Zinedine Zidane logró su mejor registro goleador en la temporada de su despedida, la 2005/06, con 9 tantos en 29 partidos. Sus piernas le condenaban a la irregularidad y se decidió que sus últimos momentos de lucidez y suficiencia le pillaran cerca del área, lo cual tuvo su lógica. El de Xavi es un caso diferente, aunque existen algunas similitudes amén del subtitular «El jefe del fútbol europeo explota de cara a portería en su peor momento físico». Las molestas consecuencias de sus dificultades ya han sido tratadas en otros artículos, así que ahora nos centraremos en su evolución táctica a lo largo del curso y en cómo ha terminado encontrando un rol desde el que volver a sumar y constar de manera decisiva.
El primer cambio relevante que presenciamos fue la seria apuesta de Guardiola por el 3-4-3, un sistema que ha quedado ligado a una imagen más vertical, agresiva, rápida y descontrolada. Más Cesc Fábregas.El estilo unido al 3-4-3 no fue buena noticia para Xavi Sin duda, la principal víctima de la novedad fue el propio Xavi. El esquema priorizaba la creación de espacios en el carril central, zona normalmente ocupada por Messi y que pasaría a compartir con Cesc, lo que llevó a Pep a diseñar situaciones en las que el Barça abría el campo hasta a tres alturas distintas: Central, interior y extremo. De todos los interiores culés (él mismo, Iniesta, Cesc, Thiago, Keita y Sergi Roberto) Xavi era el único que no sentía el movimiento como suyo, por no hablar de la suplantación de su ritmo conservador, algo aun más importante. En resumen, el ajuste le había hecho descender un peldaño en la línea jerárquica del equipo, y pese a que deportivamente la evolución colectiva prometía, algo había que ajustar, pues perder la ascendencia moral del 6 sobre compañeros y rivales no era una opción a considerar. Era debilitar al Barça.
El rol del balón de bronce ha ido perfilándose y, aun con (bastante) menos peso que en 2010/11, está jugando muy bien. Sus funciones son diferentes según la altura del sistema defensivo contrario. Si elLa cantidad de goles y de 1ºs toques mágicos se debe a su cambio de rol rival se acoge al lógico plan de repliegue, Xavi sí habita la base de la jugada e influye directamente sobre la dirección e incluso el ritmo. Al ocupar la primera línea presionada siempre tiene la alternativa del giro hacia atrás, así se protege y está cómodo. La gran diferencia con respecto al año pasado es que, salvo que el rival cometa el error de defender en su propia frontal, no es capaz de templar en campo contrario. De desacelerar la zona de aceleración. Ahí es donde vemos al Xavi más revolucionario, más enfocado a los primeros toques y las llegadas, que está dejando en las últimas semanas tantos gestos técnicos brillantes como golazos. Esta versión de tic-tac donde antes había un lugar donde descansar es la constante cuando el contrario decide presionar a toda cancha. Y la que ha permitido a Xavi dejar su estampa en los partidos de manera muy visible, con todo lo que eso conlleva. El Xavi ídolo no es menos necesario que el Xavi del 75% de posesión en campo contrario.
Su producción es de 16 tantos en 22 titularidades (10 goles y 6 asistencias). Cifras de llegador inglés.
Que Xavi esté en más sitios y no se quede en ninguno ha pronunciado el rendimiento de dos de sus compañeros, Dani Alves y Sergio Busquets. El lateral tocó techo individual en su primera temporada en el Camp Nou, desdoblando a una referencia que se llamaba nada menos que Messi. El arrastre del argentino hacia dentro era salvaje y Dani era un cohete en trayectoria limpia. Cuando Leo pasó al centro él perdió esa ventaja. El Barça vivía en la derecha, porque vivía en Xavi, así que el sistema defensivo contrario seguía basculando sobre su perfil, pero el lateral no tenía a quien doblar, y pese a tener recursos técnicos formidables para su posición, hacer de extremo en la práctica mermó su nivel. Ahora, la ubicuidad de Xavi y la tendencia de Cesc a caer a la izquierda construye a Alves una autopista en la banda, lo que le ha devuelto su mejor cara. En cuanto a Busquets, sus obligaciones aumentaron. En muchas circulaciones es el único centrocampista que queda por detrás del balón para apoyar y girar, y en salida también tiene más responsabilidad que dejar el hueco a Xavi y ofrecerle una línea de pase. Su respuesta ha sido soberbia, destacándose como el jugador más mejorado de la plantilla azulgrana esta temporada. Una temporada que pronto se definirá y que pilla al FC Barcelona perfectamente preparado. Vuelve a parecer evidente que el Barça es la referencia continental. Aunque quizá Xavi ya no sea la suya propia.
@sepioes 26 marzo, 2012
Abel, en esta entrada podría interpretar que el rol de Xavi es absolutamente calcado al que esperábamos que iba a tener Fábregas en el Barcelona antes de que Guardiola sorprendiera a propios y a extraños con su posición de principios de temporada.
Es significativo que Fábregas era el que tenía el rol de llegador en el Arsenal, el de un mediocampista mucho más vertical. No se parecía en absoluto a lo que era Xavi en el Barça. Sin embargo, Xavi ha conseguido adoptar el rol de Cesc v.Arsenal en este sentido a la vez que el 4 mantiene (y aumenta) sus prestaciones goleadoras.