Con un partido soso y sin brillo, el Bayern Munich se coló en una nueva semifinal de la Champions League. El motivo de su clasificación fue simple: tiene a Arjen Robben. El holandés, curado de todos sus males tras Wembley, es un crack como no hay tantos. A sus 30 años, Arjen juega mejor que nunca y decide como siempre. Él solo se bastó para eliminar a un Manchester United que, dadas las circunstancias, diríamos que jugó bien.
Robben es uno de los mejores jugadores del mundo hoy día
La primera parte fue muy aburrida. Guardiola inventó un nuevo sistema de juego, una especie de 2-3-4-1 que en la práctica consistió en pasársela a Robben. El invento se organizó de la siguiente manera: Boateng y Dante eran los centrales y no tenían laterales a su alrededor. Por delante estaban Kroos como mediocentro y Lahm y Alaba como interiores. Robben y Ribery eran extremos puros y entre líneas intentaban recibir Gotze y Müller. Arriba, Mandzukic. Frente a ellos, un 4-4-2 clásico del United con Kagawa en la izquierda y Rooney y Welbeck en punta. Había muchas diferencias con el partido de ida.
Para empezar, en la izquierda se repitió el dos contra dos entre Alaba/Ribery y Jones/Valencia, pero la foma de atacar del Bayern fue distinta, con Alaba mucho más en el rol interior que sorprendió en Old Trafford. Pese a ello, Kroos no caía demasiado a ese lado a buscar la superioridad numéricaRobben fue la primera mitad y como Ribery no se estaba yendo de Jones, de ahí los locales no sacaban nada. En el otro lado estaba todo. Con Lahm, Kroos y los centrales haciendo una sencilla superioridad en salida, el Bayern la sacaba fácil desde atrás. Sin embargo, arriba no estaba encontrando casi nada. Gotze desconocía su papel sobre el campo, mientras que Müller solo parecía tener sentido rematador por si le caía algún centro (Buen Vidic). El Bayern era Robben, y con eso bastaba para ser mejor que el Manchester pero no para jugar bien y desbordar.
No obstante, hay que decir que más allá del detalle de Rooney, el United casi no tenía salida. El factor Welbeck esta vez no estaba pesando. El inglés, a diferencia de la ida, no gozó de libertad para esperar donde quisiera y tuvo que currar mucho contra la medular bávara. A su vez, Kagawa no alcanzaba a descolgarse y solo Evra asustó con una subida aislada. Vamos, que el Manchester era solo defensa y el 0-0 al descanso resultaba lógico y comprensible.
El Manchester United llegó feliz al descanso pese a no atacar
Lo cierto es que los visitantes se fueron a la caseta con motivos para el optimismo. Apenas habían sufrido y la clasificación se encontraba a solo un gol. Con valentía y toda la grandeza que confiere su camiseta, el United adelantó líneas y comenzó a simular jugadas propias de su libreto de toda la vida. Kagawa lanzaba contras, Valencia regateaba por fuera, Fletcher se marcaba diagonales propias de 2008 y Evra, ya con tiempo para subir, la clavó en la escuadra. Partido nuevo
El cachetazo del Manchester tuvo una respuesta digna de campeón por parte alemana. El Bayern empató segundos más tarde gracias a un gran remate de Mandzukic tras el único movimiento útil de Gotze en toda la noche. De hecho, Pep sustituyó a Mario para dar entrada a Rafinha y recuperar así algo bastante más parecido al 4-2-3-1 “habitual”. El choque entró en una fase de cierto descontrol. Aparecieron los espacios y ahí cualquiera pudo matar al otro, aunque es justo decir que el Bayern tenía las de ganar con Ribery y Robben. El francés se calentó y pudo por fin superar a Jones. Pese a ello, el determinante volvió a ser el zurdo con el diez a la espalda, que no es Messi pero a veces lo aparenta. Asistió en el 2-1 y marcó el 3-1, con suerte pero con merecimiento. De aquí a mayo, Guardiola buscará reactivar su juego de posesión, algo escacharrado últimamente. Mientras tanto va tirando de Arjen, que ya no falla.
Ricardo 10 abril, 2014
A mí siempre me pareció mejor Robben que Ribéry. Quién sabe qué sería de este jugador si no se lesionara tanto y fuera un poco más constante.
No veo al Bayen tan fuerte, se sentía más dominante el año pasado, me gustaba más su estilo de juego directo y vertical, a Götze no lo veo tan cómodo, sigo creyendo que Guardiola comete un error al tratar de convertirlo en falso 9, es un crack, pero no es Messi, es más mediapunta. Será interesante ver cómo se adapata Guardiola a los3 equipos restantes.
De parte del ManU no entiendo cómo siguen dejando a Welbeck, corre y muerde mucho con la presión, pero creo que ahora fue más que todo a luchar con los centrales (habitualmente es superado) en vez de hacerlo con Lahm, ¿o ustedes qué opinan? A ser sincero vi el juego a ratos porque cambiaba entre uno y otro y me pareció mucho más interesante el Atlético-Barca.