Hatem Ben Arfa siempre será lo que él quiera. Técnicamente, si pudiésemos disociar durante un pequeño instante la calidad del francés con el resto de elementos que una Dirección Deportiva valora sobre un futbolista, podríamos reconocer tajantemente que el Real Valladolid ha completado este mes de enero uno de sus mejores fichajes en los últimos años. Ben Arfa siempre ha sido y será buenísimo. Pero con el ex del PSG, entre otros muchos equipos, quizá incluso más que con cualquier otro futbolista en estos momentos, siempre hay que andarse con ojo y caminar con pies de plomo, porque no por casualidad, a sus 32 años de edad, ha aterrizado en Pucela después de unos cuantos meses sin ‘oficio’.
El futbolista francés tiene muchísima calidad en su pie izquierdo
Con este tipo de fichajes -porque el galo no es el único miembro de esta peculiar estirpe de jugadores- nunca existe un término medio: puerta grande o enfermería. Porque no se puede estar en misa y repicando. Indudablemente, si este texto pretendiese aislar la cabeza del propio futbolista francés para centrarnos única y exclusivamente en sus piernas, lo lógico sería decir que con este fichaje el Real Valladolid de Sergio González ya está, ipso facto, dos o tres cuerpos por delante de sus rivales en la lucha por la permanencia. Pero si algo ha demostrado Ben Arfa durante estos años en la élite es que quien más empeño ha puesto en distanciar la mente de sus posibilidades como ‘jugador élite’ ha sido él mismo.
Ben Arfa podrá ocupar muchas posiciones en el Real Valladolid
No obstante, nadie mejor que el Valladolid habrá sopesado todas estas cosas antes de levantar el teléfono, y su oportunidad al talentoso jugador francés es, indudablemente, una gran noticia para todas las partes, incluyendo al espectador neutral de LaLiga. A nivel de sistema, zurdo por naturaleza, Ben Arfa podrá ocupar distintas posiciones en el 4-4-2 de Sergio González. Podrá jugar desde la derecha, a pie cambiado, como hace habitualmente Óscar Plano; podrá entrar desde la izquierda, más abierto o más cerrado; y podrá acompañar al delantero, pues raro será verlo alguna vez en el doble pivote, para jugar por detrás de alguno de los delanteros, bien como segundo punta o incluso mediapunta si Sergio González vuelve al sistema 4-2-3-1 que ya utilizó durante un tiempo el curso pasado.
Ben Arfa tiene tantísima calidad en su pie izquierdo que no le importa recibir más abierto o más cerrado, en banda, en la frontal o en el pico del área, y de espaldas o ligeramente perfilado. Supera a través del regate y el cambio de ritmo. Y esa combinación, sin ser un jugador realmente diferencial -en cuanto a su velocidad- a campo abierto, seguramente será la que pretenda explotar Sergio González a través de la pizarra. Si el Real Valladolid, acostumbrado a vivir normalmente en repliegues bajos, trata siempre de salir al ataque a través de los desmarques -tanto en el apoyo como en la ruptura- de sus dos delanteros, ahora, con la llegada de Ben Arfa, tendrá un recurso valiosísimo sobre el que apoyarse, juntarse y acercarse al área contraria ahorrándoles mucho esfuerzo a ambos.
AdrianBlanco_ 30 enero, 2020
El fichaje de Ben Arfa por el Real Valladolid es impresionante, las cosas como son. 😀
Pero con este tipo siempre hay que ser muy cauteloso. Ojalá encuentre regularidad en LaLiga.