Las bajas de Wayne Rooney y Robin van Persie definían cualquier punto temporal del encuentro. En las diferentes sensaciones que manejan Manchester United y Chelsea, ausencias tan sensibles podían permitir a los de Mourinho imponer ritmo y posiciones sobre el campo. Desde el punto de vista de los red devils, que dos jugadores tan amenazantes y autónomos no pudieran comparecer, los obligaba a ser lo más colectivos posible; involucrando a todas las piezas en el engranaje del juego.
Los primeros 10 minutos fueron visitantes en base a la última idea expuesta recientemente. Moyes quiso tener la pelota a través de muchos hombres, ordenó una constante participación a Welbeck y Januzaj para que dieran múltiples opciones al poseedor, estableciendo conexiones y triángulos con Evra-Young y sobre todo Rafael-Valencia. El reto era mayúsculo, pues a todo ese dinamismo y movilidad de los puntas, extremos y laterales, la meta solicitaba estar precisos. En ese tramo lo estuvieron y jugaron varios minutos no sólo en campo blue, sino cerca del área, profundizando con claridad.
United comenzó ágil. Chelsea esperó y controló el partido
Un disparo inocente de Ramires tras una pérdida de Phil Jones rompió la dinámica. Tras recoger mansamente el esférico, De Gea sacó de puerta Hazard sigue a pleno pulmóndefectuosamente, recuperó el Chelsea, transitó y en cierto modo se terminó el United. A partir de ahí entró en juego el creciente poder del Bridge para controlar con mayor seguridad el tempo de los encuentros. El estado de confianza de los jugadores ha ido tomando temperatura, pero como su chip es en todo momento atacar acortando el tiempo y recuperar la posición desde el compromiso, el Chelsea golpea y controla; golpea y se abrocha. Se une, trabaja y autogenera identidad.
Con Eto’o por Torres, el portugués se justificó desde el espacio reducido, donde el camerunés es de swing y mecha corta, de olfato repentino. Le bastó al Chelsea, de igual manera, apoyarse en las caderas de Hazard, la continuidad y percusión de Willian y Oscar y en el pie de Daviz Luiz, ese raro y apátrida eslabón que jugando con la pelota es la verdadera Coca-Cola balompédica.
En el United volvió a impactar, hasta cierto punto, que las situaciones de mayor entidad y gobierno recayeran de nuevo en la zurda de Januzaj, incluyendo balón parado y apariciones en la zona del mediocentro –reminiscencias del primer Canales-. Que un gigante se agarre a un niño no es buen síntoma. Ya volverán Rooney y van Persie, los que aseguran resultados para generar autoestima. El camino inverso ha resultado ser muy complicado con la alargada sombra del Sir en el viejo Trafford.
Joel 20 enero, 2014
Y ahora qué hará Mou. Fichó a Matic, pero Luiz esta rindiendo bien… ¿Esos dos son compatibles? No veo fútbol portugués, así que realmente no sé cómo juega Nemanja(xD). Hace poco leí en la prensa local que es un posicional que defiende muy bien, pero cuando leo el análisis que publicastéis hace algún tiempo, pienso más en un box to box con gambeta que por A o por B comete errores garrafales de vez en cuando(prácticamente lo contrario de lo que imaginaba en un incio).