El segundo año de José Mourinho en el Manchester United no ha sido mejor que el primero. Si bien es cierto que el equipo, en Champions –de la cual fue eliminado en octavos, a manos del Sevilla FC-, acabó segundo en la Premier, con cierto margen con respecto al tercero (Tottenham) –cuando en la 2016/17 fue sexto, y se ganó su billete para la Liga de Campeones tras ganar la Europa League en Estocolmo-; a nivel futbolístico ha mostrado una involución nada productiva en términos competitivos. El United 2017/18 ha jugado peor que el anterior; más desorganizado y menos reconocible que el visto con la llegada del portugués al banquillo de Old Trafford. Un proceso ante el cual el club ya trabaja en ponerle freno; amoldándose, visto lo visto, al nuevo paradigma hacia el que camina el fútbol desde antes de la Copa del Mundo. Un contexto que conocen bien en Inglaterra; y en el que Fred podría encajar de inicio.
El último United encadenó ciertos problemas colectivos
El Manchester United 2017/18 se topó con dos problemas de una enjundia considerable. Y, en ambos casos, son responsables del decrecimiento colectivo entre uno y otro año. Para empezar, el equipo dejó de controlar las áreas como siempre le ha gustado a Mourinho. En este sentido, el conjunto ‘red devil’ experimentó una fragilidad impropia de los equipos del luso; más allá de los repetidos e insaciables milagros competitivos de David De Gea bajo los palos. Una razón que sirve, dicho sea de paso, para explicar su otro gran defecto: el control de los encuentros, de las distintas situaciones –sin necesidad de aglutinar grandes porcentajes de posesión-, que tantísimo valor tienen dentro del contexto de la Premier League. De dicha relación recíproca se entiende, sin necesidad de entrar a valorar distintos nombres propios, tal descenso de nivel en cosa de tan poco tiempo. Puestos a entender que sin la primera evidencia es prácticamente imposible que tenga cabida la segunda; la llegada de Fred cobra sentido en pos de recuperar dichas certezas extraviadas.
Fred es un centrocampista de movimientos muy verticales
Fred es un centrocampista de una sola dirección, idóneo para escenarios tan abiertos como los de Inglaterra. Su aterrizaje en Old Trafford podría suponer, a priori, una vuelta táctica hacia el 4-3-3 de antaño, con Pogba y Matic flanqueando al brasileño (interior/pivote). Ahora bien, la nueva incorporación del Manchester United no es, ni por asomo, un mediocentro posicional de los que echan el ancla por delante de la defensa; sino que lo suyo, como así ha enseñado en Ucrania y también en la Champions, es jugar con la pelota de manera muy vertical. Ya sea para dar el pase, como para irrumpir conduciendo entre las líneas del rival –una de sus mayores especialidades-, Fred dotará al Manchester United de un sinfín de acciones y movimientos dirigidos hacia la meta del equipo contrario. Un arrojo tan dañino como cualquier arma de doble filo; reparando en los grandes riesgos que conlleva su (claro) sentido unidireccional.
José Mourinho: “Perdimos a Carrick, y Fred es el tipo de futbolista que necesitábamos para completar nuestro centro del campo”.
Por todo ello, será importante que José Mourinho consiga canalizar la agresividad posicional de Fred; sin coartar, por ello, su desempeño ofensivo, como así ha sucedido en varias ocasiones con Pogba. Fred necesita llegar al área, o, cuanto menos, a zona de tres-cuartos, donde logra sentirse especialmente realizado. Una parcela en la que su pie izquierdo se vuelve especialmente dañino para chutar o filtrar el último pase; pues el disparo de lejos y la visión al espacio son dos de sus otras cualidades. Está por ver cuál es el rol que adopta ahora en el Manchester United, pero si el coloso del fútbol inglés quiere dar un golpe de timón a lo que ha venido enseñando hasta este momento, la lógica invita a pensar en que Fred pase a ocupar, más pronto que tarde, uno de los dos interiores –en un mediocampo a tres-. Una posición desde la que Fred, en principio, podría enseñar más –y mejores- cosas. Y sobre todo, podría garantizarle una carta ganadora al United en cuanto a ritmo, determinación y dominio de las segundas jugadas; ahora que, ante el nuevo rumbo hacia el que está virando el fútbol, parece que tiempo y espacio correrán –y bastante rápido- cogidos por la mano.
Carlos 22 julio, 2018
Bueno, pero y Ander o Matic de mediocentro? Con Fred y Pogba en los interiores? A mí no me parece mal plan, sobre todo en un 4-3-3.
De todas formas, es que más que en Fred, el que el United de un salto de calidad pasa porque Paul Pogba de un paso al frente sí o sí esta temporada. Ahí está la clave