Es imposible saber ya si este Atleti supera al que ganó la Liga, pero podemos afirmar sin temor a equivocarnos que se trata de un equipo más completo. Anoche, en uno de los estadios más duros de Europa, mostró gran parte de su repertorio,

Las bandas del Bayern Múnich asustan mucho. Sobre Robben está todo dicho, se trata de uno de los tres atacantes que más diferencias han marcado en la Copa de Europa en el último lustro, mientras que

El Sevilla ha caído en el grupo de la muerte de la Champions y eso le exigirá un plus desde el día 1. Su última incorporación, Fernando Llorente, se lo podría ofrecer. Si el viejo Rey León supiera responder, si

Fue llegar y besar el santo, como siempre ha sido para Pedro. Un gol, una asistencia y un torbellino de actividad le sirvieron de carta de presentación ante una afición blue que necesitaba ilusionarse con algo. Chapeau.

La mitad interesante fue la segunda. Durante la primera, ambos jugaron peor. El Sporting salió entusiasmado y se protegió menos de lo prudente, intentando una media presión poco compacta que dejó espacios entre líneas.

En un artículo publicado en El Español, se desgranó qué perdía y qué podía ganar el Atlético de Madrid con la baja de Arda Turan. Aunque la conclusión final rezaba que a Simeone se le abría la puerta para mejorar mucho el equipo,

Prohibiría la lotería, unificaría el tiempo atmosférico y reciclaría el papel de regalo para usos médico-civiles. A Rafa Benítez, en el mundo de su vida, que es el fútbol, le molesta la sorpresa. La acepta porque le apasiona el resto,

El Monaco tiene uno de los proyectos jóvenes más sugerentes de Europa y lo demostró con creces sobre el césped de Mestalla, pese a su plaga de bajas en defensa que le acabó costando el partido.

Mateo Kovacic es un chico croata que se fue al Inter de Milan con 19 años y que, tras dos y medio en San Siro, ha fichado por el Real Madrid. Escrito sin nombres propios, se trata de un futbolista por formar

El Athletic Club rompió su sequía de títulos jugando uno de los mejores partidos que se le recuerdan. Seguramente, superior a la ida de esta propia Supercopa, pues en este caso, en lugar de con un grupo sin alma,

El potencial ofensivo del Barcelona no conoce barreras; para el campeón de Europa, marcar cuatro o cinco goles en su casa queda más cerca de lo rutinario que de lo milagroso. Sin embargo, una cosa es marcarlos porque sí