Carismático, decidido, enérgico, exigente e, incluso, autoritario en ocasiones, Paco Jémez es uno de los grandes profesores que, en la actualidad, tiene el fútbol español. Más allá de las virtudes y defectos de su modelo, tantas veces puesto en duda y tantas veces matizado con éxito, estar a las órdenes del técnico canario curte. Sea el caso de un veterano como Javi Fuego o el de un recién llegado como Alejandro Gálvez, la riesgosa propuesta del Rayo Vallecano de Jémez exige a sus futbolistas afrontar unos retos que, a priori, no son consecuentes con sus posibilidades. Sacar el balón jugado bajo cualquier circunstancia, achicar espacios post pérdida sí o también, equilibrar la medular de un equipo desequilibrado… Las lecciones son tan complejas como valiosas. Y si las superas, cueste lo que cueste lograrlo, pasas a ser automáticamente mejor jugador.
Saúl Ñíguez vivía en Vallecas su paso a la élite.
Siguiendo el símil universitario, Saúl Ñíguez llegó a Vallecas desde la escuela atlética, se graduó con honores en cuestión de meses y, ante la insistencia de Paco, se sacó un máster de postgrado con el que certificar su valía como futbolista. El Rayo, además, se salvó con una inesperada holgura, y la afición, como premio, le eligió MVP de la temporada. Fue un año perfecto. Sin embargo, más que ésta sucesión de hechos en sí, que son de un enorme mérito para un futbolista nacido en 1994, lo más destacado de su curso fue cómo los superó.
Los que conocían a Saúl de las inferiores colchoneras destacaban sus aptitudes como interior de recorrido, pero Jémez tenía otros planes para él. Ante la marcha de Javi Fuego al Valencia yLlegó como un interior, pero no jugaría ahí la presencia de Roberto Trashorras, el entrenador rayista le asignó el rol de mediocentro posicional. Debía escoltar al «Mago de Rabade», sostener una formación con cuatro atacantes y ayudar en la exigente salida de balón. Y cumplió. Con nota. El Rayo no jugaba bien, cometía demasiados errores y fabricaba pocos aciertos, pero Saúl no titubeó. Fuera motivado por esta gran respuesta o por su experiencia en el Mundial Sub-20 con Lopetegui, lo cierto es que Paco no se quedó ahí. Jamás lo hace. Y decidió bajarle un escalón. El Rayo tenía muchos problemas dando el primer pase, Galeano no estaba respondiendo, Raúl Baena comenzaba a entrar en escena y, matando estos tres pájaros de un tiro, Jémez le probó como central. Y cumplió. Con nota.
Es cierto que el despegue del Rayo en primavera se dio con la entrada de Zé Castro en la zaga y con el colchonero en el medio, pero cuando actuó junto a Gálvez demostró su polivalencia y competitividad. “No me gusta resaltar a un jugador porque todos son importantes, pero juega donde le pongas, ya sea de central, medio o punta. Es muy válido tener jugadores así porque siempre están para un roto. Saúl te da trabajo, posesión de balón, es agresivo y nos va a dar muchísimo”, decía el profesor. “Si tengo que jugar de lateral, central o de portero por él, lo haré. Es el entrenador que me ha dado la confianza y tengo que darlo todo a muerte por él. Si algún día necesita algo, sabe que puede contar conmigo”, respondía el alumno. A tenor de lo que conocemos de uno y otro, se puede dar por seguro que las palabras son sinceras. Paco Jémez y Saúl Ñíguez estaban condenados a apreciarse.
En febrero, el Atlético anunció su renovación.
Vigilante y orgulloso por lo acontecido, el Atlético de Madrid anunció su renovación en febrero. Unas semanas después, se supo de forma oficiosa que Saúl sería miembro de la primera plantilla atlética durante la temporada 2014/2015. La teoría dicta que, tras el veloz regreso de Tiago, partirá como cuarto centrocampista y, si es necesario, como quinto central, pero con Simeone nunca se puede dar nada por supuesto. Y, visto lo visto, con Saúl Ñíguez tampoco. A fin de cuentas tiene el ADN de Gabi Fernández. El ADN cholista. El ADN colchonero.
Brahm777 24 julio, 2014
Muy expectante con ver el rol que le asigna Diego Pablo SImeone a Saul. En el Rayo, como bien se dice en el articulo, saco todo por puro caracter, pura lucha y MUCHA calidad.
Este chico debe ser importante. La ultima temporada de Mario me hace pensar que sera mas importante de lo que en un principio podria ser.