Bastaba con un balón en largo para Diego Costa o con provocar un saque de esquina para que, por pura probabilidad, el gol cayese a favor del Atlético de Madrid 2013/2014. El equipo de Simeone, de no mediar Sergio Ramos, hubiera conquistado un doblete histórico con tantísima justicia como la de cualquier otro campeón, pero esto no debe ser óbice para rememorar que, en el aspecto ofensivo, los colchoneros fueron el paradigma de cómo sacar más con menos.
Un córner era una jugada de gol más para el Atleti 2013-2015En concreto, el balón parado comenzó a aparecer cuando más lo necesitó el Atleti. Es decir, en la segunda vuelta, momento en el que los contrarios ya comenzaban a adaptarse al «Cholo», los espacios desaparecían y la presión por ganar comenzaba a entrar en escena. Porque aunque el primer gol de aquella Liga es de Costa tras un córner, es a partir de enero cuando el Atlético comienza a solucionar muchos partidos gracias a su poderoso balón parado. Levante, Sevilla, Valladolid, Granada, Villarreal, Elche… Los de Simeone dejaron de jugar tan bien como en otoño, pero puntuaban prácticamente al mismo ritmo. De córner en córner hasta el definitivo gol de Godín. Esta inercia se mantuvo y, de hecho, tocó techo la temporada pasada. El Atlético perdió a Costa, su nivel volvió a decaer y el balón parado, otra vez, se convirtió en su mejor aval. Parecía que cuanto más necesitaba el Atlético una ayuda, entre comillas, no relacionada con el juego, su balón parado daba un paso adelante. No sólo por el obvio valor del gol en particular, sino porque, además, para los rojiblancos un gol era mucho más importante que para cualquier otro conjunto.
Básicamente, porque su balón parado tenía tanto de arma ofensiva como de defensiva, pues el 1-0 a favor le permitía situar los partidos en el contexto táctico que mejor le venía al equipo sin necesidad tampoco de asumir riesgos para lograrlo. Por tanto, su impacto era tremendo, tanto en lo futbolístico como en lo emocional. Incluso se llegó a dar el caso de que muchos entrenadores rivales hablaran en los días previos de cómo su equipo debía intentar no conceder ese tipo de situaciones. El objetivo no era ya defenderlas mejor, sino directamente… ¡tratar de evitar un simple córner! Se trabajaba eso. El Atleti les obligaba a hacerlo, y lo mejor es que no servía de nada.
En verano todo esto cambió por completo.
Pero de esto ya queda muy poco. Ha tocado esperar un tiempo para comprobar cómo de grave era la debilidad que desde el primer día, en el encuentro ante la UD Las Palmas, ha venido demostrando el Atlético 2015/2016 en este tipo de situaciones, y a 30 de enero ya podemos decir que está siendo más grave de lo presupuestado.
– Atlético 2013/2014: 23 goles a balón parado. Koke, Gabi y Sosa, los principales lanzadores, dan 27 asistencias sólo en Liga BBVA. El equipo marca 24 goles de cabeza en total (22% de los tantos).
– Atlético 2014/2015: 30 goles a balón parado. Koke y Gabi, los principales lanzadores, dan 15 asistencias sólo en Liga BBVA. El equipo marca 28 goles de cabeza en total (30% de los tantos).
– Atlético 2015/2016 (cifra proyectada): 12 goles a balón parado. Koke y Gabi, los principales, dan 13 asistencias sólo en Liga BBVA. El equipo marca 7 goles de cabeza en total (16% de los tantos).
Los números no engañan. A fecha de hoy, el equipo colchonero únicamente ha anotado 7 tantos en situaciones de balón parado (incluyendo faltas y saques en corto), y sólo en un partido de Liga éste ha sumado de forma decisiva (ante el Athletic). Y no es casual.
Sin Costa ni el balón parado, al Atleti le cuesta el 1-0.
A balón parado el Atlético ha perdido mucho¿Por qué está pasando? Respuestas no faltan. Como decía Simeone hace poco, los técnicos rivales ya conocen su dedicación en este aspecto del juego y lo están trabajando todavía mejor. Aunque esto, en realidad, ya lo sabían hace tiempo y los resultados seguían siendo positivos gracias a Miranda, Raúl García o Mandzukic, jugadores que siguen marcando goles a balón parado, sólo que para otros equipos. Todo esto, unido al hecho de que quizás la concentración en estas jugadas ha bajado, ha provocado que el balón parado del Atlético de Madrid de Simeone haya pasado de ser una de sus mejores virtudes a uno de sus grandes problemas, pues además de no sumar arriba le está restando atrás.
En esta Copa se comprobó esta gran debilidadSin un delantero centro poderoso en estas lides, el primer palo ha quedado tocado. Pero es que también Giménez es peor marcador que Miranda, ya no existe la figura de Raúl García y Jan Oblak, aunque está mejorando mucho en este sentido, nunca va a poder ser un controlador aéreo como era Courtois. Y esto no sólo supone ser más propenso a encajar un gol, sino también a tener que adaptarse a un guión que no les gusta tanto. El ejemplo del tanto del «Tucu» es muy potente. Con el 0-0 como colchón, el Atleti estaba dominando el partido, pero el 0-1 cambió por completo el escenario. De repente, los de Simeone tenían que marcar dos goles. Y los marcó, pero a costa de encajar otros tres. El Celta de Vigo, en definitiva, le hizo un Atlético de Madrid al Atlético de Madrid.
Ahora mismo, es un tema a resolver por el Cholo.
Se viene insistiendo mucho, no sin toda la razón, en el problema de Simeone con la figura del delantero centro. La ausencia de Diego Costa no ha sido subsanada pese a los esfuerzos de Antoine Griezmann, que además transmite que no puede hacerlo mejor de lo que ya lo hace en el aspecto goleador. Sin embargo, el más que considerable bajón a balón parado supone una pérdida incluso mayor para el Atlético de Madrid. Otrora el delantero más infalible, el centrocampista más mandón y el defensa más ordenado, hoy es un problema que le cuesta campeonatos a Diego Pablo Simeone.
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danielgi610 30 enero, 2016
Por mas que Vietto este gustando por sus movimientos en la cancha, a este equipo le urge que llegue Jackson Martínez al equipo, dominante en el juego aéreo. Vamos que a todos las salidas del equipo en el juego aéreo y le agregamos la lesión de Tiago, los únicos que suman a balón parado son Godin, Luis y Giménez siendo los últimos 2 lo mínimo aceptable. Mas que error táctico del Cholo parece una circunstancia de los jugadores titulares