La baja de Arthur Melo en el seno táctico culé está teniendo más consecuencias de las que se presuponían. Su despegue allá por noviembre permitió a Ernesto Valverde encauzar todos sus pensamientos bajo un mismo discurso, pues el rol adquirido por el brasileño otorgaba al extremeño la posibilidad de ordenar los movimientos del sistema en un dibujo arquetípico de la esencia blaugrana, el 4-3-3. El ex del Gremio se colocó de forma precisa, en espacio y en tiempo, para que todo encajara, sumándose como el máximo representante del control de balón y la no perdida del mismo ante presiones adelantadas y la conservación del cuero para generar un ritmo de juego constante. La continuidad que aporta Arthur es parte del sistema, y desde ahí, se pudo comenzar a pensar en un Barça más propio de lo que demanda la Liga de Campeones. Por eso, su baja, en cierto modo, ha desnudado algunas carencias estructurales.
La baja de Arthur es doble: afecta al sistema y al dibujo
Principalmente porque su alrededor está transmitiendo sensaciones de oxidación a la hora de controlar los partidos en mediocampo así como su delantera está siendo también poco profunda en la última línea. Entre Suárez, Coutinho, Busquets y Rakitic, cuatro jugadores con rango de titular, el Barça se está quedando en terreno de nadie. Los problemas de ritmo y precisión de dicho cuarteto comprometen al conjunto culé a activar otras piezas o buscar alternativas que terminan generando excesiva dependencia a la hora de equilibrar tareas y repartir papeles. Es decir, sobran perfiles pero faltan misiones cumplidas en dicho reparto. Mantener el dibujo, el mencionado 4-3-3, con Vidal, Rakitic o Aleña en los dos interiores, no es sencillo. El mapa de Valverde carece de dimensiones y adolece de previsibilidad, y eso, llevado al análisis y a las posibles soluciones, derivan en la equivocación de dejarse llevar por las exhibiciones de Messi, pues el argentino, aunque no lo parezca, no puede serlo todo continuamente. Ya no.
Para ayudar a mitigar las dificultades, la figura de Ousmane Dembélé es simplemente imprescindible, aunque sólo sea por la amenaza y la capacidad de desequilibrio que tiene recibiendo al pie y desde muy lejos. Aunque el grado de acierto y plenitud mostrada antes de la lesión requiere de continuidad, rodaje y más confianza, su presencia se entiende como incondicional. Desgastada la estructura que juntaba jugadores con sistema, surge la pregunta sobre la continuidad, viabilidad y acomodo de un 4-2-3-1 que se fije en Leo y Ousmane, que active la banda derecha en todo momento y que equilibre un ataque que contaría con autonomía y profundidad en ambos costados. La decisión viene marcada por diferentes circunstancias, que entremezclan problemas propios con amenazas ajenas. En ella, conviven la imposibilidad de salir, guardar y circular la pelota durante más tiempo al no estar Arthur, con una defensa más ortodoxa tras la pérdida en las transiciones del rival que se originan y progresan por fuera, con Busquets y Rakitic repartiéndose la mitad del ancho.
Dembélé en derecha permite activar las dos bandas con profundidad
En esta disposición, Messi pasa a gestionar toda la mediapunta, orientando y alimentando a su albedrío la zona que desee, la derecha, con Dembélé y Semedo o Roberto, y la izquierda, con Coutinho y Alba. El comportamiento difiere por completo y nace seguramente de las circunstancias propias de cada partido y rival. No se esconde que el Barça es de por sí una plantilla de jugadores, más que de modelo, y este dibujo encuadra a sus principales figuras ofensivas en espacios que no invaden al compañero cuando realizan sus movimientos más reconocibles. Así, al no cuajar de la misma manera las figuras de Aleñá o Vidal, situar a un Dembélé, que por el momento ha jugado sus mejores minutos en derecha en este Barça, en ese costado, habilita un margen para pensárselo. El dibujo guarda una intención concreta, y no es otra que estirar por ambos costados independientemente dónde este el balón; que cada una de las bandas, bascule hacia donde bascule el rival, puede girarlo en cualquier momento.
lbrt43 78p · hace 321 semanas
Retape · hace 321 semanas
Por otro lado para recuperar a gente como Rakitic, el 4-2-3-1 es lo que mejor le viene, el croata ha cuajado su única temporada notable ahí, como interior siempre le ha faltado algo, giro, pase por su orientación, estaba muy sólo con muchos metro que cubrir.... Con Luis Enrique parecía un interior cualquiera, el año pasado parecía otro, pero este en cuanto vuelve al 4-3-3 se resiente.
AArroyer 101p · hace 321 semanas
Parece que Sergi Roberto vuelve a ganar papeletas para ocupar el interior pero es verdad que como alternativa suma algunas cosas y facilita algunas tareas a sus mediocampistas -Busi y Rakitic-. Y ganas activación en una banda derecha que sigue siendo ciega en el 4-3-3, no se produce demasiado. Con Dembélé en derecha hemos visto una sociedad interesante con Semedo y mucha más imprevisibilidad para profundizar. Ya no se profundiza siempre por izquierda hacia Alba.
@Retape
Muy de acuerdo en lo de Rakitic. Cuando está Arthur, creo que todos vemos que es el jugador a activar, y desde el interior encaja realmente bien, siendo Rakitic el damnificado, pero sin Arthur, Ivan está más cómodo en paralelo a Busi. A mí en término de control y circulación de balón creo que no hay solución buena desde lo táctico, los problemas van a ser similares, peor ganas a Dembélé en derecha y a Messi centrado. La ocupación es algo más racional.
fernandojb · hace 321 semanas
Y justo Asensio es mejor a pierna cambiada y mas por dentro ? cuando su rendimiento es por la izda y en contexto de terreno por recorrer.
y porque es tan bueno para el barca estirar las bandas y para el madrid al revés ?
AArroyer 101p · hace 321 semanas
No es que se reduzca todo a "Dembélé es mejor por la derecha". Sino que poner a Dembéle por la derecha te equilibra la profundidad, eres profundo por los dos costados, no tapas el pase a Jordi Alba si pones a Dembélé en derecha. Si pones a Dembélé en izquierda, Messi parte desde la derecha, y ya sabemos qué pasa en esa banda cuando Messi parte desde alli, que acaba en el centro y no hay profundidad y los movimientos de compensación desnaturalizan la circulación, nadie se siente potenciado, ni interior ni lateral, porque Messi siempre mira hacia Alba.
Antes de la lesión, Dembélé estaba muy a gusto en derecha, es ambidiestro y controla la pelota con las dos piernas, no tiene un ojo tapado, digamos. Démbélé en la derecha te abre el campo, te permite centrar a Messi, te permite ocupar el campo de manera más racional en todos los momentos del juego y porque Dembélé en derecha no tiene salida ciega, te sale por fuera, te sale por dentro, se asocia con las dos piernas, no hay contraprestación.
Asensio en izquierda se queda sin disparo y además manda a Vinicius a la derecha, que pierde la diagonal y el cambio de ritmo. Y el Madrid ha demostrado no sacarle jugo a un centro lateral con Benzema como '9', salen perdiendo todos: Asensio, Benzema y Vinicius.
Con Dembélé en banda natural, por las características de Dembélé y por cómo se potencian a los demás, tiene multiples razones para salir a cuenta. Con Asensio a pie natural no sé cómo se potencia el juego de Asensio, puede que ganes algo de Marcelo, pero el equipo está construido en torno al desequilibrio de Vinicius, y un tridente Asensio en izquierda, Benzema y Vinicius en derecha no sé a quién potencia, porque no potencia a ninguno de los tres y tampoco al colectivo.
herbaseca · hace 321 semanas
Ni siquiera parece una opción que a Valverde le convenza mucho, teniendo en cuenta que sólo la usó el otro día contra el Sevilla y durante un tiempo muy limitado. En ese sentido, resulta más intrigante el que en el mismo partido volviera a insistir en poner a Coutinho y Dembelé por el mismo lado.
En el caso de este partido contra el Madrid también tiene la contrapartida de igualar las piezas en mediocampo (cuento a Coutinho y Dembelé como delanteros, aunque consten en la línea de mediapuntas). No veo en el Barça ese jugador que desde otra línea del campo acudiese a hacer más fluída la circulación en el medio, como hace Benzemá en el Real Madrid; no por lo menos con calidad y continuidad (esa función es tradicionalmente la de Messi). Eso facilitaría, a priori, las vigilancias defensivas en esa parcela, permitiendo a Casemiro centrar su atención en Messi sin preocuparse de que otros jugadores barcelonistas ocupasen su espacio.
No sé, yo la veo la opción más natural para que sus jugadores puedan sentirse menos atenazados por el sistema, pero quizás es debido esta posible inferioridad en el centro del campo que Valverde prefiere buscar otras soluciones...
fernandojb · hace 321 semanas
pero el asensio importnate, el fundamental en el madrid ya le hemos visto, no hay que descubrir la rueda y le hemos visto contra el barca supercopa, el ajax, el psg , el bayern.
también creo que el futuro de asensio como jugador no este orientado a posiciones tan arriba, ahora con la irrupcion de vinicius pues se ve lo que es un jugador claramente delantero y Asensio y eso no le quita nada como gran jugador, sino que potencia su futuro.
tema dembele, pues el que si hay que buscar un rol es para dembele en el barca a gran nivel, porque a dia de hoy poco a jugados estos partidos,
que es en la derecha, o en la izda o por dentro o por fuera pues ni idea, pero la banda de hoy si sale, semedo , sergi y dembele es puramente tactica, para intentar aprovechar o parar esa banda del madrid.
es decir si mañana juega el barca contra el psg o el bayern o el city pues igual desparece, porque no creó que vaya mas allá de eso.que igual a partir de ahora se acredita como la solución, pero estos partidos de eliminatorias están para lo que están.
sasha · hace 321 semanas
Mark · hace 321 semanas
Dembélé que es lo más parecido a un delantero TOP, quitando a Messi obvio, que tiene el Barça ahora mismo se vería potenciado y Coutinho también creo que obtendría un rol que le iría mejor y que no le exigiría tanto a nivel de profundidad y Cou en forma también es TOP. Rakitic vería el fútbol de cara y podría aprovechar mejor sus condiciones de pasador y ahí sus defectos no se notarían tanto y Rakitic bien potenciado, no es un jugador del nivel de un Busquets, Kroos, Pjanic, Modric, De Bruyne, Silva, etc. pero sí uno muy bueno, no lo olvidemos.
A Messi creo que también le podría mejor, por tener más opciones y a Luis, no lo se, pero creo que él ahora mismo debe centrarse en abarcar menos de lo que intenta y recuperar un poco la confianza, aunque su físico y su estado es el que es.
Ya para la temporada que viene, se debe volver al 4-3-3 y quizá la discusión deba ser si Messi tiene que volver al falso nueve o no.
AArroyer 101p · hace 321 semanas
Pero es que yo no me refiero a Asensio como jugador, me estoy refiriendo a un Asensio que tiene que entrar en un sistema en el que el 4-3-3 no se ha tocado y donde Vinicius y Benzema son inamovibles porque donde están colocados juegan y rinden potenciados y ademas son supercomplementarios entre sí. Desde esa estructura, desde el presente, y con una banda derecha donde Lucas no supone un plus en ataque y bale "no está", se entiende que Asensio puede encajar porque, como consecuencia del lado fuerte, que es el izquierdo, él puede cargar el disparo, es decir, un rasgo muy potente de su fútbol sale a la luz sin tocar lo que ya es luz en el sistema -Vinicius-Benzema-, independientemente de si el futuro de Asensio o el pasado, es en izquierda, o si en la selección ha rendido en derecha metiendo goles desde fuera del área. La lectura es que su ubicación en derecha, a pie cambiado, no condiciona el plan general y puede sumar con su golpeo y su zurda.
No hablamos de Dembele en derecha y Asensio en izquierda o derecha como análisis frio, hacemos análisis en base a un escenario táctico donde uno a pie natural ahora no compensa porque desactivas el plan general -Bensema-Vinicius- y otro jugador, Dembélé, a pie natural, que sale a cuenta por muchas razones actuales. Recalcar la palabras actual, en contexto, por el sistema y los jugadores que rodean y las virtudes del jugador jugando en derecha.