Solo 30 goles han servido al Real Betis para tener la permanencia casi asegurada. Del montante global de tantos, ni más ni menos que 17 han llegado de las botas de Rubén Castro, una aportación que, como nos contaba Miguel Quintana, bate por mucho

Hace un mes, tras ganar en El Madrigal, Quique Setién dejó una de las reflexiones que mejor retratan lo que sucede en la parte baja de la tabla durante los últimos tres meses de competición. El cántabro venía a decir que

Como ya existe un precedente muy reciente, resulta bastante fácil entender que ver marchar a Pepe Mel no es una situación cómoda para el Real Betis Balompié. El contexto de esta temporada no se parecía demasiado ni en forma ni en fondo

La vuelta de Joaquín al Benito Villamarín no sólo resultaba atractiva por el folclore y su carisma, sino que por encima de todo estaba el tema futbolístico. El de El Puerto de Santa María regresaba a Sevilla con 34 años y sus

Al menos lo pareció. Se hizo con el partido de tal manera que la simple presencia de James Rodríguez otorgó al Real Madrid una cura para unos supuestos males que tenían fecha de caducidad.

Hablar de Pepe Mel como entrenador del Real Betis Balompié es hacerlo sobre la historia de un tipo que con un parpadeo y un gesto de hombros se adaptaría a la realidad de un club que conoce mejor que la palma de su mano

Unai Emery es un entrenador de extremos estilísticos porque no cree en el control de los partidos; o es ultra-defensivo o es ultra-ofensivo. Dentro de lo que cabe se mueve bien en esas lides, pues posee recursos tácticos y una imaginación notable,

A los diez segundos ya pudo caer el primer gol. Sevilla y Betis no son capaces de darse una tregua en el cara a cara. No lo consienten sus aficiones, que hacen del derbi un partido de semanas de duración. Cada duelo entre ambos

Cuando un equipo afronta la situación por la que pasa el Real Betis actualmente no hay nada sencillo. Un cambio de entrenador suele ser el intento de reactivar a una plantilla angustiada que vive inmersa en la duda. En este

Los dos equipos querían y salieron a ganar, pero ninguno había preparado el encuentro como si fuese una eliminatoria de Champions. Pese a que la intensidad de los jugadores fue de alta competición,