«1. Para jugar como pretendo, necesito precisión en velocidad, un ataque directo y dos centrales con los huevos así grandes. No para que peguen, sino para que se atrevan a adelantar líneas, que saquen al equipo lo más lejos posible de la portería. Entre la línea de fondo y los centrocampistas no puede haber más de 15 metros. Tampoco cuando tengamos el balón. Cuando el equipo ataca también está defendiendo.
2. Cuando perdemos el balón, tenemos que presionar para recuperarla antes de los cinco segundos. No se podrá recuperar siempre, pero tenemos que tener que jugar con ese pensamiento y esa intensidad. Yo no negocio con la intensidad a la hora de recuperar el balón.
3. El retroceso es siempre con posiciones fijas (y escalar). Así se ganan entre 15 y 20 segundos. El equipo se reagrupa más fácil. Es mejor que si cada uno quiere volver y reubicarse en su posición de origen.»
* Estos principios trascritos de manera literal fueron desvelados por el entrenador Sebastián Méndez en el periódico «La Nación» de Argentina.
bvb 14 agosto, 2014
El tercer mandamiento no se si está bien expresado…. Se refiere a que prefiere que cada jugador vuelve a su posición o que se coloca en otra. LO digo porque primero dice que las posiciones son fijas y luego que esto es mejor que si cada uno vuelve a su zona de origen…..Un poco contradictorio o yo no termino de pillarlo