerlos cuadrados para tirar una tanda como lo ha hecho Chile. Sobrados.
Quien mira al abismo y le sostiene la mirada tiene casi todo hecho.