Al acabar la antepenúltima jornada apenas quedan tres frentes abiertos en la clasificación, pero estos siguen igual o más interesantes que en pasadas semanas. La lucha por el título, con Zinedine Zidane y Luis Enrique al mando, dejó dos lecturas opuestas sobre el partido de sus equipos: una general y otra concreta. Además, Mauricio Pellegrino habló de la importancia de los momentos, Pepe Mel valoró el estado del vestuario del Dépor y Rubi explicó su idea de jugar con dos nueves contra Las Palmas. Éstas son las preguntas y respuestas que definen la trigésima sexta jornada de la Liga:
Zinedine Zidane. Granada CF – Real Madrid CF
El Real Madrid volvió a imponerse a domicilio de forma tan resuelta como en Riazor. La profundidad de plantilla volvió a quedar a relucir para más brillo de un equipo que parece haber llegado en un momento de forma sobresaliente al tramo decisivo de la temporada.
«Todo lo que hacen lo hacen fenomenal. Teniendo menos minutos, que no es nada fácil, lo están haciendo fenomenal todos. Y esto es fruto del trabajo de todos, pero sobre todo de ellos. Están metidos, están bien físicamente… Nosotros llegamos a un punto en el que, tras nueve meses, sientes dificultad porque te juegas todo y estás agotado. Pero es todo lo contrario. Llegamos muy bien a final de temporada. Es una gran noticia para lo que nos queda».
Luis Enrique. FC Barcelona – Villarreal CF
Roberto Soldado y Cedric Bakambu conforman una de la parejas de delanteros más peligrosas de toda la Liga. No obstante, Luis Enrique mantuvo e incluso adelantó su línea defensiva buscando achicar, presionar y desconectar del juego a los atacantes amarillos.
«Dificultades máximas ante un rival que, si no hubiéramos defendido bien, nos hubiera hecho correr muchísimo, y correr cuesta muchísimo, sobre todo a nosotros que tenemos costumbre de tener el balón. Por lo tanto, el partido de hoy requería de ser precisos en ataque, de circular muy bien el balón, de encontrar jugadores entre líneas, de atacar los espacios tras su defensa… Y, sobre todo, minimizar las pérdidas en el carril central para evitar que ellos pudieran conectar con sus dos puntas, que son muy rápido y especialistas en jugar el primer toque de cara».
Mauricio Pellegrino. Deportivo Alavés – Athletic Club
Con la mirada puesta en la final de Copa del Rey, es decir, queriendo mantener el buen momento de forma y buscando un acercamiento óptimo a nivel competitivo, el Deportivo Alavés sufrió ante el Athletic hasta que Theo, con un golazo, les ayudó a aguantar atrás.
«El gol nos ha ayudado a jugar otro partido. El Athletic Club fue bajando, nosotros fuimos ganando en confianza… Los partidos están hechos de muchos momentos, y estos han ayudado a que podamos conservar estos tres puntos para nosotros».
Pepe Mel. Deportivo de la Coruña – RCD Espanyol
El Deportivo de la Coruña volvía a recibir a un rival que no se jugaba demasiado en términos clasificatorios, pero los errores individuales en la parte de atrás lastraron el desempeño colectivo del conjunto gallego, que en la segunda parte ya sí mejoró bastante.
– ¿Cómo está el vestuario? ¿Ha aumentado el temor por el descenso?
«El ambiente no nos ayuda mucho. Todos los mensajes que recibimos del exterior son malos, negativos, negros, catastróficos… Obviamente nosotros solos nos hemos metido en esto, pero si jugamos como en la segunda parte no tengo ninguna duda que de seis puntos que quedan vamos a hacer los que necesitamos. ¿Cómo está el vestuario? Pues de dos formas: pesaroso por cómo han sido las cosas -no les dejo hablar de malas suertes, sino de errores técnicos-, y optimista viendo que la forma de salir es la reacción que han tenido de cincuenta minutos, acorralando a un equipo que tiene argumentos de sobra para estar arriba».
Joan Francesc Ferrer «Rubi». Sporting de Gijón – UD Las Palmas
El Sporting de Gijón de Rubi salvó su primer match-ball con un importante triunfo ante Las Palmas. De inicio, la medida que más sorprendió fue la alineación conjunta de Duje Çop y Carlos Castro en punta, aunque este último se fue escorando paulatinamente a la derecha.
«La idea con Castro era tener otro delantero en el campo. En principio él jugaba como un delantero algo escorado a la derecha, pero quizás se ha responsabilizado en exceso a la hora de ayudar en defensa, cosa que yo no quería tanto. Pero al final también ha corrido a espalda de la defensa, que era otro de los objetivos, y ha dado continuidad a una semana de entrenamientos por su parte».
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