Dos buenos compañeros como son Wikipeix y David Fernández, repasan de manera gráfica la historia de la Liga BBVA. Desde Zamora hasta Raúl&Van Nistelrooy, pasando por Maradona y ‘Mágico’ González. Un completísimo archivo en el que recordar tiempos

Dos grandes alumnos buscando la matrícula de honor, un duelo para mantener ilusiones, una búsqueda del objetivo mayor frente a la angustia, un choque de extremos de idénticas urgencias y un intento de huida de los infiernos. Sábado de

Fue descorazonador. El Real Zaragoza acababa de recibir una manita en La Rosaleda y la salvación se podía situar más allá de los once puntos. Por extraño que parezca, la situación era aún más dramática. El abatimiento y la desesperanza

En el antepenúltimo partido de la Premier League, el Fulham perdía 2-0 ante el Manchester City. Con ese resultado, los londinenses estaban matemáticamente descendidos. El resto es historia. »Fulham need to score

Mordió hueso en la aceituna del FC Barcelona sin haber masticado la madurez en el primer equipo. Si el fútbol fuese justo se jugaría en los juzgados, pero parece evidente que el peaje que pagó en el profesionalismo culé no entraba en los planes

El Atlético de Madrid lo ha pasado francamente mal contra el Hannover 96, tanto en la ida como en la vuelta. De hecho ayer durante 45 minutos fue inferior al conjunto alemán. En parte, porque la adecuación de los de Mirko Slomka al equipo rojiblanco

La vuelta de Cuartos de Final, Chelsea-Benfica, correspondiente al «Munich 57″ del 4 de abril, nos dio la perfecta excusa para revisar una eliminatoria maravillosa entre dos de las potencias del momento. Sus duelos

D esequilibrante, eléctrico, incisivo, vertical y goleador. Muchos son los adjetivos que podríamos atribuirle a Arjen Robben. Sin embargo, ninguno sería tan adecuado para medir su figura como la temporada 2009/2010. Referente de un Bayern Munich

Guardiola lo pasó fatal en San Siro. Se resaltó al día siguiente la superioridad culé y la tranquilidad que eso debía otorgarle de cara a la vuelta, pero Pep sentía que su equipo había acabado muy nervioso y el Milan había estado comodísimo, haciendo