Cuando Diego Pablo Simeone llegó a La Liga, uno de sus primeros objetivos fue el de recordar al fútbol español que a este deporte se puede jugar de muchas formas. Eran los años del dominio incuestionable del Pep Team y de la

Si en los dos puestos del centro de la zaga el nivel ya fue muy alto, qué decir de la posición de lateral izquierdo en la Liga BBVA. Jugadores de todo tipo y condición, pero con algo en común: su gran rendimiento

El Levante UD del año pasado fue uno de esos conjuntos que se mantuvieron en Primera División sin transmitir vibraciones positivas. Tras una serie de cursos marcados por un repliegue muy bajo que dio forma a una identidad defensiva muy eficiente,

Ocho puntos en 11 jornadas. Esos son los números de Joan Francesc Ferrer «Rubi» al frente del Levante UD; una progresión que, de no cambiar, le condenaría a la Segunda División. Sin embargo, su trabajo en el banquillo granota