El Levante-Barcelona de la temporada 2011-12 fue, sin duda, uno de los partidos más ricos en detalles del año en nuestro campeonato. Por ejemplo, fue el día en el que comprobamos que Xavi atravesaba su pico de forma más bajo desde 2008. El maestro de Terrassa pasó desapercibido en un escenario que otrora hubiera manejado a su antojo. También sacamos en claro que aquel Levante 2011-2012 era un equipazo, muy lejos de rachas puntuales y méritos de quita y pon. Por último, la conclusión más sencilla; que tener a Leo Messi es trampa. El argentino mandó al limbo la victoria técnica y táctica de los de JIM en una simple acción…
Uno de los principios del juego de posición dice que el objetivo final de la posesión es encontrar superioridades a espaldas de las líneas del rival. Pues bien, con el Levante, esto no existe. Salvo cuando la climatología se vuelve juguetona, los granotas repliegan mas abajo que ningún otro conjunto de La Liga. Entre la zaga y el centro del campo, resulta imposible recibir. Esto conduce al choque a dos batallas predefinidas de antemano: un duelo con mucha gente y poco espacio por dentro, y permanentes cara a cara en los carriles exteriores.
En el lateral derecho volveremos a ver a Dani Alves casi con toda probabilidad. Tras su gol en Rusia, Tito sabe que si hay algúnQue Dani Alves esté acertado, clave para el Barcelona momento para recuperarlo, es este. Además, sus condiciones se ajustan a las demandas del encuentro. Con Juanfran y Juanlu, la banda izquierda levantinista es un bastión competitivo. Los locales implicarán de nuevo a sus extremos en fase defensiva, y el Barça debe decidir cómo atacarlos. El movimiento que viene repitiendo Vilanova en exigencias similares (como Glasgow) es, una vez la jugada ya está activa, desplazar a Pedro ligeramente al centro para ofrecer a Alves toda la autopista. El Barça necesita girar al Levante, así que no parece muy adecuado que el canario abandone demasiado la raya. Las escasas ocasiones que el Barcelona pudo generar en el Ciutat de Valencia vinieron del acierto en las paredes por fuera. Eso aleja a Tello de la titularidad en este sector. El canterano es uno contra uno, y delante está el hombre que detuvo a Jesús Navas. Su entendimiento con Alves no es el mejor.
Dani Alves y, presumiblemente, Pedro tienen una tarde durísima
La izquierda es otro cantar. El fichaje de Jordi Alba ha matizado esa zona con respecto al año pasado. El internacional pasa al ataque con una energía incomparableLos hombres de JIM tratarán de negar espacio a las subidas de Jordi Alba y los culés exprimen hasta el límite esta virtud. Lo más complicado para el adversario en la defensa a Jordi es que las ayudas no pueden llegar, pues Alba enseguida dobla al extremo en vuelo cuando este la pilla (segundo 00:20 del vídeo). Eso es indefendible. Sin embargo, si hay un equipo al que esto le afecta menos es al Levante, que nunca va a ceder esos metros ni a presionar muy arriba. En parado, Jordi Alba es bueno, pero inferior a cuando corre. Ahí Tito tiene otra decisión que tomar. Villa es baja. El asturiano hubiera terminado fijando a los centrales a medida que Alba subiera y Messi bajara. Es un cambio de piezas que no te permite Tello. Con él, el Barcelona buscaría protegerse en transición, pues el papel de Jordi descendería en agresividad, como ya vimos ante el Mallorca. La opción alternativa sería Iniesta. Estaríamos entrando en un contexto de apuesta total por la calidad. Curiosamente, y siempre sobre el papel, la preferida del Levante.
Por más que lo intente, Iniesta no tiene cuerpo para repetir aquellos comportamientos de extremo de 2009. No como discurso. Andrés iniciaEl hombre de la banda zurda, la gran incógnita blaugrana abierto pero acaba dentro, junto al resto de la tropa. La ventaja, la evidente: El virtuosismo que reúnen y exhiben en una baldosa Xavi, Messi, el propio Iniesta y Cesc es único. Sería una pelea en igualdad numérica con el esqueleto del Levante (Ballesteros-Navarro-Diop-Iborra). Positivo. La cara negativa la presenciamos en Moscú. Este dibujo tiende a situar excesivos futbolistas por delante del poseedor de la pelota. El Barça directamente arriesga sin miramientos, forzando a Busquets a la perfección absoluta. Y la transición ofensiva del Levante no es cualquier cosa. Si en la derecha, Pedro te ofrece retorno contra el despegue de Juanlu, en la izquierda la cosa ya no está tan segura. Solo Tello regresa. Villa, que pondría voluntad, no está. Iniesta no puede, y su ubicación céntrica no le favorece de cara a tapar al carrilero que pretende la sorpresa. El Spartak proyectó a su lateral e hizo daño. JIM ha de ordenarlo, pese a la ausencia de Pedro López.
El Barça volverá a agarrarse a Busquets cuando pierda la bola
Para liderar el contragolpe del cuadro valenciano, estará Barkero. El mediapunta no es el mismo de la campaña anterior, pero tiene fútbol para hallar balones antes del achique de Busquets. El Barcelona le pide tanto a su “cinco” en esos instantes que cualquiera está consiguiendo salir. Desde ahí, lanzamiento al extremo que escape libre o a Martins. El nigeriano es rectilíneo, sin matices en su carrera, pero si tiene verde para esprintar, Piqué y Puyol no darán réplica. Mascherano probablemente sí, pero el Jefecito aún inspira desconfianza. La que siente el Barça en su visita de esta noche, una de las más duras del calendario. Quizás –solo quizás–, en La Liga española no haya un sistema que intimide más a los azulgranas.
Abel Rojas 25 noviembre, 2012
La verdad es que no coincido con David. Yo creo que para el Barça es mucho más jodidillo salir a Pamplona, Cornella, Balaídos, Sevilla -las dos veces- o Calderón por citar algunos ejemplos. Por un motivo muy simple: defienden más arriba.
El Levante regala a Xavi todo. Y el año pasado porque su nivel es que era… en fin, lo que era, pero este año que cuando le regalan cosas las aprovecha… el Ciutat me parece una de las salidas más propicias para el Barça. El Barça jugará justo a lo que quiere sin la necesidad de ganárselo.
Otra cosa es que, como pasó en Glasgow, la pelota no entre. Pero el Barça mereció ampliamente ganar aquel partido, como el 95% de los desarrollados bajo ese guión.