Probablemente si a Rudi Garcia le hubiesen dado un papel y un lápiz, y le hubiesen pedido que dibujase una jugada de gol en la que participasen Totti, Strootman y Florenzi, hubiese pintado algo muy parecido a lo que fue el 0-3 que ayer su Roma le hizo al Internazionale. Total, a Totti se le puede ocurrir cualquier cosa y dibujarle bailando sobre el área propia para lanzar un contragolpe no hubiese sido algo demasiado presuntuoso; que Strootman corra setenta metros para conducir una transición veloz no es más que parte del plan diseñado, un cometido totalmente al alcance del auténtico box to box del equipo romano; y que Florenzi acabe en zona de remate es la situación más repetida cuando de cargar el área se trata, el futbolista más agresivo del equipo en cuanto a movimientos de ruptura. El gol no sorprendió a ningún romanista, lo esperaban, porque lo empiezan a sentir como suyo.
La AS Roma ya se puso 0-3 antes de llegar al descanso.
Quizá es este el mayor logro de Rudi Garcia como técnico romanista: no hay futbolista que no tenga un rol definido y, lo más importante de todo, cada una de esasLos futbolistas de Rudi García saben su rol funciones está apoyada en una armonía colectiva y tiene muy en cuenta las cualidades individuales. Es decir, Florenzi ha de hacer movimientos de ruptura porque Totti es un 9 que juega como centrocampista. Strootman tiene un recorrido tremendo porque Pjanic tiene más juego posicional y es quien ofrece apoyos entre líneas, y los laterales se proyectan porque De Rossi equilibra. Garcia ha conseguido una magnífica mezcla que ha dado con un rendimiento en el primer mes y medio de competición que sitúa a su Roma entre los clubes que mejor han empezado la competición en toda la historia del campeonato italiano: 7 partidos, 7 victorias, 21 puntos de 21 posibles, 20 goles a favor y 1 en contra. Una auténtica salvajada.
Antes de la visita al Giuseppe Meazza la Roma ya había recibido la aprobación de la crítica, pero le quedaba una actuación de primer nivel frente a alguno de los cocosLos de Mazzarri también habían comenzado bien de la competición para confirmar los buenos augurios. El Inter de Mazzarri también había empezado la temporada francamente bien -aún sin llegar a los espectaculares números del equipo capitalino- y su solidez era un buen argumento como para considerar al biscione una buena prueba de fuego para el conjunto giallorosso. Mazzarri mantuvo el bloque base de comienzo de la temporada -con las dos importantes bajas de Jonathan y Campagnaro-: el 5-3-2 habitual con Ricky y Palacio en punta. Por su parte, la Roma también comenzó con su once tipo a excepción de la obligada variante de Torosidis por Maicon: un 4-3-3 en el que Adem Ljajic parte desde el banquillo, con Florenzi y Gervinho flanqueando a Francesco Totti.
Garcia planteó un partido en el que le iba a dar a Mazzarri su propia medicina: un bloque bastante bajo y transiciones veloces. La Roma no tuvo miedo a desplegar con losLa velocidad de Gervinho fue decisiva ayer interiores a pesar de que la pérdida pudiese dejar expuesto a De Rossi, con dos extremos muy profundos -uno con balón, Gervinho, y otro sin él, Florenzi-, y con Francesco Totti como lanzador de cada transición. La exhibición técnica del capitán fue maravillosa, tanto en el 0-1 como en el 0-3 -sin pasar por alto la buena ejecución del 0-2 desde el punto de penalti-, dejando claro que aún a sus 37 años le queda alguna noche mágica en algún que otro templo del fútbol italiano. Y aunque Totti lo representa todo en esta Roma, lo bonito y lo decisivo, el nombre de la primera parte -y probablemente del partido- fue Gervinho. El planteamiento explosivo de Garcia encontró en el costamarfileño su principal lanza, porque consiguió estirar al equipo con sus carreras -rapidísimo, dominante a tope en transiciones- y encima con pelota controlada está finísimo en el regate. Desborde puro.
Fue una exhibición de pegada del equipo romanista.
El partido de la Roma pudo no ser brillante en muchas fases del juego, pero representó de forma milimétrica lo que está poniendo en práctica Rudi Garcia en este inicio de temporada: un pragmatismo inteligente, salidas rápidas, precisas y funciones bien definidas y diferenciadas. Un 0-3 al Inter a domicilio es una victoria de prestigio, tanto como para que a Totti al finalizar el partido le preguntasen por las opciones de Scudetto. El capitán se lavó las manos y habló de que el objetivo es volver a la Champions, pero es ineludible plantearse las posibilidades romanistas. Un equipo lanzado, bien estructurado y que no juega competición europea. Ayer un Pjanic fatigado tuvo que abandonar el campo y, sin Bradley, el sustituto fue Taddei. Ahí es, precisamente, donde empiezan las dudas sobre las posibilidades romanistas de rondar el puntuaje final de Juve y Napoli. Las opciones de la Roma pasan por tener suerte con las lesiones en puestos clave a lo largo del curso porque su rotación es peor que las de los grandes favoritos, pero el hecho de que se plantee la posibilidad de Scudetto habla mucho, y bien, del tercer proyecto post Sensi.
Kay 6 octubre, 2013
Bufff. visto así, candidato al calcio.Puesto que cada pieza se complementa
La pregunta es ¿y cuando además de lógica haga falta talento y magia?
Sobre Gervinho, en el Arsenal siempre lo quise en la derecha (pero estaba Walcott) . Más espacios, más facilidad para el regate, menos diagonal al area con la defensa esperando, menos pensar.
No obstante, la presión le afecto mucho. Por velocidad, regate y físico debería haber sido mínimo un jugador utilísimo, un caso drenthe /alexis,