David de Gea es un portero claramente superior a Joe Hart. Ambos representan fortalezas de nivel dispar a la hora de poder decantar los derbis de Manchester, citas que han adquirido una trascendencia mayor desde que ambos clubes luchan por iguales objetivos. Sin embargo, ayer no hubiera significado nada si un traspaso les entregara la portería del rival durante 90 minutos. Nadie los puso a prueba, consecuencia del excesivo respeto y el valor que Louis van Gaal y Manuel Pellegrini dieron a no salir derrotados.
Sin Silva ni Agüero, el City tiene más complicado poseer fases de dominio con el balón prolongadas durante los partidos. La baja del canario reintroduce el debate sobre Yaya Touré, pues aparece como oportunidad para adelantar su fútbol y reducir las contraprestaciones que produce el Touré más retrasado. Pellegrini aceptó que el balón sería red devil y apuntaló su medular con Fernandinho junto a Fernando. Además otorgó a Sagna un papel de zaguero puro, sin incorporaciones permitidas, abriendo a De Bruyne y formando un 4-4-2 sin la pelota muy evidente en su forma e intenciones.
Van Gaal redujo a Martial a un solo movimiento
No obstante, van Gaal no quiso ser menos. Halló más seguridad física con Jones junto a Smalling, formó un doble pivote bastante fijo con Schweinsteiger y Schneiderlin, W. Rooney fue muy superado por V. Kompanysalvo en la fase de salida desde atrás, pues los citados centrales olvidaban cualquier intervención, y otorgó la banda izquierda a Anthony Martial. Las ausencias de Depay (desequilibrio) y Blind (ventajas desde el primer pase) hicieron del United un cartabón sin escuadra. Herrera y Mata apenas pudieron generar recepciones en tres cuartos de campo y Wayne Rooney cuajó otra actuación desprovista de toda brillantez al ser muy superado en el duelo individual por Vincent Kompany.
Habilitado el contexto, nada escapó de la rutina. Las cuerdas quedaron amarradas, el ritmo fluctuó entre el medio y el alto pero sin opciones claras de superioridad al contragolpe o alrededor del balón. Nadie improvisó ni se inspiró para provocar cosas. Marcos Rojo en izquierda y el mencionado Sagna en derecha tenían casi prohibido subir, los pivotes de ambos conjuntos se miraban de frente formando un cuadrado, De Bruyne y Martial buscaban el desequilibrio para descargar en el lado contrario, donde Sterling recibía taponado y sin socios de calidad -Touré y Bony; idiomas diferentes-, mientras Martial desbordaba en diagonal por dentro y derivaba el flujo de sus jugadas hacia el gesto final de Antonio Valencia, el lateral más ofensivo.
Bony no ofreció nada a sus compañeros de banda
El paso de los minutos acentuó toda esta sensación. El United no precipitó su plan hacia el arreón ni las ganas por ganar como local y el City estuvo cómodo entregando toda la iniciativa. La ausencia de acción definió un derbi de no agresión.
Mark 26 octubre, 2015
Que poca cosa aporta Navas comparado con Sterling o Kevin. Ese cambio al poco de empezar el segundo tiempo de Navas por Sterling mato al City en ataque.
Hart es un porterazo en mi opinion, no hay tanta diferencia con De Gea.