Unai Emery es un entrenador de extremos estilísticos porque no cree en el control de los partidos; o es ultra-defensivo o es ultra-ofensivo. Dentro de lo que cabe se mueve bien en esas lides, pues posee recursos tácticos y una imaginación notable, pero no se puede ser fiable 100% si de raíz se renuncia a atar cada cabo. Hoy tiene que remontarle un 0-2 al Real Betis y en Sevilla se comenta que saltará al campo con Rakitic, Reyes, Marin, Gameiro y Bacca. Dicho de otro modo, Unai buscará el 0-3 desde el primer minuto. ¿Procede?
El Betis padece si se le remueveEl equipo de Calderón es muy débil en defensa, marcarle más de un gol parece incluso más lógico que difícil, por eso, en apariencia, salir a la desesperada genera dudas en el seno del Sánchez Pizjuán. Queda la sensación de que el Betis siempre tiene la puerta abierta y que el Sevilla aceptaría abrir la suya a cambio de poco, porque, si bien es cierto que el plus de pegada que agregaría Emery sería muy relevante, también lo es que podría llegar a auto-taponarse espacios por propia voluntad. En la ida del Sánchez Pizjuán, el Sevilla inquietó más con Bacca solo en punta y Rakitic de enganche que con «doble 9″ e Ivan de «5». El croata arriba ordena jugadas; desde abajo solo sabe lanzarlas. Y al Betis hay que removerlo. Sobre el papel, homogeneizar sus acciones defensivas ayudaría al inconsistente equipo de Calderón.
Si el Sevilla es paciente, Marko Marin y Alberto sí desequilibrarán.
Distinto es que Rakitic haga un partido diferente, sea más cerebro que lanzador y busque a Marko Marin y Reyes en los costados. No sería propio de él, no entra dentro de sus aportes más regulares, pero tiene calidad y, bien enfocada, para una noche aislada podría dar el pego. En ese caso, Calderón sí estaría ante un problema; ni por calidad ni por acumulación ofrece el Betis seguridad defendiendo las bandas. El letal regate de Marin (a quien se le ve chisposo) y la llegada del genial Alberto Moreno -partiendo de la base de que el colectivo le esperase– sí serían argumentos conflictivos para los visitantes. Quizás en pos de ello Calderón se arme con tres centrales y el comodín N´Diayé en el mediocampo tirando coberturas en todas partes. Sea como sea, tanto ante un Sevilla inteligente como ante uno ofuscado, el 0-2 de renta es un resultado maravilloso al que debe sacarle provecho. Sobre todo con Rubén Castro y Baptistao prestos para asestar el golpe más definitivo.
@DavidLeonRon 20 marzo, 2014
Ojo a las bandas del Betis. Parece ser que Amaya jugará de lateral derecho. Por ahí puede sufrir.
PD. Vaya ambientazo va a haber hoy en el Villamarín.