Los Mundiales tienen una capacidad inaudita para regalarnos imágenes imborrables, pero desde hace más de una década el mundo del fútbol espera encontrarse de nuevo con una escena que le era familiar: ver a Brasil levantando la Copa del Mundo. En cambio, el resto del planeta observa atónito las protestas, huelgas y manifestaciones en múltiples ciudades brasileñas en contra de un Mundial al que rodea un desorbitado desembolso, la miseria y las desigualdades de un país forzado a las imperativas de la FIFA por encima de las de sus ciudadanos, logrando así una imagen acorde a sus intereses publicitarios.
El documentalista camboyano Rithy Panh reconstruye en «La imagen perdida» (L’image manquante, 2013) las fotografías que se borraron o que nunca existieron del genocidio llevado a cabo por los Jemeres Rojos en su país entre 1975 y 1979. En un acto no ya de justicia o denuncia, sino de historia y dignidad cinematográficas, su potente dispositivo de reconstrucción histórica dota de vida a su pasado común por medio de artesanales muñecos de arcilla, en busca de una imagen que no encuentra.
Entre ambas perspectivas, el ilusionante partido inaugural llega prácticamente negándonos la oportunidad de reflexionar al respecto. Sin dejar de mirar para otro lado, en cuanto el balón eche a rodar se llevará merecidamente toda nuestra atención y aplauso, como debe ser. O al menos como debería de ser. Croacia es una incógnita y al mismo tiempo un proyecto deseado, termómetro ideal para calibrar de inicio a una selección brasileña que parte como gran favorita y que espera no tener que reconstruir una imagen que le pertenece, jugando en casa pero sin dar la espalda a la realidad, o el espectáculo tendrá que ser puesto en entredicho.
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Referencias:
Revista Magnolia
Antonio M. Arenas
@antonioleonro 18 junio, 2014
No me había percatado que esta película fue la primera que pusisteis. Añadir simplemente que estos hechos deben permanecer en la memoria y bien el intento de este documentalista para que como dijo aquel presidente americano, no recuerdo si Roosevelt o Truman:" guarden todas las fotografías, peliculas de este horror de los campos de concentración, porque llegará el día que algún estúpido dirá que todo es mentira".