«Tú, tú, tú. Nos jugamos mucho para estas cosas». Le había cazado la cámara de Canal Plus. ‘Estas cosas’ no era si no decidir que, en el día de tu último partido como jugador del club, en la última jornada de liga

No orquestó esta vez presión alguna, pero no por ello dejó de emplear el Txingurri la magia de San Mamés. Se representó en un despliegue físico máximo y continuo que tomó valor futbolístico en forma de carreras heroicas.

El Espanyol había hecho mejor fútbol, mejor Copa, mejor ida y llegaba con mejor ánimo que el Athletic Club de Bilbao, pero anoche no se notó. En cierto modo jugó entumecido, quizá por verse a las puertas del que iba a considerarse

Aunque es cierto que la posición de lateral derecho no ha sido la que más actuaciones brillantes ha albergado durante esta temporada, también lo es que, como es norma general en nuestra

La Catedral cambió su guion habitual y prescindió de la emoción en su sesión de anoche. No hubo ni altibajos ni remontadas en el Athletic Club 4 Granada CF 0, los leones se exhibieron desde el inicio hasta el final para mayor gloria de Aduriz,

El Athletic de Bilbao está en un buen momento. La lentitud de los primeros meses de competición ha dado paso a un fútbol intenso que cumple los objetivos máximos del juego: robar la pelota para crear ocasiones de gol. En

El Betis anda perdido y eso lo marca todo. Hoy los de Garrido no juegan como quieren sino como pueden. El objetivo es sobrevivir hasta la llegada de algún buen resultado que cambie la dinámica. Por esto, el planteamiento

El Real Valladolid – Athletic Club de Bilbao fue muy bonito. Juan Ignacio Martínez parece haber heredado un equipo hecho en el que hay más tarea mental que táctica. Siendo ésta la enésima campaña que se afrontará con el mismo bloque y, según vimos ayer,