La llegada de David Gallego al banquillo del RCD Espanyol ha reportado, así a bote pronto, siete de los últimos nueve puntos en juego. Dos victorias ante Girona y Atlético –al que, contando el duelo de ida, le ha ganado en Madrid y en Barcelona– y un empate en Gran Canaria. Una racha que, casualmente, el equipo periquito no alcanzaba desde finales de febrero y principios del mes de marzo cuando derrotó a Real Madrid y Real Sociedad, y tropezó, como ante el equipo de Jémez, con un Levante que luchaba por salvarse. En ese periodo de tiempo, en ese mes y poco que acontece entre la victoria sobre el club donostiarra y el equipo que dirige Machín, el Espanyol acumuló cuatro derrotas (Betis, Valencia, Getafe y Eibar) y un empate (Alavés), que desembocó en el cese de Sánchez Flores.
Esa irregularidad, en resumidas cuentas, es la hoja de ruta que el equipo catalán ha seguido durante la campaña. A pesar de imponerse a los dos equipos madrileños y al FC Barcelona (Copa), de pelear en Mestalla y de empatar en el Sánchez-Pizjuán o en La Cerámica, el mismo Espanyol ha sido incapaz de puntuar en Butarque, Mendizorroza, Ipurua o Ciutat de Levante. Y para muestra, un último botón: el dato que compartía Álvaro Salarich (@ASalarik) en Twitter: este Espanyol ha sumado más puntos ante el Atlético de Madrid (6/6) que ante Eibar, Leganés, Alavés, Levante y Las Palmas juntos (5/30). Consecuencia, todo ello, de una temporada que, al margen del sobresaliente nivel de Gerard Moreno, encierra más dudas que certezas dentro de la parroquia blanquiazul.
El equipo le ha dado muy poco a Gerard, que aun así ha brillado
El hecho de que Gerard Moreno siga –o haya estado hasta hace poco- presente en muchas de las quinielas para ir al Mundial, habla por sí solo. El de Santa Perpètua de la Moguda lleva 18 tantos y una asistencia entre Liga y Copa; lo que significa que ha participado en casi la mitad de los tantos (39) del RCD Espanyol hasta el momento (48,71%). Una influencia que, dicho lo cual, recogió especial trascendencia el pasado domingo cuando fue sustituido en el Metropolitano: era la primera vez en todo este curso que Gerard salía sustituido, tras haber completado las anteriores 35 jornadas sin perderse ni un solo minuto. Así de importante es para el colectivo.
Gerard Moreno lo es todo para el RCD Espanyol. Juega por y para los otros diez futbolistas que se visten como él; hasta el punto que, siendo la referencia ofensiva del conjunto, él mismo es quien decide el cuándo, qué y cómo del conjunto con la pelota. Aunque para ello, debido a lo poco que el Espanyol ha sabido darle a cambio, el ‘7’ ha debido inventarse más cosas de las que se le intuían cuando emergió en la élite. A su ritmo; sin ser fuerte ni muy rápido; con la lectura, intuición y malicia apropiadas para siempre imaginarse, en función de la altura y el momento, un cambio de orientación, un (pen)último pase o un remate entre los tres palos. Porque Gerard consigue verlo; pero también ejecutarlo, que es lo mejor de todo.
El Espanyol es el 5º equipo que menos remata de toda LaLiga
A estas alturas, el plantel que ahora dirige Gallego es el quinto que menos veces remata de todo el campeonato; solo por detrás de Málaga, Levante, Las Palmas y Leganés. Una eficiencia que, como suele ser habitual, se acerca o directamente coincide, como es el caso, con su baja eficacia de cara a puerta: 10,7% de efectividad en sus disparos. Unos guarismos que el propio plan no ha logrado corregir a lo largo de estos meses, por mucho que haya ido virando.
El sistema, ya sea a partir del 4-3-2-1, el 4-4-2 o el 4-2-3-1, le ha reportado escasas certezas al juego perico. En este sentido, el RCD Espanyol ha adolecido de una serie de mecanismos con los que ilustrar un modelo; una pizarra que, del mismo modo que el año pasado se convirtió en la mejor aliada defensiva de Quique Sánchez Flores, esta campaña, en cambio, ha transmitido menos claros que oscuros. El Espanyol ha corrido poco con la pelota, y ha fluido mucho menos cuando no la ha tenido. Y eso, para un equipo muy limitado ya de por sí en distintos aspectos, fue la gota que colmó el vaso de su técnico. Y la que, de no haber sido por su delantero, quién sabe si no podría haber terminado de aguar una temporada que en primera instancia se pensó propicia para que el equipo ascendiera a cotas mayores. Pero ni siquiera se ha acercado a ello.
AArroyer 8 mayo, 2018
Libra por libra, es posible que estemos hablando de la temporada individual más meritoria y heroica este año en Primera División. Sobre todo porque Gerard Moreno no era 'esto' todavía. Es como si Gerard Moreno pudiera progresar 'un metro por año' y que solo un temporadón de su equipo y unos compañeros específicos podrían acercarle a estas cifras, esta regularidad y esta puesta en escena. El Espanyol retrocede con respecto al año pasado y Moreno hace esta temporada. Alfa y omega del equipo. Honores a este pedazo de jugador.
¿Recordáis un rendimiento y un paso adelante similar ante tantas difcultades?