No hay en este momento reto más escarpado que el que está llevando a cabo Luis Suárez en el último mes. Sin Gerrard, Sturridge o José Enrique, el uruguayo ha hecho creer a media Europa que su Liverpool puede mirar de frente a cualquiera. Y no es tal. El plantel de los reds es sensiblemente inferior. Su mes de noviembre quizá sea irrepetible, lo que unido a que sin su cuota goleadora –no anotó ante City y Chelsea- el equipo boquea más de la cuenta. El calendario emparejó, seguidamente, dos de las salidas más difíciles del campeonato inglés para rebajar un poco las expectativas a los de Rodgers. Solamente las dificultades en las áreas del Chelsea –quién lo diría- dejó el partido más abierto de lo que el juego transmitió.
David Luiz fue la gran sorpresa en los ‘onces’. Brilló sobremanera
Con la que montó Luisito en el Etihad, y habiendo dejado a Özil en un centrocampista expulsado de la mediapunta, Mou no tendría que haber pensado mucho para repetir onceDavid Luiz jugó por Obi Mikel. Pero entre rotaciones y rival, saltó la sorpresa: David Luiz en la cocina. En 4-2-3-1. Tenía su lógica. El Liverpool cede más balón que el Arsenal y seguramente se sucederían muchas fases con Rodgers esperando en campo propio. ¿Lectura? El toque del brasileño es el mejor de la plantilla para superar pressing y encontrar a los mediapuntas, y además, su explosividad para taponar un contragolpe llevado por los veloces Suárez, Coutinho y Sterling parecía más adecuada que el corpachón de Obi Mikel. Ocurrió que el balón parado, el gran lastre del conjunto blue, puso el 0-1 demasiado pronto.
Brendan Rodgers volvió a utilizar su 4-1-4-1, con gran déficit en la recuperación de balón y en la basculación de las zonas más débiles de su defensa organizada. Con la obligación de proponer, los blues se pusieron manos a la obra, imprimiendo un ritmo de juego más que notable. El sensacional partido de David Luiz con la pelota le dio todo tipo de facilidades a un Chelsea que encontró muchas recepciones a espaldas de la segunda línea de cuatro: Henderson, Allen, Coutinho, Sterling. Con Hazard, Oscar y Willian moviéndose como alfiles, Stamford Bridge entró en combustión. Hazard empató con golazo y la marea bajó.
Aún estando cerca en el marcador, Rodgers no tuvo soluciones
Con el partido resituado y controlado, Mourinho reanduvo algún paso y templó a los suyos, descansó en David Luiz y esprintó buscando el robo con Oscar y WillianWillian se llevó once balones –exhibición de ambos en labores de recuperación-. En otro de los numerosos envíos de Luiz superando línea, se gestó el 2-1. Una enorme primera parte de los locales, reaccionando y controlando, llevó al descanso con ventaja a los de Mou. Tras reanudarse, el portugués hizo gala de su libreto y replegó sin grises. Dominar el marcador, entregar balón y correr con espacios. Con la salvedad de la pelota parada, el Chelsea volvió a dominar a su rival: en posesión del cuero o gobernando el espacio, los locales maniataron a su rival, que nunca fue dueño de sus pasos.
El control del juego siguió perteneciendo al Chelsea. Aunque su superioridad era igual con y sin balón, los del Bridge no dieron espacio a Suárez y sí balón a lo que tiene por detrás, que es nivel medio-bajo. Con las urgencias propias del resultado, siendo Suárez bien controlado por un brillante Cahill, Rodgers dio entrada a Iago Aspas y a Brad Smith –Joe Allen se retiró lesionado-, evidencias de una plantilla insuficiente para competir ante grandes adversidades. Seguramente tardó Mou en sacar a Torres para terminar de acercarse a Mignolet, aunque el gol no estuviera garantizado.
Abel Rojas 30 diciembre, 2013
Sobre el primer párrafo… pues yo pensaba ayer y no veo tan inferior como pueda parecer al Liverpool. Efectivamente Luis Suárez es el efecto corrector que hace que todos suban un punto, pero por lo demás hay recursos.
Mignolet no es Cech, pero le he visto más paradones que cantadas. De hecho solo le recuerdo un fallo garrafal. Los centrales, pues bueno. Para la Champions se me quedan cortos, pero lo mismo me pasa con el resto de la Premier salvo con Terry-Cahill si Mourinho se encierra. No es que Kompany y Lescott, Koscielny o los del United me den más seguridad. La pareja del Tottenham con el rumano y el belga molaría, pero no se ve. Y los laterales del Liverpool son fuertes si José Enrique está sano. José Enrique es realmente bueno. Para muchos el suplente ideal de Alba para la Selección.
En el centro del campo sí hay bajón. Leiva me parece corriente a secas. Arteta, Carrick, Barry -este es el "5" de lo que va de año en la Premier- y tal son tipos más completos. También digo que a mí Gerrard me sigue pareciendo uno de los centrocampistas más importantes del torneo. Y anda que no lo ha echado el Liverpool en falta en los últimos dos partidos… Y arriba Coutinho-Sterling-Sturridge-Luis Suárez son garantía.
Está claro que comparas esto con el Bayern y te sabe a pescado podrido, pero el nivel actual de la Premier es el que es. Podemos engañarnos y pensar que la progresión del campeonato va a 80 puntos porque el WBA es muy bueno, pero no es cierto. Se está yendo a 80 puntos porque todos los de arriba tienen muchos problemas.
No digo que el Liverpool sea favorito o que tenga que competir hasta la jornada 38, pero tampoco es una desgracia al lado de los otros si Luis mantiene el nivel que ha tenido hasta hoy. Que dicho sea de paso, no es el suyo.
Por cierto, a mí me gustó mucho ayer el partido del Chelsea. No creo en su centro del campo pero Mourinho lo compensa. En él sí creo. Y mucho. Y ayer su Chelsea me convenció plenamente por primera vez en Liga.