La ausencia de Leo Messi influye no sólo a nivel de determinación, donde obviamente el Barcelona pierde a su gran valor para encontrar caminos hacia el gol, sino también en todos los aspectos del juego. Desde las soluciones que pretenda buscar Ernesto Valverde para trazar un plan sin su gran estrella, como en el planteamiento que pueda buscar Julen Lopetegui, que evidentemente varía sin la presencia del 10.
La primera pregunta que deberá hacerse el técnico vasco está relacionada con las carencias que tiene el Barcelona al perder a Messi. El equipo culé suele amasar mucha más posesión que su rival, y en ese escenario casi el único argumento para desequilibrar de forma constante es el argentino. Suárez ha funcionado mucho mejor dando apoyos con la defensa rival más adelantada, y nombres como Ousmane Dembélé siempre van a hacer más daño corriendo a campo abierto.
Sin Messi, el Barcelona necesitará aún más espacio para ejecutar sus jugadas de ataque con éxito
En fútbol, lo más complicado es encontrar espacio para ejecutar, y en un Barcelona que con la presencia de Arthur ha conseguido ganar control y estar más tiempo en campo contrario, Messi se hace imprescindible. Sin embargo y aunque una posesión dividida daría algo de aire al equipo culé, parece evidente que el Real Madrid no va a priorizar una defensa del espacio ubicando al equipo cerca de su propia portería, de modo que ese escenario que de algo de margen a los toques de Suárez y las apariciones de Dembélé o Coutinho, pueden aparecer por sí mismas.
Porque la ausencia de Messi tiene un peso mucho más amplio. El argentino es el gran verdugo liguero del Real Madrid en la última década, y sin él, apostar por presionar es casi una obligación, por no decir que las piernas de los blancos irán solas hacia delante sabiendo que una pérdida no supondrá que el argentino ataque a campo abierto. Si a eso sumamos la situación actual del conjunto merengue, ser agresivo sin pelota parece casi una obligación.. La lógica dice que por ahí irá la intención de Lopetegui, que además cuenta con un elenco de futbolistas que puede darle una base de posesión en el Camp Nou lo suficientemente estable como para ejecutar esa presión con acierto.
Presionar cobra más sentido para el Real Madrid sin la presencia de Leo Messi
Aquí hay, evidentemente, un camino que recorrer por el Real Madrid, ya que el Barcelona al menos ha mostrado estructura desde el ingreso de Arthur que le ha permitido ejercer cierto control sobre los encuentros, cuestión que en el equipo blanco sólo sucedió de forma efímera en el comienzo de curso. Está por ver si la ausencia de Leo Messi ‘suelta’ el pie de los futbolistas blancos, presa de la ansiedad en los últimos tiempos, cuestión imprescindible para tener fases prolongadas de dominio en el Camp Nou.
En cualquier caso, una posesión dividida puede derivar en un contexto también válido para el Real Madrid, que ha mostrado un problema de finalización frente a rivales muy replegados. La ausencia de un plus de desborde en el último tercio puede verse compensada si se dan situaciones de ataque a espacios más abiertos, donde lógicamente pueden llegar finalizaciones con menor oposición, cuestión que también puede ser importante para que el campeón de Europa mejore su actual ratio de acierto de cara a portería. Es una evidencia que la ausencia de Messi presenta en escenario radicalmente distinto para Lopetegui, y ahora está por ver el enfoque que le da el vasco a tan particular circunstancia.
David de la Peña 28 octubre, 2018
¿Cómo enfocará Lopetegui la ausencia de Messi? Visitar el Camp Nou pasaba por un plan muy concreto a nivel defensivo: proteger el espacio y desde ahí y tras robar, juntar pases para desordenar al Barça, pero sin Leo igual esa actitud cambia, lo que, ojo, puede derivar en un contexto que pueden aprovechar Suárez, Coutinho o Dembélé, si juega.