El Shakhtar Donetsk de Lucescu fue un equipo ucraniano-brasileño que encandiló al fútbol europeo en varias etapas consecutivas pero diferentes. Elano, Jadson, Brandao, Fernandinho, Willian, Douglas Costa, Teixeira, Dentinho o Luiz Adriano se encuadraron entre los clásicos que le dotaron de un carisma muy especial. Ahora, son el interior Fred y la línea de mediapuntas formada por Bernard, Taison y Marlos los que lideran su encantamiento. Fonseca, su entrenador.
La peculiaridad que une a esos cuatro brasileños y que les convierte en armas apropiadísimas para la Champions moderna radica en que no pierden el balón bajo presión. De la lista anteriormente citada, el único con dicho don sería el hoy blue Willian Borges, y sin embargo, en el presente, los cuatro pilares atesoran tan relevante virtud. A partir de ahí, Paulo Fonseca diseña planteamientos competitivos que le permiten arrebatar el control sobre el ritmo del juego incluso al Manchester City de Pep Guardiola en según qué circunstancias.
Lo único que ha perdido este Shakhtar ha sido poder físico.
Si bien la importancia de los susodichos se halla bien repartida y por ejemplo el caso de Taison, que siempre fue extremo y ahora en el carril central está realizando diabluras, llama mucho la atención, el futbolista que sintetiza la idea colectiva es sin duda el mediapunta derecho Marlos, apodado «Lionel» Marlos por el remotísimo -la verdad, casi imperceptible- parecido que une a su conducción con la zurda con el mejor jugador de la modernidad. Desde el costado, aplica su fútbol cerebral y asociativo encontrando momento y lugar que generan dominio y peligro a su debido tiempo, representando e identificándose con esta nueva versión del Shakthar Donetsk que se presenta menos salvaje en el mal sentido conservando todo lo bueno de su salvajismo original salvo, eso sí, aquella exuberancia física de púgiles como Fernandinho, Douglas Costa y Luiz Adriano.
Foto: STANISLAS VEDMID/AFP/Getty Images
javi15195 7 diciembre, 2017
Ahora mismo acabo de terminar de verlo y ha sido potente lo de los mediapuntas del Shakhtar. El que más Marlos conduciendo cada contragolpe y lo que insinua Abel con lo que comenta: su capacidad para dividir con balón y soltar para el desmarcado. La verdad que me ha impactado, este equipo con algo más de potencial defensivo atrás podría complicar a más de un equipo fuerte.