El Almería no anda muy satisfecho con los caprichosos designios del fútbol, pues conforme ganó consistencia y mejoró resultados el equipo andaluz fue perdiendo ángel hasta caer de nuevo. Ayer los de Francisco empezaron mejor de lo que siguieron, pero nunca mostraron demasiado ante un Rayo que, por el contrario, viene sumando virtudes tras pintar realmente mal. La reacción vallecana se asienta sobre varios factores, entre los que hay que destacar la mano de Paco Jémez ajustando defensa y salida a baremos más ortodoxos, pero ante el Almería lo que más lució fue una línea de mediapuntas oblicua que enorgullecería al viejo Epaminondas: Larrivey y Rochina cocinan la ventaja en el centro, Bueno y Falqué profundizan por la izquierda y la derecha remata el partido.
Fue un 6 de julio de hace mucho tiempo. En esa época los ejércitos estaban acostumbrados a enfrentar sendas formaciones de infantería, anchas y rígidas, planas, hasta que en algún punto del frente de batalla el empuje de unos rompiera de forma decisiva la línea de los otros. Fue en Leuctra donde todo cambió. El tebano Epaminondas derrotó a las tropas espartanas con una táctica novedosa que dibujaba un frente oblicuo con sus infantes, con el ala izquierda no sólo más adelantada que el ala derecha, sino mucho más profunda. Mientras su centro invitaba al grueso del ejército enemigo a dar un paso al frente la batalla se decidió con el avance imparable de la poderosa columna que el general había dispuesto a su zurda.
Comentarios (5)

Comments by IntenseDebate
@bimbix · hace 575 semanas
Abel Rojas 130p · hace 575 semanas
@DavidLeonRon · hace 575 semanas
kjvng 43p · hace 575 semanas
Del que por cierto cabría escribir una epopeya clásica es del Betis: si a pesar de bajar logran llegan a la final de la Europa League, lo suyo dará como mínimo para una Anábasis...
@migquintana · hace 575 semanas