Los enfrentamientos entre el joven entrenador Víctor Sánchez del Amo y los equipos más potentes del campeonato se han convertido en patrimonio de la Liga española desde la llegada del madrileño a la Primera División. Tras propinar al Barça de Luis Enrique un revés futbolístico que no se saldó con goleada de manera inexplicable, anoche visitó el Santiago Bernabéu y, en el aspecto táctico, volvió a superar, con margen, a su colega de profesión, Zinedine Zidane.
El Real Betis se organizó en base a un 5-3-2 con algunos ajustes interesantes, siendo el principal de ellos la configuración de su centro del campo. Leyendo y aprovechando que el Madrid había formado un 4-2-1-3 con Kroos de pivote izquierdo e Isco de mediapunta y que, por lo tanto, su ataque iba a polarizarse de forma rotunda hacia el sector siniestro, Víctor situó como interior derecho de su triángulo en la medular a su medio con más condiciones de mediocentro, Brasanac, dibujando una escalera defensiva en la que el peldaño retrasado era precisamente el interior derecho y donde Pardo -teórico pivote- y Ceballos -interior izquierdo- se soltaban para presionar. De este modo, Víctor bloqueaba la salida por la derecha, desviaba a todo el Madrid hacia la zona de Marcelo y allí congestionaba la circulación de tal modo que los blancos, sin línea de pase interior, se entregaban, otra vez, a colgar el balón a la olla pero, en esta ocasión, con una franca y obvia inferioridad numérica en el área debido a que Antonio Adán estaba protegido por hasta tres centrales.
Tras un buen inicio, el Madrid, colectivamente, se vio impotente.
Dicho esto, el plan de juego del Betis no se limitó a defender; no buscaba el empate, sino la victoria. En pos de ello, usó dos puntos. El primero, la ausencia de Casemiro en la sala de máquinas merengue, que borraba la referencia de auxilio sobre la que se apoyan los centrales de Zidane para defender; el segundo, esa ansiedad a la que el Real se está viendo expuesto en las últimas semanas por el mal momento de forma o confianza de Keylor Navas, que le está forzando a empezar la mayoría de los partidos con el pesadísimo imperativo de remontar y cuya traducción futbolística está siendo una presión individualista y precipitada de sus medios que está desequilibrando su centro del campo y, por ende, su sistema en general. A partir de esa doble circunstancia, los dos delanteros béticos, Rubén Castro y Toni Sanabria, se vieron en un mano a mano contra Sergio Ramos y Nacho donde la pareja de atacantes se mostró muy superior a la de zagueros, tanto para ofender sin preámbulos ni compañía como para aguardar un poquito arriba a la llegada del talentoso carrilero zurdo Riza Durmisi.
La habilidad de Marcelo y el poderío estratégico de la dupla Toni Kroos-Sergio Ramos privaron al Real Betis, y a Víctor Sánchez del Amo, de una nueva machada que, dicho sea, no habría sido casual.
Foto: GERARD JULIEN/AFP/Getty Images
Xisco_Rincon 13 marzo, 2017
Evidentemente la clave principal que da alas ayer al conjunto Bético fue Keylor, no porque el Betis no lo hiciera bien, pero seamos realistas concedió un gol de la nada, y casi se autoexpulsa en una jugada donde el delantero no llegaba al balón (que si hubiera llegado hubiera sido gol sí o sí igualmente)… Luego hace una buena parada es cierto… Pero para mí las posibilidades del Betis, más allá de hacerlo bien, se dan porque el portero del Madrid está muy mal.
A parte de eso, si es cierto que el Betis defendió bien, y luego aprovecho la ausencia de Casemiro. Debo decir que el partido donde yo he visto mejor al Madrid defensivamente, más tranquilo y más completo, fue con Casemiro y Modric de medio centros, creo que el Madrid con esa configuración controla el partido, tiene salida y no sufre mayores apuros. Además, viendo que arriba acaba metiendo un mínimo de dos goles (desde hace ya muchos partidos) y visto el nivel de Keylor y de la defensa (puede que condicionada por el mismo portero) creo que Zidane debería empezar a plantearse soluciones más conservadoras… Los intentos de recuperar cosas mejor dejarlas para el año que viene, estamos muy avanzados en la temporada y los experimentos pueden explotar en cualquier momento.
También podría cambiar el portero, pero eso dudo que pase.
Dicho esto, deberíamos entrar en la defensa de los equipos al Madrid. Es cierto que el Betis defendió bien, defendió con tres centrales, tenía superioridad dentro del área, evitó que la mayoría de los centros fueran peligrosos pero, aun así, recibió dos goles de cabeza, uno a balón parado y uno en jugada. Dos! tal vez no sea para nada rentable a un equipo plantearse defender los centros laterales del Madrid, no veo que funcione, ni cuando lo hacen bien. Creo que fue Cruyff que dijo que si alguien hace algo muy bien, casi indefendible, lo mejor es no defenderlo. Tal vez sea así, porque mejor de lo que lo planteó el Betis ayer, no se si se puede. Al Madrid cada vez le defienden más los centros laterales y remates, y cada vez mete más goles así. Al Madrid ahora mismo creo que hay que ir a meterle gol, pero sin mirar atrás, recibe goles con bastante facilidad, o por lo menos relativa, al mismo tiempo que casi con seguridad va a marcar uno o dos. Yo creo que todo pasa por conseguir chutarle mucho, aunque sea de lejos, veo que los defensas van hacia atrás y Keylor está propenso a fallar. Pues hay que ir a por la defensa, como hacía el Borussia, sin descanso… Ahora mismo, al Madrid se le pueden marcar tres goles. Uno ya viene de serie, sin insistir… y si no juega Casemiro, no creo que se deba tener miedo del pase largo al delantero, la defensa está metida muy atrás y los medios, sin Casemiro, no pillan un balón por arriba.