Resulta que en el mes en el que el Manchester City ha recuperado todas sus opciones de ganar la Premier, Martin Demichelis ha sido elegido el jugador más valioso de ese tramo. Decimos que llama la atención porque fue precisamente Martin el que comenzó a dejar fuera de la Champions al City con su expulsión ante Messi, hace escasas semanas. A sus 33 años es obvio que el argentino no vive su mejor momento pero esta dualidad competitiva tampoco es tan extraña en él. Siempre fue así y por eso ha sido un jugador tan atractivo y diferente.
Demichelis siempre ha sido una figura futbolística apasionante
El gran Demichelis se dio seguramente entre los años 2008 y 2009. Si hoy no le recordamos tanto es porque, pese a salir campeón en 2008, aquel no era un enorme Bayern como el actual. Ribery acababa de llegar de Marsella, Bastian estaba lejos de ser Schweinsteiger y Thomas Muller apenas era un canterano. No obstante, los bávaros sí que tenían algo de gran poder e intimidación: su pareja de centrales, Lucio y Demichelis. Brasileño y argentino formaban un tándem precioso, de esos que te ponían por sí solo ante el televisor. Molaban.
Además, aquellos también eran los días del Demichelis mediocentro, posición conflictiva en el argentino. Su personalidad inquieta le hacía pedir todos los balones –estilo Gago-, más allá de si convenía o no recibirlos. Hay que matizar que a aquel Bayern añadía una carencia importante de calidad en su mediocampo. Van Bommel y un veterano Ze Roberto formaban un doble pivote porque el que se solía fracturar el cuadro alemán. Como Micho tenía clase, regate y talento, a veces le ponían ahí. Ejerciendo de medio se limitó a ser útil en su carrera.
El mejor Demichelis coincidió con un Bayern Munich no dominante
Su citada valentía con la pelota ha sido una moneda de dos caras en su carrera. Cuando el Málaga contrato a Demichelis para su proyecto sabía que estaba instaurando un gen de grandeza en el mismo. Martín fue clave para convencer a futbolistas como Jesús Gámez, Weligton o Iturra de que había que atreverse a jugarla. Más allá de su rendimiento, que fue bueno, Micho quedará en la memoria del malaguismo como una figura capital de los mejores momentos de su historia.
La Selección ha sido otra película. Allí el lujo innecesario y el error no forzado se pagan con sangre. Demichelis solo disputó un Mundial con Argentina y la cosa no fue bien. Ante Corea del Sur, el central cometió la irresponsabilidad que ha marcado su juego desde sus inicios, perdiendo una bola siendo el último defensor. El país pidió su cabeza pero su buen nivel le concedió nuevas oportunidades. Un año y medio después, ante Bolivia, en el que quizás ha sido el momento más tenso de la albiceleste en lustros, Demichelis volvió a perder una pelota terrible que significó el empate visitante. El Monumental no aguantó más y rompió en insultos hacia su paisano, que ya nunca más sería convocado por Sabella. Cosas de ser especial.
Pablo 7 mayo, 2014
Siempre fue un tipo de talento y personalidad, ya cuando debutó en River, muy joven. Con la selección siempre tuvo una relación rara: creo que debió ser convocado en 2006 pero esa fue una lista… particular. De todas formas, a pesar de haber jugado en un gigante de Europa nunca tuvo aclamación popular para que fuera parte del seleccionado. La Liga Alemana, por muy Bayern Munich que se trate, queda lejos. Y como en UCL en esos momentos el equipo alemán no tuvo grandes participaciones…
Después recuerdo que tuvo algunos conflictos en el Bayern y la verdad que su paso al Malaga lo hizo caer fuera del radar. Es importante que haya ido al City pero Sabella no creo que lo convoque. Es un técnico que va a lo que él interpreta como seguro y en ciertas partes del campo de juego prefiere cierta ortodoxia. Una pena.
PD: Con River, Micho tuvo hace poco una actitud muy fea. Esas cosas en la consideración popular pesan bastante también.