Steven Gerrard tiene 34 años; su juego ya no es el mismo que cuando cumplió los 25. Ni gira ni ejecuta a la misma velocidad, sus sprints se han recortado y sus descansos entre esfuerzo y esfuerzo necesitan de más tiempo. Probablemente a ello se debió que su mejor temporada reciente fuese la pasada, la 2013/14, en la que ocupó de manera regular la demarcación de mediocentro. Delante de la defensa, lo que fue perdiendo no le hace tanta falta, y lo que fue tomando -lectura como director y calidad posicional- cobra más utilidad que en otras zonas. En el actual curso, aunque con alguna excepción puntual, sigue siendo el pivote del Liverpool FC. Y su creador de juego.
El Chelsea, un hueso para S. G.Si el Chelsea fue un infierno para Brendan Rodgers el año pasado fue por dos causas muy localizadas. La primera, que en defensa era el único equipo de la Premier con nivel Champions League. Redujo espacios a Luis Suárez y le anuló como fuente de ventajas. La segunda, que se trataba de un equipo fantástico trabajando sobre los mediocentros del rival. Sus delanteros siempre son físicos y entregados (Diego Costa, Drogba, Schürrle, Eto´o, Torres, Demba Ba…), y, cuando juega en 4-2-3-1 -su sistema principal-, cualquiera de sus mediapuntas tiene una calidad defensiva muy por encima de la media en la posición, ya sea Oscar, Willian o incluso Cesc quien actúe como tal. A la capacidad individual se suman las ideas de su técnico Mourinho, genio supremo preparando trampas defensivas. Con tales credenciales, siendo hoy el Liverpool peor y el Chelsea (mucho) mejor, a Gerrard se le presumen problemas para esta tarde. Pero bueno, es El Capitán y le deben una.
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@javi15195 8 noviembre, 2014
Este mensaje está bien encriptado ^^ Si no recuerdo mal (corregidme si me equivoco), lo curioso de aquel Liverpool 1-2 Chelsea de la pasada campaña no fue que Gerrard estuviera encimado por algún jugador blue, sino que le incomodaron en la siguiente acción al control, giro y levantamiento de cabeza. Le dejaron sin socios. Los tan bien intencionados pases de Gerrard durante la pasada campaña se apagaron en aquel encuentro. Pases estériles, sin alma, ni una finalidad clara para abrir la fortaleza formada por José Mourinho. Y eso hizo que los menos buenos para ésto tuvieran que coger 'las riendas' del partido. Y sí, podrían pasar de mediocampo, pero las soluciones terminaban puesto que el Liverpool por entonces generaba las ventajas desde atrás y a partir de ahí construían. Eso provocó que los reds tuvieran que gestar sus opciones desde más arriba, donde 20 piernas les esperaban alineadas en el último tercio de campo. ¡Difícil papeleta aquella!
Como red, la verdad es que no veo nada bien el partido, y si Mou plantea algo similar a lo visto en aquel encuentro, le va tocar sudar tinta china a Rodgers para traer de vuelta aquel Liverpool de passing game con Gerrard como eje del sistema. Tal vez Coutinho ( http://www.ecosdelbalon.com/2014/11/coutinho-cesc… ) y algún socio en 3/4 tipo Sterling o Lallana… 😉