La unión fue tan fuerte en un periodo tan intenso desde el plano emocional y social entre el ciclo Simeone y el significado de Raúl García que parecían indivisibles. El traje le quedaba tan ceñido y la idea había penetrado de tal manera en García, que era complicado atisbar un rendimiento sostenido en equipos que no tuvieran un plan específico para él. Pero a sus particularidades futbolísticas les gobierna una de instancia superior: su feroz competitividad. Como Ernesto Valverde es un entrenador absolutamente ganador, que aprovecha todos los recursos que almacena en su taller, no tendrá reparo ni remordimiento en abrazarlo. Más que eso. Valverde y el Athletic necesitaban a Raúl.
Fue la llegada desde el filial de Iñaki Williams la que anticipó ciertas decisiones y actitudes dentro del equipo con el fin de potenciar diferentes maneras de llegar a portería y de defender la propia. Valverde sabrá adaptar a RaúlEl Athletic, desde la dificultad y la falta de confianza, camufló sus problemas tras la salida de Herrera y el bajón de Iturraspe, tirando del abrumador Aduriz, los goles de San José y la aparición de Iñaki. Fue más una transición, pero les valió para madurar piezas, hacer callo y llegar a la final de Copa con muy buenas eliminatorias por el camino. Valverde supo esconder los problemas en salida de balón, dio importancia al error propio como factor clave en la poca confianza de los suyos y salió adelante. Entre esta tesitura, las nuevas caras y el título reciente, Raúl García ampliará las posibilidades, incrementando la competitividad.
Raúl García complementará el ataque del Athletic
Subyace por encima de cualquier idea la capacidad de remate y gol que atesora el navarro, en comparación con el poco colmillo de los Muniain, Susaeta, Ibai o Williams, más los Viguera o Sola como segundas opciones para el ‘9’. La segunda línea vizcaína lleva de serie una falta de pegada -algo más en el caso de Ibai- que el navarro puede compensar. Su costumbre es acudir al área cuando la jugada es profunda, amenazando a la zaga y los mediocentros rivales. Si Aduriz ya supone una amenaza de primerísimo nivel en envíos laterales o juego de espaldas, que el navarro entre desde la banda para incordiar, chocar y forzar situaciones de peligro, el plus es más que evidente. Valverde valorará hasta qué punto y de qué manera deberá aprovechar sus características, pues como mediapunta para jugar por raso no es nada destacable; no obstante, el libreto del ‘Txingurri’ es más directo de lo que suele generalizarse. A Ernesto le gusta jugar rápido en campo contrario.
Otra característica fundamental en los equipos de Valverde es la presión en campo rival. La capacidad de Raúl García para presionar salidas laterales, ensuciando ideas y pases, se dará por hecho. Aunque su corpulencia le resta en acciones que requieren mayor agilidad, su insistencia contagiará al ya de por sí ardiente San Mamés. Como añadido, es en el plano táctico donde más sale beneficiado el Athletic. A balón parado ofensivo, y sobre todo defensivo, supondrá un refuerzo de alto nivel. Además, su presencia saliendo desde el banquillo condiciona y transforma los partidos desde el envío directo. Aduriz las gana todas, pero Raúl no le mira desde muy abajo. Valverde podrá tirar del 4-4-2 y derivar el juego hacia las bandas cuando los arietes logren bajarla. Puntualmente, también podrá emparejar a García con un lateral diestro de físico liviano, activando el balón largo del zurdo Laporte cuando éste sea presionado en salida. Al alimón, como aspecto fundamental dentro de un vestuario, nunca sobrará su mentalidad ganadora y de trabajo. Ya lo dijo su anterior entrenador. El Athletic Club se lleva un capitán.
crwx 5 septiembre, 2015
Se va a hacer algo sobre A. López al Villarreal? No lo esperaba y tiene muy buena pinta.