Se vieron más los defectos que las virtudes del Valencia, y el Real Madrid no experimentó mejoría. No obstante, el partido fue entretenido, amén de que dio pie a varias lecturas que hacen del análisis algo muy interesante, tanto ciñéndonos al puro ayer como de cara al futuro. En el día del regreso de Marcelo, la titularidad de Essien por Arbeloa y la nueva suplencia de Di María, Soldado no pudo imponerse a una dupla central formada por Carvalho y Albiol.
De inicio, pese a que repitieron los mismos medios que jugaron contra el Celta (Xabi Alonso, Khedira, Modric y Özil), el dibujo utilizado fue diferente. Aquel día Modric estuvo a la altura de Khedira, formando un triángulo junto a éste y Xabi; pero ayer fue el mediapunta de un 4-2-3-1 tipo, desplazando a Özil claramente hacia la banda derecha. El motivo fue la intención de apretar arriba a un Valencia cuya salida se basaría en un 1+2, siendo Parejo el pivote y Banega y Costa los interiores. El croata pillaría al primero; el doble pivote, a los segundos.
Cristiano Ronaldo sigue siendo la mejor noticia del Real Madrid.
El Madrid da al rival la opción de que le paren con faltasEl primer cuarto de hora es positivo para el Madrid. La Copa se ha convertido en un objetivo claro para ellos y se notó, y la combinación Bernabéu & Ronaldo se unió a ese deseo para empujar al Valencia hacia atrás. El Real no tiene problemas cuando llega a tres cuartos, le fluyen fácil las ventajas; Ronaldo está increíble y el resto de los de arriba son casi ajenos al momento colectivo. Es la suerte de tener a Mesut Özil y Benzema. Su pachorra les hace peores de lo que podrían hacer, pero también más invulnerables. No hay contexto que les haga decidir mal; son ellos y ya está. Dicho esto, como las soluciones llegan más por la inspiración de cada uno que por una cadena de pases fluida, al contrario se le da la opción de parar el juego con faltas, y el Valencia sumó hasta 8 en 24 minutos. Era la parte buena para los chés. La mala, que no salían de su campo; Alonso, Khedira y Modric dominaban los rechazos.
La técnica de Banega protegió al Valencia durante medio choque.
El Madrid da al rival la opción de que le paren con faltasValverde notó que con Parejo solo en la base no había manera de salir y pidió a Tino y Banega que bajaran a ayudarle. En el primer intento (minuto 14), Alonso persiguió a Banega hasta su campo y forzó un pelotazo que regaló la pelota a su defensa. A partir de ahí, el Real dio un paso atrás. Eso, sin Pepe y Ramos, es un problema. Nadie puede fijar la altura de la línea donde los dos cracks; Carvalho y Albiol se ponen demasiado cerca de Iker y, por ende, demasiado lejos de Özil y Cristiano, que jamás van a poder involucrarse en un repliegue. Como no lo hicieron, cuando Guardado o Pereira subían bien hacían un 2×1 al lateral blanco, bien sacaban de posición de Xabi o Khedira. Obtenían superioridad. Aunque también es verdad que sin crear mucho peligro. Khedira no les dejó. Animado por el mando y frustrado por la poca profundidad, Parejo decidió dejar la base y sumarse al ataque un vez. Benzema lo castigó con el 1-0.
El Valencia necesitó muy poco para quitarle el mando al Madrid.
¿Qué pasó del tercer párrafo al cuarto? ¿por qué fue el Valencia quien decidió quién iba a llevar el peso del encuentro? Porque el Madrid está mal. En cuanto Banega le obligó a presionar arriba (que es algo muy diferente a estar atacando con muchos, perder el balón y apretar justo entonces), el Real no se atrevió a dejar huecos atrás; y en cuanto los de Mourinho tuvieron que salir jugando desde atrás, decidieron apostar por el pelotazo. En la retaguardia no son como Özil y Benzema; a ellos sí les pesa el mal momento, y no quieren asumir ni un riesgo. Así se va separando el equipo. Modric: «Si Alonso no me la va a dar aquí, me voy para arriba y lo mismo pillo alguna», por ejemplo; y como ellos dos, todos. Por eso fue tan bonita la conversación entre Marcelo y Ronaldo. El lateral sí se atrevió, pero está tieso todavía, y no se salió ni una. Ni un regate, ni un pase. Ahí enfocaron al «7» pidiéndole que no dejara de intentarlo, que no vulgarizase su propuesta. Es la única manera.
Todo siguió igual hasta la entrada de Di María y el 2-0. Lo segundo hundió la moral ché y verticalizó en exceso el juego de los mismos; lo primero hizo que Özil pasase al centro y atacara a Parejo. Modric es de los pocos que intenta en salida cosas distintas -aunque no esté acertado, como ayer-, pero su juego no es influir sobre el mediocentro rival, y Parejo se presta. Özil, en cambio, es una referencia mundial en el menester. Entre ésto y que Di María estuvo bien -ni una bomba al área de las suyas en 30 minutos-, de no ser por un gran Guaita ya no habría eliminatoria. En cualquier caso, el Valencia mejora poco a poco, aunque le quede todavía. El Madrid aún no ha empezado a mejorar.
@javimgol 16 enero, 2013
Disiento bastante con el tono general.
Creo que ayer lo normal hubiera sido que el Valencia se hubiera llevado 4 goles. Evidentemente, hizo daño al Real Madrid, pues Soldado es un delantero difícil de defender con Albiol-Carvalho de centrales, pero para mí del minuto 1 al 90 el Madrid fue superior o al menos llevó el peso del encuentro.
Sí que hubo fases donde los chés se acercaron. Sí, dos tristes ratos: uno en la primera parte y otro en la segunda. Y mientras estaba en esa fase de echar una cana al aire, el Madrid les marcó gol.
Es cierto que el Madrid no está bien. Pero ayer sacó a relucir un caudal ofensivo que para mí es suficiente para ganar a cualquiera.
Marcelo aún no está bien pero Coentrao rindió bien. Essien coronó su mejor partido como madridista…y Sami Khedira ya es mainstream. Vaya partidito se marcó el de Stuttgart.