El Bayern de Múnich de Franz Beckenbauer levantó en 1976 su primera Copa Intercontinental al derrotar a doble partido al Cruzeiro de Brasil. En el choque de ida, los alemanes vencieron por dos goles a cero a su oponente sudamericano, con tantos de Jupp Kapellmann y del histórico goleador Gerd Muller. El gran resultado de la ida fue suficiente. En Brasil, el Bayern arrancó un empate a cero que le daba el trofeo oficioso de campeón mundial.
En Múnich, ante más de 55.000 espectadores, el Nottingham Forest mantenía el dominio inglés en el máximo torneo continental al vencer por 1-0 al Malmö FF, de Suecia. Los británicos, dirigidos por el famoso Brian Clough, lograban su primera Copa de Europa gracias al gol de Trevor Francis, de cabeza. El triunfo del Forest era el tercero consecutivo de un club de las islas, racha que duraría tres años más. La liga inglesa mandaba en Europa y nadie podía derrotarlos.
@DavidLeonRon 19 abril, 2014
Lo he dicho varias veces pero me impresiona la longevidad ganadora del Bayern de Beckenbauer. Casi 10 años de pelea por los títulos entre una generación y otra. Eso y lo de Muller, que me parece que no se quedó sin marcar en ningún partido relevante, o en muy pocos vaya. Goleador histórico.