El Bayern Munich de Pep Guardiola afronta el tramo decisivo de la temporada con opciones en todos los frentes. Para acabar celebrando títulos, los alemanes deberán resolver una cuestión fundamental: su zona defensiva.

Guardiola genera realidades que no existen. La primera parte de Turín, disputada hace tres semanas, sirvió como buen ejemplo. Empleó sus conflictivas herramientas de una forma tan original y con una presentación tan brillante

Imaginen: Bravo; Aleix, Alves, S. Roberto, Alba; Rakitic, Arda; Munir, Messi, Suárez y Neymar. O Navas; Carvajal, Danilo, Kroos, Marcelo; Kovacic, Isco; Bale, Benzema, Cristiano y Jesé. Pues más o menos, esas serían las alineaciones de Barcelona

La transición entre Conte y Allegri se caracterizó por la instalación de una línea de cuatro defensas en detrimento de los tres centrales que habían definido el renacer de la Vecchia Signora. El cambio se saldó de manera exitosa,

Guardiola vive su tercera campaña en el Bayern Munich. Pep, ser expresivo y analizable en base a sus gestos y palabras, comenta entre bambalinas que “reflexiona mucho más en Alemania de lo que lo hacía en Barcelona”.

Corría la tercera jornada de la Champions y el Arsenal FC la afrontaba casi al límite. Sus derrotas frente al Olympiakos y el Dinamo de Zagreg obligaban a los ingleses a batir a quienes llegaban al Emirates con

Andrea Pirlo fue la primera piedra de un castillo que, durante tres años, resultó inexpugnable. La Juventus de Turín vagaba con más pena que gloria en la Serie A desde su regreso a la categoría en 2007

Robert Lewandowski marcó cinco goles en tan solo nueve minutos. Con motivo de ello, el Bayern Múnich-Wolfsburgo de la temporada 2015/16 ya forma parte de la historia, y en este breve texto trataremos de analizar el contexto que dio luz

Massimiliano Allegri no es un técnico que destaque por sus gestos grandilocuentes. De hecho, su aparente falta de emoción es, paradójicamente, el punto definitorio de su particular

Su épico rendimiento en la Juventus de Turín le ha convertido en uno de los centrocampistas referentes del fútbol europeo pese al hándicap de jugar en una liga que no ha gozado ni de salud ni de altavoz mediático.

El VFL Wolfsburgo se llevó la Supercopa de Alemania tras derrotar al FC Bayern Múnich en la tanda de penaltis, a la que se llegó tras empatar a un gol al término de los 90 minutos comunes. El partido se disputó a un ritmo destacado