Francia: Crónicas diplomáticas | Ecos del Balón

Francia: Crónicas diplomáticas


A lo largo de esta serie de colaboraciones sobre cine y fútbol nos hemos dado cuenta de que a medida que avanza el Mundial bien podría ir escribiéndose un guión sobre las sorpresas que nos va dejando. Sería un libreto de lo más enrevesado, lleno de giros y sorpresas que dejarían a cualquiera atado a su butaca. Como en los grandes clásicos -¿recuerdan Psicosis verdad?-, los que creíamos protagonistas, las más brillantes estrellas de cine, perecen ante nuestra atónita mirada, mientras que los que en el cartel parecían secundarios van adquiriendo más y más protagonismo.

Aunque en principio su nombre no tuviese el mismo tamaño que el de otros miembros del reparto, Francia es un actor experimentado al que siempre hay que tener en cuenta, pero tampoco muchos vaticinaban que fuese a entrar en la fase de grupos como elefante en una cacharrería. No solo fue el partido ante Suiza, es la potencia física y mental, la capacidad resolutiva y sobre todo la confianza que están mostrando los galos lo que ha hecho que muchos ya les hayan echado el ojo como serios candidatos a cualquier cosa. Ni las ausencias de Ribery (por lesión) y Nasri (por decisión del seleccionador Deschamps) les han achantado lo más mínimo.

¿Será Francia como el ministro de exteriores francés Alexandre Taillard de Vorms? Alrededor de su enérgica figura, basada en la de Dominique de Villepin (que ostentaba ese cargo durante el gobierno de Jacques Chirac), Bertrand Tavernier construye una brillante comedia salpicada de guiños al material de origen: el cómic escrito por Christophe Blain y Abel Lanzac. «Crónicas diplomáticas» nos introduce de lleno en la mundanidad y el azar que rige los asuntos más importantes de una nación con tanta influencia como Francia. Volamos por los ostentosos pasillos junto a un joven encargado de escribir los discursos al ministro, las palabras que pueden cambiar inversiones, decisiones, e incluso vidas. Todo sujeto a la impulsividad de un hombre tan carismático como inestable, capaz de lo mejor y lo peor, veleta en constante movimiento. La próxima misión diplomática de la selección francesa tendrá lugar en Brasilia y contra Nigeria. El resultado, como todo este Mundial, es completamente impredecible.

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Referencias:
Revista Magnolia
Pedro Villena


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