Valverde ante la inquietud

Escuchaba a Ernesto Valverde en la rueda de prensa previa al partido de hoy y me quedó la duda de si este hombre sabe en qué situación llega su equipo a la capital. Rami y Feghouli son bajas por sanción, Roberto Soldado y Víctor Ruiz por lesión, y Haedo Valdez aterrizó con retraso de sus jornadas internacionales. Ante eso, el Txingurri construyó seis o siete minutos de envidiable serenidad ante las preguntas en sala de prensa para deleite del oyente. Con la victoria del Málaga y con la Real prendida de victorias, el míster valencianista maneja su pulso cardíaco con notable temple. Ante tales fechas imagino que la procesión va por dentro y nos hace creer que es aquel John Wayne llegando a Innisfree, pero sabiendo perfectamente que el Manzanares no es precisamente un paisaje fordiano, aunque Simeone sí que suele ser aquel Willy Danaher poniendo trabas.

Solucionar tantas bajas ante la mejor defensa y mejor local del campeonato no es fácil, pero es una oportunidad. La baja de Soldado, verdugo rojiblanco en la ida, aún bajo la dirección de Pellegrino, conllevaPara superar al Atleti, deberán mover el balón más rápido una solución de rama muy corta: hombre por hombre. Semana de selecciones mediante, Haedo Valdez será el hombre punta. Por detrás se intuye a Piatti intentando aprovechar las subidas de Filipe y seguramente Jonas para sacar de posición al mediocentro rojiblanco. Valverde incidió en intentar imponer sus virtudes y no dejar crecer las del rival, es decir, seguramente tenga la pelota y abra el campo, aspecto que a priori es lo que mejor aprovechan los colchoneros para dominar el encuentro desde el primer momento. La clave de las propuestas siempre es la convicción y la agresividad con la que se desarrollan. Si el Valencia mueve rápido la pelota, competirá, de lo contrario asomará el mayor problema que viene sufriendo en mayor o menor medida: cuando la pierde, sufre mucho. Falta de contundencia en sus mediocentros y el factor Diego Costa que se les viene a su tocayo Ricardo y al francés Mathieu, es lo que han de evitar; cosa difícil, la espalda de la zaga che es lo que hace mover los bigotes del Cholo.

Con Tiago recuperado y todo el plantel a su disposición, Simeone sigue inmerso en el único objetivo que queda hasta la final de Copa: ganar cada siete días, sin mayor distracción posible. Con sendos empates de los que les preceden, todo pequeño aliciente es poco para seguir con la fe intacta. Quince días después de comprobar en el Reyno que Costa o Koke van disparados y que Falcao no ha recuperado en su totalidad (bien en Málaga o Moscú) su mejor fútbol, el Atlético se presta a lamer las heridas de la ida en Mestalla o de la única derrota que figura en casa a manos de Xabi Prieto. Aunque esté a cinco victorias de distancia, quizá sea el Valencia el último rival directo al que enfrentarse, habiendo tachado los encuentros de vuelta ante donostiarras y malaguistas. El choque de hoy puede suponer un nuevo toque de atención o una brecha casi definitiva para no tener que jugar la previa de agosto. A su vez, los valencianistas, con un Real Sociedad-Málaga la próxima jornada, tienen una complicada pero buena oportunidad de puntuar hoy y salir beneficiado del duelo por la Champions en Anoeta. Esta noche, Willy Danaher y el hombre tranquilo.