Borja Mayoral volverá a probar fortuna lejos del Real Madrid. Allá donde muchos aseguran que hace frío, que los inviernos son más largos y hay más horas de sombra que de luces, el destino le tenía reservado al de Parla una nueva aventura a unos cuantos kilómetros de casa. En esta ocasión no serán tantos como en 2016, cuando emigró cedido al Wolfsburgo alemán, sino que la adaptación al Levante de Paco López, en teoría, no tendría por qué ser un problema para un chico que ya ha celebrado goles en Primera División. Mayoral necesita minutos y si en el Ciutat considera que puede tenerlos, en realidad el mayor beneficiado de su llegada no es otro que el técnico de Silla; pues gana un cromo que hasta ahora –con Roger Martí, Emmanuel Boateng y Raphael Dwamena- no tenía.
Mayoral es un delantero que se mueve mucho fuera del área
El Levante UD afronta esta nueva temporada con hasta cuatro delanteros –dejando a un lado a Morales- en nómina. El reparto, coherente con el arquetípico 4-4-2 de Paco López, es además muy complementario entre sí. Como se pudo apreciar en el derbi del pasado domingo, el cuadro levantinista afrontó toda la segunda mitad con sus dos referencias ofensivas –Roger y Boateng, y después entró Dwamena- dentro del área che, esperando el centro de Morales, Jason o Bardhi. Una estrategia en la que el actual delantero de la sub-21, acostumbrado (también por el Madrid) a tener que estar muy relacionado con el juego, podrá ofrecer soluciones muy distintas a las de sus otros tres compañeros de demarcación. Porque ese es el fútbol que mejor define a Mayoral: sabe moverse fuera del área, recibiendo muchas veces de espaldas, para acabar apareciendo en el remate, en zonas –como hizo durante su etapa con Zidane- que le permiten atacar corriendo por sorpresa.
Desde su llegada a principios del mes de marzo, el Levante de Paco López se ha caracterizado por dos argumentos ofensivos que le han garantizado una cuantía de puntos a tener en cuenta: con Campaña dentro del doble pivote, contemporizando –con balón y sin él- todas sus acciones, la estrategia levantinista se singulariza por atacar desde un ritmo bastante alto, y haciendo uso de una fluidez que, he aquí lo mejor de todo, lleva a sus cuatro piezas ofensivas –sobre todo a sus hombres de banda- a intercambiar constantemente sus sitios sin jamás llegar a pisarse entre ellos. De esta forma, es muy común que Morales, que puede partir por izquierda, acabe jugando por el otro lado, mientras que en el caso de los dos delanteros tampoco existe un patrón claro de cuál debe atacar cada palo en concreto. Una movilidad en la que Mayoral, respaldado por su tendencia para actuar lejos del área, podrá servir de mucha utilidad.
Mayoral podría casar bastante bien con Morales y Roger en ataque
Al lado de Roger, y con Morales revoloteando desde cualquiera de los dos costados, si es que es esta la combinación que decide utilizar el valenciano, Mayoral podría ser de bastante provecho en función de las consignas (ofensivas) citadas anteriormente. Sacando partido a su movilidad, sirviéndose de que al de Parle le gusta abandonar el área para conectar con el sistema, Morales –que ha empezado la temporada rapidísimo- o Roger –que está muy atinado en zona de remate– podrían ser los principales beneficiados del juego de Mayoral, a la hora de rentabilizar todos los espacios que el de la sub-21 es capaz de provocar con sus movimientos y sus toques tras de sí. Un abanico de recursos, en definitiva, que si bien es cierto que Paco López aún debe darle forma, ya se le puede empezar a intuir al Levante un fondo mucho más rico del que posee.
AdrianBlanco_ 6 septiembre, 2018
Si Paco López se decide por ella, creo que la combinación Morales-Mayoral-Roger puede darle bastantes cosas a este Levante.Tiene la velocidad de Morales, la determinación de Roger y, ahora, va a ganar el nexo de Mayoral, que ya sabemos que se ofrece mucho y muy bien; lo que va a ofrecer otro tipo de soluciones en según que contextos, como en la segunda mitad ante el Valencia. A mí es un fichaje que me encaja muy bien.