Aunque quizás los dos más famosos sean los alemanes de origen polaco, Sudamérica es el subcontinente que más y mejor representa la esencia del jugador-selección. Es decir, de ese tipo de futbolista que, independientemente de cómo se va desarrollando su carrera de clubes, logra mantener un rendimiento constante y positivo siempre que se enfunda la camiseta de su país.
Los casos de Arévalo Ríos (Uruguay), Sergio Romero (Argentina) o Jefferson Montero (Ecuador), por poner tres ejemplos, escenifican a la perfección cómo los jugadores-selección no sólo consiguen dar un salto de calidad con el combinado nacional, sino que además logran transmitir la sensación de que su historia con la selección es un día a día inmutable. Que pese a que dos convocatorias estén separadas por varios meses de distancia, para ellos siempre existe un ayer y un mañana en el que no entran más variables ni factores.
Diego Lugano es uno de los jugadores-selección más exitosos.
De esta extraña alteración temporal, precisamente saben mucho los dos nueves de la semifinal que esta noche enfrenta a la gran Chile de Jorge Sampaoli con la sorprendente Perú de Ricardo Gareca.
Guerrero suma récords en la Copa AméricaUn equipo el peruano que, de hecho, no hubiera podido alcanzar esta semi de no haber contado con el hat-trick de su gran especialista en Copas Américas: Paolo Guerrero. Porque el que fuera punta de Hamburgo o Bayern Munich, nunca sumando grandes cifras, ha hecho del torneo sudamericano su particular coto de caza. Si en Venezuela 2007 ya fue considerado el mejor jugador de una Perú que llegó a cuartos y en Argentina 2011 la llevó a semifinales siendo el máximo realizador del torneo, en Chile 2015 ha logrado batir varios récords históricos tras los tres tantos ante Bolivia. Además de ser el máximo goleador en activo tanto de la Copa América como de Perú, estando ya a sólo 3 dianas del gran Teófilo Cubillas, Guerrero se ha convertido en el único jugador de la historia en anotar dos hat-tricks en una fase del KO de dicho torneo. Una efeméride curiosa y positiva que premia a un ‘9’ al que, como a la «Bicolor», le falta mejorar en las eliminatorias mundialistas, pero que en esta edición de la Copa América, a la que llegó tras sufrir dengue y un esguince, está volviendo a traducir en peligro todo lo que Vargas, Advíncula, Cueva y Farfán generan por las bandas.
Enfrente, ocupando el área del interesante Pedro Gallese, estará un Eduardo Vargas que representa incluso con mayor precisión lo que significa ser un jugador-selección en toda su dimensión. Sólo hace falta contraponer sus pésimos registros en grandes clubes (11 goles en 75 partidos con Nápoles, Valencia y QPR) con la octava posición que ya ocupa a sus 25 años en la tabla de máximos realizadores de la historia de la «Roja» para comprender su naturaleza. Ni siquiera su intermitente presencia en los primeros años con Bielsa y Borghi, con quienes se perdió sus primeras grandes citas, modificó su destino. Simplemente en aquel entonces era muy joven, estaba Humberto Suazo y, si éste faltaba, la figura del ‘9’ en Chile tampoco parecía tan esencial como en otros equipos. Sin embargo, a esta generación siempre le faltó un goleador, un convertidor que hiciese bueno el elevado volumen ofensivo que logran producir Alexis, Valdivia y Vidal. Un rol concreto que, sorprendentemente, Vargas ocupa con brillantez desde que su puntualidad en la fase de clasificación para Brasil 2014 evitase algún que otro problema inesperado a los de Jorge Sampaoli. Desde entonces, pese a empezar de suplente ante Ecuador y de carrilero contra México, Eduardo Vargas siempre ha estado ahí, liberando a Alexis de los centrales y rematando en el punto de penalti todo lo que llegase.
Que su media goleadora de 0’27 tantos por partido en clubes se incremente hasta el 0’43 con Chile no es ninguna casualidad. Los jugadores-selección existen, y Ricardo Gareca y Jorge Sampaoli tienen a los suyos en el área. Quizás por eso, tanto Chile como Perú están a un único paso de la gran final de la Copa América 2015.
@_H___H_ · hace 511 semanas
Tal vez sea el DT que mejor nivel ha logrado sacar de él en toda su carrera, cuando se lo veía entonces uno pensaba que tenía todo para triunfar en europa, y a pesar de luego fracasar en sus clubes allá el reencuentro con Sampaoli parece hacer resurgir siempre un nivel mejor en él. Evidentemente para salir de dudas tendríamos que ver su nivel con otro seleccionador, supongo que el tiempo dirá.
@migquintana · hace 511 semanas
Siempre hay una explicación. Quizás a veces tenga que ver con un aspecto emotivo, con un sentimiento de patria o demás, pero por ejemplo Podolski es polaco y siempre encontraba el contexto ideal para rendir con Alemania en esa posición de extremo-delantero del lado débil del ataque.
En el caso de Edu Vargas puede ser perfectamente Sampaoli por lo que dices. En aquella U recuerdo que hace una Copa Sudamérica brutal de pura estrella. Pero yo más que quedarme en el nombre y apellidos del DT, me quedo también con lo que es el bielsismo y lo que es Alexis Sánchez. Ambos entes casa bien per se, pegan mucho, pero con Vargas por delante todo tiene más sentido.
Algo parecido a lo de Charles Aránguiz, por ejemplo. Que, curiosamente, si no me equivoco también estaba en aquel equipo de Sampaoli y Vargas que termina ganando dicha Sudamericana.
Abel Rojas 130p · hace 511 semanas
La teoría de H_H es bastante buena... Como mínimo obliga a esperar y, como él mismo apunta, ver cuál es su rendimiento en Chile cuando Sampaoli ya no esté.
Con Guerrero está claro que las dudas son menores.
LOCOMUYCUERDO · hace 511 semanas
sobris · hace 511 semanas
@migquintana · hace 511 semanas
De Lugano escribimos algo parecido durante el Mundial:
http://www.ecosdelbalon.com/2014/06/carrera-lugan...
@sobris
Nicklas Bendtner ha gustado más con Dinamarca que con clubes, pero tampoco... Aunque sí es cierto que en las eliminatorias suele tener una presencia de cara a gol que jamás ha tenido en Arsenal o Wolfsburgo.
CanguroPorta · hace 511 semanas
¿Ospina?
leoquinton 1p · hace 511 semanas
En lo que respecta al artículo, me queda muy claro que el técnico en parte llega a ser fundamental, digo en parte porque considero más para Chile que para Perú, recordando el hecho de que Sampaoli dirigió a un muchacho como Vargas en aquella Sudamericana con la U de Chile. Igualmente para su caso me han llegado a parecer injustas las presentaciones que ha tenido Edu en Europa, porque con el Nápoli fue descartado casi desde el principio, sin darle tantas oportunidades; en el Valencia sí me parece que le fue bastante bien, pero con el QPR el mismo tema de pocas oportunidades.
Por el otro lado me parece que sí va más por mérito del jugador, haciendo referencia a Paolo Guerrero. Aunque pareciera algo de la misma identidad del futbolista (delantero) peruano, que es muy efectivo a pesar de las circunstancias del día a día, ¡claro ejemplo de ello podría ser Pizarro!
gustavo · hace 511 semanas
@migquintana · hace 511 semanas
Muchas gracias, amigo! Aquí eres bienvenidísimo. :)
Coincido en que su paso por Valencia fue bastante positivo. Jugó en ambos bandas, dio chispa al equipo, se mezcló bien con sus compañeros y creo que dejó una buena impresión en una plaza siempre exigente. Pero al final... es que los registros goleadores son paupérrimos en Nápoles, Valencia y QPR. Ya digo, me considero fan del jugador, me gusta, su fútbol "me cae bien", pero tiene pega.
@gustavo
Me lo comentó mucha gente por Twitter, sí.
hola · hace 511 semanas
@_H___H_ · hace 511 semanas
Ya que mencionas a Aránguiz me hace pensar algo similar, en esa u de chile hubo jugadores que alcanzaron un nivel superlativo, como él y Marcelo Diaz y a mí me daba la sensación de que podrían hacer cosas importantes en Europa y después no ha sido así, por eso al verlos rindiendo en la selección con el mismo DT me entra esa duda, en el ciclo de Borghi no recuerdo que sobresalieran, ni siquiera si tenían puesto.
John · hace 511 semanas
Lo que deja claro este artículo es que a muchos jugadores el lucir la casaca de su país termina siendo como una especie de energía ascendente. Les revitaliza, independientemente del rendimiento que arrastren en el momento.
Lo de Vargas es un impulso doble porque, como comentan algunos, el estar con un entrenador de sus afectos le hace estar más cómodo, libre y feliz; y por ende, destacar y ser más protagonista. Junto con Vargas, lo de Medel me parece igual o de mayor representación. Gary, casi siempre, el estacionarse en la selección le inyecta mejoría y lucidez. Siempre protagonista y necesario para los suyos.
Por último, gracias Miguel. Una pasada lo que venís haciendo con Copa América junto al equipo de Ecos.
Sergio · hace 511 semanas
ricardojavier1 46p · hace 511 semanas
Un saludo!