El impacto de Wu Lei

Wu Lei se ha convertido en una de las principales atracciones de LaLiga Santander. Desde su desembarco en la Primera División, la estrella del fútbol chino, autor de 169 goles durante una década en la Superliga de su país, ha tenido un impacto inmediato en los planes de Joan Francesc Ferrer ‘Rubi’. Ultra agresivo en sus movimientos, con un instinto bastante afilado para detectar la zona libre y romper al espacio, el fútbol de Wu Lei le ha sentado como un guante al Espanyol. En términos de profundidad, amplitud y determinación, el jugador chino ha sido un soplo de aire fresco para un equipo que, tras la marcha de Baptistao, corría el riesgo de quedarse corto -entre tanto pasador- en el último tercio. Pero Wu Lei está sumando velocidad y una lectura bastante acertada para un Espanyol que se ha venido quedando algo estrecho por la izquierda.

Rubi ha posicionado a Wu Lei en la banda izquierda del 4-3-3

Desde su llegada al equipo blanquiazul, Wu Lei promedia veinte envíos y 3 regates por partido. Una cifras muy similares a las que traía de Asia (21+3), y que le han dibujado un nuevo horizonte al cuadro periquito. El 4-3-3 de Rubi sigue siendo un sistema ciertamente canónico en su relación con el esférico. Saliendo siempre desde atrás, con Marc Roca situado entre centrales para crear una primera superioridad en su fase organizativa, y con los dos interiores, Darder y Granero, en diferentes alturas para tender un primer apoyo y profundizar en campo rival, el Espanyol maneja una amplia gama de recursos para hacer progresar la acción. Pues además de los interiores, el hecho de que Melendo esté actuando como (teórico) extremo le está dando un plus al colectivo entre líneas. Algo que, con tantos pasadores en zona de tres-cuartos, incluido el propio Borja Iglesias, que vacía mucho el área pare recibir de espaldas, justifica la importancia que Wu Lei está teniendo arriba.

Wu Lei y Rosales le están dando amplitud y profundidad al RCDE

El futbolista chino, que viene arrancando desde el costado izquierdo, es tremendamente vertical en sus movimientos. Ensanchando desde el pico del área, desde donde inicia todas sus acciones, la trayectoria de Wu Lei va siempre dirigida a atacar la portería. Tanto con el balón como sin él, el repertorio del ‘24’ está muy enfocado en castigar la integridad posicional del equipo contrario. Y de ahí que sus desmarques de ruptura sean mucho más comunes que los apoyos. Con Granero, Darder, Melendo e Iglesias cerca de la corona del área, el Espanyol genera una atracción desde el último tercio para la que Wu Lei, rompiendo dentro-fuera, y Rosales, bien abierto en el costado derecho, le están dando múltiples soluciones al equipo periquito cuando llega a la frontal del área con el esférico controlado.

A la espera de que vaya puliendo ciertas cosas que tienen que ver con su adaptación al ritmo de Primera, como la ejecución de sus remates sin apenas margen de maniobra, lo cierto es que su compenetración con Borja Iglesias está siendo muy positiva. Cuando el gallego desocupa el área para tirar el apoyo de espaldas a portería, el Espanyol ha repetido en numerosas ocasiones un movimiento que, con el compostelano activando al compañero libre de cara, acaba con el balón persiguiendo la ruptura de Wu Lei. De esta forma, la llegada del jugador chino ha dotado al RCD Espanyol de una interpretación -para detectar el espacio-, una velocidad -para romper en muy pocos metros- y una determinación -para irrumpir y chutar- que han provocado una reacción cuando más necesaria era.