Al Atlético de Madrid no le importó esperar más de lo imaginable, sobre todo desde el inicio, para castigar a Osasuna en el momento indicado. Ante las múltiples dificultades que está teniendo el cuadro de Simeone para darle situaciones ventajosas de remate a sus

El Chimy Ávila ha nacido para jugar en El Sadar. En El Sadar, con Osasuna y en el 1-4-4-2 de Jagoba Arrasate, para ser más precisos. Al delantero argentino le han bastado tres encuentros -dos de ellos en Pamplona- para convertirse en el nuevo héroe de la afición rojilla,

Si mi corazón sigue latiendo, yo sigo corriendo. Con una sonrisa de oreja a oreja, Luis Ezequiel Ávila, el Chimy, se expresaba así tras realizar uno de esos encuentros que sirven para referenciar su valor ante equipos grandes que vayan

Dos metros entre las líneas del campo y la primera fila de las cuatro gradas. Un córner botado por el lanzador pero empujado por un puñado de aficionados que se estira para implicarse. El goleador chocando las manos de los que dejan caer el brazo mientras

Francisco, una vez más, decidió mover el árbol y buscar adaptaciones concretas a su rival, en este caso un Levante que a lo largo de todo el curso ha mostrado problemas para hacer un filtro sólido en el carril central y al que le ha costado llegar a cerrar bien

Por donde empezar. Fue uno de esos partidos de película del lejano oeste, donde el currículum de un realizador y un cámara sube un escalón, una vez toma partido para sacarle el jugo a la emoción que surge entre los planos que van superponiendo a un aficionado

Tan solo Karim Benzema consiguió serenar el desaguisado táctico del Real Madrid. Coronando su actuación con un excelente golpeo de rosca al palo largo, recibiendo en la frontal y esquinando la pelota para hacer inútil la estirada de Santamaría, el francés volvió a