El primer triunfo del CA Osasuna en la presente temporada no fue contundente, espectacular o épico, pero sí muy interesante de cara a descubrir cómo Javi Gracia pretende optimizar un equipo que, hasta el momento, había demostrado ir corto de calidad, intensidad y determinación. José Luis Mendilibar lo había intentado y conseguido, al menos hasta este curso, con un sistema muy agresivo que buscaba que el partido se jugase lo más lejos posible de su área para que la falta de calidad de los suyos no les imposibilitara llegar a portería. Defensa adelantada, gran intensidad en cada disputa, ataques muy rápidos y muchos centros laterales; así era el guión preferido de Osasuna. Sin embargo, aunque lo ejecutase a la perfección, la victoria no estaba garantizada. Faltaba el último toque. El complicado, el definitivo. El caro. Ese que condenó a Mendilibar en Anoeta ante el Athletic, pero que permitió a Gracia debutar en su tierra con victoria ante el Elche. ¿Casualidad? El tiempo lo dirá, pero todo lo que sucedió antes de ese toque final fue muy diferente.
Con Javi Gracia, Osasuna ha cambiado su forma de atacar.
Así se vio desde el principio del partido, pero la jugada que precede al gol de Armenteros resume a la perfección el cambio estilístico que está experimentando el equipo navarro. DesdeCon Javi Gracia Osasuna espera más atrasado la defensa, Arribas pone un balón en largo y frontal hacia Oriol Riera, que con el pecho logra dejar de cara al deseado Roberto Torres y, tras una serie de afortunados rechaces, le llega a Armenteros en una posición idílica para que exhiba su magnífica zurda. El Sadar se frota los ojos al comprobar que su equipo ha sido capaz de marcar gol en su primer disparo a puerta, pero también se debió sorprender por la forma en la que llegó. Con Mendilibar [mapa de pases largos ante el Granada], la jugada de ataque más repetida nacía de su actitud defensiva. La línea estaba muy adelantada y todos los jugadores presionaban, con lo que el balón se recuperaba en campo rival, lo abrían rápido a banda, profundizaban por fuera y colgaban un centro lateral al área. Sin embargo, ante el Elche de Fran Escribá, los rojillos retrasaron diez metros la defensa, mostraron una actitud más reactiva y, por tanto, variaron su forma de atacar [mapa de pases largos ante el Elche].
Fue un corto periodo de tiempo, porque tras dicho gol el partido cambió ligeramente. El Elche se vio obligado a tener más balón, mientras echaba de menos a Carles Gil y se encomendaba al balón paradoAhora Osasuna centra muchos menos balones para crear peligro. Andrés Fernández, que ahora tiene menos protagonismo fuera del área pero que sigue estando igual de acertado dentro de ella, salvó el empate y entonces Osasuna se dedicó a «tocar». Asociaciones cortas e inocentes que no se traducían en ocasiones, pero que ralentizaron el choque. Así llegó el 2-0, otro gol con una historia detrás. Hasta la destitución de Mendilibar, Osasuna había puesto 43, 39 y 44 centros al área en sus tres primeros partidos. En el Coliseum, ya con Gracia al mando, la cifra bajó hasta 16. Y ayer, se quedó en 13. Un cambio notabilísimo que evidencia cómo los rojillos ya no buscan la cabeza de Oriol Riera, sino su pecho o su pie, como en este caso. Loties -de nuevo un central- tenía posibilidad de abrir a banda, donde ya había subido Damiá y esperaba Sisi, pero decidió poner otro balón en largo hacia un Riera que primero controló y luego lo guardó en la portería de Manu Herrera.
El Elche acortó distancias, pero ya era demasiado tarde.
En realidad Osasuna no cuajó un gran partido y en los minutos finales temblaría tras el gol de Albácar, pero El Sadar sabe mejor que nadie que no hay victoria importante sin sufrimiento. La primera de esta Liga llegó asumiendo pocos riesgos y mostrando una gran efectividad en ambas áreas; un camino totalmente novedoso para los navarros. Quizás lo segundo no sea sostenible ni a corto plazo, pero esta semana la parroquia rojilla ya no mirará con angustia la clasificación liguera. Paso a paso. Javi Gracia tiene mucho trabajo por delante, pero cuenta con una certeza con varios años de historia: si Osasuna llega a las últimas jornadas en la pelea, competirán mejor que nadie. Hasta entonces, atentos a su nueva forma de llegar a dar el último toque.
Brahm777 21 septiembre, 2013
No he visto el partido, pero si que creo que buscar a Oriol en el juego directo puede ayudar mucho a Osasuna, sobre todo teniendo por detras a Patxi y Roberto. Creo que el mediapunta puede dar algo de claridad en 3/4.