Es muy difícil sacar algo positivo del debut olímpico de Milla y sus chavales. El equipo saltó loco al campo, con una mezcla entre nerviosismo y exceso de confianza de las que solo permiten los entrenadores más discretos.

Que la Champions League es caprichosa no lo vamos a descubrir ahora. A algunos, caballeros ingleses de gran fortuna, les llevó toda una vida entenderse con ella. Si preguntamos por Dortmund

Tal es la calidad que se acumula en nuestra Liga por detrás del delantero, que la única opción para afrontarla de manera responsable era dividirla en dos roles: mediapuntas y segundos delanteros. Para analizar a los primeros,

La lógica dice que esto tiene que parar. Habría que acudir allá donde el fútbol es ingrediente social y genético para encontrar dos generaciones consecutivas que lograran alzarse con el cetro mundial.