Mauro Silva fue malinterpretado | Ecos del Balón

Mauro Silva fue malinterpretado


El fútbol es un deporte de tanteadores bajos, razón por la cual sus desenlaces están sujetos a una cuota de azar superior a la del resto de disciplinas. Por eso sorprende tan a menudo. La derrota de Roger Federer ante el número 5 del mundo no empieza ni a contemplarse aun perdiendo por 6-0 el primer set. Un rival de LeBron James debe llegar al último cuarto con más de 10 puntos de ventaja para ser considerado favorito. Un mes antes de que dé comienzo una carrera de Fórmula 1 se sabe que el 80% de los pilotos no pueden ganarla. En fútbol, en cambio, un 2-0 se acepta como síntoma de superioridad holgada, algo muy difícil de conseguir, y si el 2-1 entra antes del 85, a la afición local deja de llegarle el aire. Es parte de su éxito, un tema ligado a la incertidumbre, y la intriga es rasgo clave del espectáculo, en cualquiera de sus vertientes. Sin embargo, y esto es crucial, la aleatoriedad del marcador cortoplacista no resta lógica al desarrollo de los futbolistas, de los equipos, de los proyectos, de las culturas tácticas. La casualidad explica el nacimiento de los hombres más grandes, y pocas cosas más. Di Stefano, Eusebio, Pelé, Garrincha, Best, Cruyff, Schuster, Maradona, Ronaldo o Messi aparecieron porque sí; pero todo lo continuado, todo lo extensible, sea bueno o sea malo, sucede por un motivo en esto del balompié. Uno de los ejemplos más interesantes que dan fe sobre ello es la crisis de centrocampistas padecida por el país del fútbol desde 1994. Desde que Romario y su selección, de marcado carácter defensivo, pusieran fin a 24 años sin levantar el trofeo que, según sienten los brasileños, les pertenece: la Copa del Mundo.

Brasil alcanzó el cénit entre el 58 y el 62, época en la que juntó a, en opinión de muchos, los dos futbolistas referenciales de su historia, Garrincha y Pelé. Con ambos sobre la cancha jamás perdió un solo partidoMaradona enseñó a la selección brasileña lo que era el miedo y conquistó dos mundiales. Fue la cuna del “jogo bonito”, el mayor mito que el fútbol ha conocido y conoce. Luego llegaría el oasis de “Los Cinco Dieces” en México 70, un torneo algo o bastante sobrevalorado por ser el primero retransmitido a todo color, pero que al fin y al cabo Brasil dominó y ganó engrandeciendo su leyenda. Estos tres precedentes condicionan, con fundamento, la consciencia colectiva del país: “No sólo somos los mejores, que por supuesto; sino que también somos la razón de este deporte”. Con este caldo de cultivo, con este peso y esta exigencia, se llega a la dirigencia de Telé Santana. Brasil sabía lo que se traía entre manos; era más que el mejor equipo del momento. Cerezo, Falcao, Sócrates, Eder y Zico; se sumaría Alemao, al poco tiempo. La mayor aglomeración de talento en la media que ha lucido la misma camiseta a la par hasta que coincidieron Alonso, Xavi, Iniesta, Silva y Cesc. Una generación sobrenatural, un conjunto de estrellas de huella profunda y perfectamente compatibles entre sí moría sin tocar el cielo. Se sumaban ya 16 años con la preciada Copa visitando nuevos lugares, el futuro pintaba peor que el presente y el oponente más clásico, Argentina, tenía a Diego Armando Maradona, con ganas de revancha tras el episodio del Mundial de España y convertido en D10S bajo el sol abrasador del Estadio Azteca.

El enfrentamiento en Italia 90 es la redención de Brasil ante Diego, la canción de la superpotencia bajo el influjo de un hombre que estaba por encima suya, que marcaba cada decisión y cada gesto en cada uno de susParreira priorizó en que su equipo nunca dudara, en que nunca se viese por detrás futbolistas. El encuentro transcurrió sobre la misma senda que el resto de aquel olvidable torneo, y Maradona lo definió en la única vez que logró mantenerse en pie ante las tarascadas derivadas de cada una de sus apariciones. 3 años después se disputó un amistoso previo a EEUU 94 entre ambas selecciones. El 10 lo jugaría, pero ya no era lo mismo. Recién volvía de su primera sanción por dopaje (15 meses sin jugar), su cuerpo se había transformado y, prácticamente, las piernas no le daban para dos carreras seguidas. Con todo, y pese al 1-1 final, Maradona dominó el encuentro a su antojo en lo que el fútbol interpretó como un aviso al Mundial del verano siguiente. Así llegaba la Brasil de Parreira a la anglosajona Copa del Mundo, 24 años después del último triunfo de Pelé. Aunque fuera levemente, Brasil había empezado a dudar sobre si su leyenda era cierta. Como prevención ante el miedo a Maradona, al trauma de los centrocampistas del 82 y al fracaso del olvido, el técnico carioca preparó un equipo consistente, de carácter defensivo y, sobre todo, reactivo. Un sistema que minimizase riesgos para huir de esos fallos individuales o colectivos que matan a Brasil sin capacidad de reposición en esos momentos tan sensibles. Gracias a Julio César, triste portero verdeamarelo en la reciente Copa del Mundo celebrada en Sudáfrica, es algo que los contemporáneos tenemos fresquito. Soportan demasiado.

La Copa del Mundo del 94 sentenció al centrocampista brasileño equilibrado, pese a que aquella selección tenía a tres de ellos.

Brasil comenzó el torneo sobre un 4-4-2, con doble pivote (Mauro Silva y Dunga), doble mediapunta (Zinho y Raí) y doble nueve (Romario y Bebeto); pero llegado el momento de la verdad sacrificó al artístico hermano de Sócrates, conocidísimo en España por arrebatarle al Dream Team la Copa Intercontinental del 92, para dar entrada a Mazinho. Quien pasase por las filas de Valencia CF y deleitase a Balaídos en calidad de mediocentro jugó el torneo como interior derecho, si bien su fútbol era el que era, y ayudó a Mauro Silva y Dunga a formar un trivote que sin ser nominal, tenía un efecto parecido. Brasil gana la Copa del Mundo en base a dos conceptos: la tremenda consistencia de su poblado sistema defensivo y el talento de Bebeto y un Romario inspiradísimo, indefendible. Es decir, «por lo de detrás» y «por lo de delante». Paradójicamente, el triunfo de la última Brasil que juntó a tres centrocampistas de élite partió al fútbol brasileño; lo subdividió en dos conceptos enfrentados que el fútbol necesita en alianza. Desde aquéllo han pasado 18 Nocheviejas y no es que no haya habido un heredero de Mauro -considerado el mejor en su puesto en tiempos de Redondo y Guardiola-, es que Brasil no ha producido un solo centrocampista puro de verdadero nivel, exceptuando a Emerson y, quizás, Gilberto Silva. Muy poco para tanto tiempo. Por el camino se ganó el Mundial de 2002 en Corea & Japón, pero con un 5-2-3 que relegaba en Roberto Carlos y Cafú las labores de gestación. Incluso la celebrada Copa América de 2007 se basa en el axioma de conservar al máximo atrás y definir arriba por puro talento individual, en este caso con un Robinho desatado. Carlos Mineiro, un jugador bastante malillo que luego ficharía por el Chelsea FC de Scolari (?), fue titularísimo en aquel combinado opaco.

Rafael Carioca, Fernandinho y Paulo Henrique Ganso han sido los últimos centrocampistas brasileños de verdadera proyección.

Menezes sabe que tiene un problema muy gordo con su centro del campo. Quedan aún dos años para la gran cita y maldice cada día consumido, porque siente que no le da tiempo. Realmente, lo de Ganso le ha destrozado. Paulo Henrique era la respuesta azarosa a la pasiva plegaria; un centrocampista presencial, especializado en la iniciación y, sobre todo, la gestión de juego. Mano se entregó a él en la última Copa América, incluso sabiendo que no estaba físicamente apto, pero las recaídas en sus lesiones y la evidente pérdida de confianza del jugador en sí mismo han acabado por sentenciar al mejor proyecto de general que ha producido Brasil en el Siglo XXI. Quizás el segundo haya sido Fernandinho, que, pese a partir desde la banda más de una vez, creció en el Shakhtar Donetsk jugando de maravilla al lado de un mediocentro, muy a lo Luka Modric, por establecer un paralelismo. Relacionado con los primeros pases y con sensibilidad para percibir el ritmo y la dirección adecuada, Menezes no dudó en convocarlo en cuanto pudo, pero tal y como Ganso, las lesiones le están matando. En su caso, una fractura de tibia en el mejor momento de su carrera. ¿Será una maldición? También por el Este de Europa anda Rafael Carioca, a las órdenes de Unai Emery en el Spartak de Moscú. Más mediocentro que los otros dos, sorprende que Menezes no tenga ojos para él, aunque su convocatoria sería más interesante que resolutiva. Es decir, responde a un perfil que no está cubierto y que vendría muy bien, sobre todo una vez impuesto Óscar sobre Ganso en la mediapunta, pero tampoco estamos hablando del sucesor de Cerezo. Es que no existe el sucesor de Cerezo. Ni de Falcao, ni de Sócrates, ni de Alemao. Y ya no sólo por una cuestión de nivel, sino porque Brasil dejó de producir centrocampistas de verdad tras la Copa del Mundo de 1994. Mauro Silva fue malinterpretado.

AMPLIACIÓN. Los que nacieron, se fueron.

Sí hubo dos centrocampistas de auténtico nivel oriundos de Brasil en este periodo: Marcos Senna y Anderson de Souza Deco, que son normalmente asociados a otros países, pues defendieron la camiseta de otras potencias. A su vez, y aquí llega lo interesantísimo, constituyen la prueba más fidedigna de que Brasil dejó de trabajar la producción de este tipo de jugador. Resulta evidente que ambos tenían el talento de manera innata, porque lo terminaron mostrando a lo largo de su carrera, pero coincide que en los dos casos hablamos de explosiones tardías para lo que se estila: la primera temporada extraordinaria de Senna es la 2004/05, con 29 años de edad y ninguna internacionalidad en su currículo; la de Deco, la 2003/04, con 27, y sin haber entrado tampoco nunca en los planes del seleccionador brasileño de turno. Europa, y no Brasil, distinguió y formó a estos futbolistas, sin hacerles renunciar a su samba, afortunadamente.

Un caso muy distinto pero también destacable es el de Thiago Alcántara. Un jugador que apunta a la cota más alta que se nos pueda ocurrir, que pudo vestir la camiseta verdeamarela y que defenderá la de la Selección Española en la próxima década.


Referencia
Alberto Pascual


Comentarios (60)

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Julio César, David Luiz, Thiago, Lucio, Dani Alves, Marcelo, Kaká, Robinho, Douglas Costa, Óscar, Lucas, Neymar. Así a bote pronto creo que estos son los brasileños modernos que, en un momento u otro, parecieron aspirar a ser verdaderas leyendas del fútbol. Algunos lo consiguieron, otros se quedaron por el camino, otros se perdieron completamente y hay unos cuantos que acaban de nacer y hay que esperarles. Pero entre ellos no se cuenta a un solo centrocampista. Evidentemente, no puse a Ganso a posta. Ha sido el único.

SI nos vamos a la generación anterior nos pasaría exactamente lo mismo. Emerson fue buenísimo, pero nunca apuntó a leyenda como los del 82, Alemao o Mauro Silva.

Es que no es que salgan mal. Es que no salen.

Seamos serios, el mejor centrocampista brasileño del momento es Ramires. Es lo que hay.
Tras la derrota con México en las olimpiadas mucho me decían que no era para tanto, que se trataba de la sub-23 y yo respondía que Brasil tampoco es que tuviera mucho más para ofrecer.
El problema en el mediocentro es crónico. ¿Sandro? ¿Lucas Leiva? El equipo les queda enorme. Más adelante Óscar me parece la única luz de esperanza, porque Ganso no da muchas esperanzas de recuperación y Moura nunca me ha maravillado.
Al parecer Brasil va a tener que entregarse a Marcelo en la gestación como el primer Madrid de Mou. Salir por los laterales y explotar el talento adelante.
@ Wikipeix

El caso es que Menezes da peso relativo en salida a Marcelo y Alves. Podrían ser una solución, sobre el papel lo son, pero en la práctica no se les da ese uso...

Te diría que a mí el centrocampista que más me ha gustado en los últimos años del brasileirao es el infravaloradísimo Cholo Guiñazú. Vaya servicio haría este hombre, de estar en forma, en casi todos los equipos de España. Al lado de Gago, Mario Suárez, Toulalan o Medel mejora lo existente.

@ Iarchondo

"Al parecer Brasil va a tener que entregarse a Marcelo en la gestación"

Pero Menezes no opina igual ^^ Para Menezes los jugadores más importantes en la gestación con los centrales, Neymar y... Damiao...

@ Marcel

Me comentaban ayer por Tuiter que el tema de los centrampistas de gestación y gestión era un problema mundial. Yo intenté hacer una lista de jugadores de este perfil con peso en equipos y me salieron Moutinho, Xavi, Thiago, Alonso, Modric, Beñat, Márquez, Rico, los tres de los recién ascendidos, Arteta, Wilshere, Cazorla, Allen, Sahin, Parker, Ki, Granero, Verrati, Pirlo, Valero, Schweinsteiger, Gündogan, Zyrianov, Fernandinho, Carioca.... Y tienes razón. Es que no hay sudamericanos. Aparte de esos dos últimos tan solo se me ocurriría David Pizarrro, de Chile.
Démosle algo de tiempo a Paulinho (Corinthians) y Bernard (At.Mineiro). El primero, más centrocampista propiamente dicho. El segundo un volante ofensivo que con libertad en línea de tres cuartos ha dado partidos magníficos esta campaña, siendo uno de los responsables máximos de que el Galo esté peleando por un título 40 años después. Anoche por cierto anotó dos goles, uno a la contra definiendo perfectamente y el otro en una acción de picardía en la que deja retratados a la defensa y el portero de Palmeiras (ay Felipao...)

Por cierto, muy acertado el comentario de Marcel.

Saludos
@ Garrincha

Paulinho es de lo más potable, sí, pero no sé yo si llega al nivel por ejemplo de un Deco, por decir algo. Al otro no lo tengo calado. Me lo apunto y, si me gusta, me lo habrás descubierto tú ^^

@ Derkin

Pues no sé yo si estoy de acuerdo contigo. Muchísima, pero muchísima de la gente que conozco piensa que Mauro Silva ha sido uno de los mejores mediocentros de la historia. Mismamente en Tuiter muchas veces se ha sacado el tema de los mediocentros y no son ni uno ni dos los que sitúan al brasileño por encima de los mitológicos Redondo y Guardiola, algo que ni mucho menos es una locura.

Yo diría que contando el punto más alto de esos jugadores el mejor fue el argentino. 97, 98, 99 y 2000 de Redondo son salvajadas. Pero Mauro Silva la liaba en el 94 y en el 2003...

Los duelos entre Mauro Silva y Zidane son de lo mejor que se ha visto en la Liga Española últimamente.
La cosa con Mauro Silva es que era el mejor mediocentro de todos, aunque quizas no el mejor jugador. Regular se le queda corto, porque su aportación era constante durante los 90 minutos y constante durante una década, sencillez, personalidad, y sobretodo, conocimiento del juego maximo... Pero de todos los grandes mediocentros de los ultimos años era quizá el menos autosuficiente. El menos dotado en lo fisicotécnico, el menos capaz de desequilibrar por si mismo. Entonces la cosa es, quién es mejor, Junior o Cafú? Roberto Carlos o Maldini? Di Maria o el mejor Robben? Es complicado.

Pirlo sin duda concedía más que el brasileño. Guardiola también. Pero en un momento dado Pirlo te hace lo que te hizo esta Eurocopa, o Guardiola te la coge en su area y te la pone al pie en el pico del área contraria...y luego estaba Redondo, que era la personalidad máxima. La palabra hacerse con el encuentro...futbolista de grandes momentos. Quizá puedo estar de acuerdo con Abel en que en un momento dado, era el que más nivel dio...pero matizandolo a un partido. Era un futbolista Champions, pero menos regular que el Brasileño, que siempre jugaba igual: perfecto. Pero esa capacidad de hacerse con un partido no la tenía, seguramente. Aunque me acuerdo ahora de un partido del 94 contra holanda, y el centenariazo contra el Madrid...la consabida frase de ¿Adivinan quien la robo? Pues si, el de siempre.
Me acabo de acordar de Diego. Diego sí era un centrocampista -aunque fuese mediapunta- que en su día apuntó a Leyenda y que hubiera solucionado muchos de estos problemas.

@ Cerdido

"Por cierto, un gran olvidado en artículo y comentarios es Edmilson. Cierto que no es TOP TOP, y que en Brasil muchas veces (que no siempre) jugaba de 5º central. Pero para mi gusto es mínimo el 3º (yo creo que 2º) mejor mediocentro brasileño seleccionable para Brasil de la primera dédaca del 2000"

Uf... no fue olvido ^^ Es que no creo que sea así. Edmilson tuvo sus momentos, pero para mí no fue élite, élite. No lo considero al nivel de Gilberto Silva y, desde luego, menos todavía al del Emerson de la Roma o la Juventus.

El Emerson que coleccionaba Ligas italianas era una cosa muy, muy, muy seria.

@ Dani de la Cuesta

Te cuesta soltarte con Mauro, según veo. Yo creo que Mauro Silva técnicamente era extremadamente completo. Quizás la faltaba rango de pase, pero poquito más. En lo referente a lo defensivo, el mejor. Eso me parece claro. Rapidísimo, gran tackling, monumental uso de su propio cuerpo, timing perfecto... Y con balón tenía incluso detallitos de oh. No era extraño el taconazo de turno, protegía muy bien el balón, si le pillaba en vuelo podía eliminar a un rival... No estamos hablando, por ejemplo, de la versión brasileña del Mascherano del Liverpool. Mauro Silva técnicamente es mucho más amplio. E intelectualmente, son balón, ni entremos. Sobre todo en cuanto a agilidad tomando decisiones.

Por cierto, cuando digo lo de los tres centrocampistas de élite me refiero a Mauro, Mazinho y Raí. No a Dunga. Dunga mucho carisma, mucho liderazgo y tal, que sin duda es importante, pero era un caballo grande ande o no ande de manual. El peor con diferencia. Jugador tipo Costinha.
Articulazo, Abel. Además de por el texto en sí, por la capacidad de generar una vez más un debate precioso.

La mentalidad brasileña al analizar y planificar sobre fútbol es muy particular. Coincido en que, para entender algunas cosas, es clave volver la vista atrás a esos 24 años sin ganar un Mundial, coincidentes además con el auge del gran rival argentino con su propio mito antagonista del mito Pelé. Brasil pareció convencerse de que, para resultar fiables en un gran torneo, debían dotarse de rasgos "europeos" para no caer de pura belleza retórica. Que en Europa (que allí suena a pragmatismo, capitalismo, físico e industrialización) se había desvirtuado el espíritu original del fútbol como juego espectacular y valiente para someter el éxito a la minimización del riesgo y la optimización del detalle. Y ambas cosas requieren de un nivel físico superior para ser competitivo.

Por otro lado, los derroteros del propio fútbol brasileño han desvirtuado la figura del centrocampista puro como base para la creación de juego y la generación de ventajas sobre el campo. Y a eso hay que añadir la carencia generalizada de medios diferenciales en base de la jugada, en casi todos los países del mundo. Total, que sí, resulta que los dos últimos grandes centrocampistas brasileños son de la misma generación: Mauro Silva y Raí (porque no consideramos centrocampista a Rivaldo, no? Aunque su juego fuera otro). Aunque con lo de Ramires me has "matado", Abel. Aunque fuera verdad ^^, me has "matado".
@ Piterino

En primer lugar, muchas gracias ;-)

En segundo lugar, dime un centrocampista brasileño actual más importante que Ramires ^^

Yo no soy fan de él como David León, que más de una vez ha dicho medio en broma medio en serio que se sienta a ver partidos del Benfica antes o el Chelsea ahora para disfrutar de Ramires; pero... hay lo que hay, tío.

@ Dani de la Cuesta

Yo ya te digo, hay mucha, mucha, mucha, muchísima gente que pone a Mauro Silva como el mejor mediocentro de la Liga Española.

Hoy me he enterado de que su figura es el logo de Diarios de Fútbol, la gran referencia bloguera.
Hace unas semanas David León se encontró en el canal este de reposición de fútbol antiguo la final del Centenariazo y se quedó a verla. Me llamó totalmente fuera de sí para hablarme de Mauro Silva. Yo creía que se estaba muriendo o algo así. Su tono era como de ahogarse o qué se yo. Bastante histérico.

@ Derkin

"¿sabéis que con el Tenerife consiguió expulsar en el mismo partido a Bebeto y a Mauro?"

Extiéndete, extiéndete. Es una anécdota bonita.
Ahora entiendo porque Abel dijo que lo de Messi y el Madrid ya se había vivido con Maradona y Brasil y tiene sentido. Por suerte desde que Maradona entró en la cuesta abajo Brasil ha ganado dos Mundiales y Argentina ninguno y eso que para mi gusto Argentina ha tenido mejores selecciones que los brasileños desde entonces. Hasta en el 94 Argentina sin Maradona era mejor que Brasil pero el golpe de la enfermera fue muy duro.
El centenariazo está colgado en youtube,y es una burrada. Pero una burrada total de partido, en todos los sentidos. Con Mauro Silva como el crack, Valerón el que marco la diferencia, tristán de Dandy total..un ritmo, una intensidad, un todo...y eso que el Madrid no jugo mal. Perdio contra un equipazo que jugo mejor, pero el Madrid lo intentó y lo dio todo alli. Raulito estaba tan fuera de si que hasta tuvo un encontronazo con Mauro Silva, raro de ver.
Domingo, Paulinho me parece jugador de club, que si no estuviera en Corinthians su nivel bajaría considerablemente, pero casos así ocurren en todas las selecciones , gente que se ve beneficiada por donde juega y el sistema utilizado, Bernard y Nem son dos opciones que deben entrar ya, porque serán importantes en 2014.

Discrepo en algunas cosas, Rafael Carioca sinceramente no me parece una buena opción y pese a que es verdad que este jugador cerebral en Brasil ya no existe y por tanto la aparición de Ganso fue una autentica bendición , prototipos de Lucas Moura hay muchos pero de Ganso pocos, me sorprende este debate en el tema pivotes , el tema del primer y segundo volante es visto como una obligación y casi una "raza" aparte en lo futbolístico, Ralf - Paulinho es el claro ejemplo de lo que se pretende buscar con esto, los dos son defensivos , pero el primero está más centrado en robar balones , contener , marcajes , repliegues, mientras que a el segundo volante se le exige un mayor orden táctico, además de una capacidad de llegada descomunal y saber sacar el balón , vamos el 4-2-3-1 que tanto se lleva a nivel mundial....

Pero en Brasil esta posición se está convirtiendo en un producto muy suyo , solo hace falta ver la cantidad de jugadores que exportan siendo 1º o 2º volante.

No se si me he explicado bien , pero tal como se ve todo ahora allí , no me parece justo intentar colocar algo que no es posible, ese "doble pivote" a la brasileña es casi inamovible , lo cual puede dar algo de lastima en ocasiones por que en algunos casos se busca más la especialidad en la posición y una parcela del campo que poder aportar algo a todo el equipo en general.
@Abel

Sé que me vas a decir que no, pero de este burro no me puedo bajar: Luiz Gustavo. Hala, ya lo he dicho ^^.

Por cierto, ¿Hernanes no ha sido otra pequeña decepción? Yo aún mantengo una mínima mínima esperanza con él, pero debería haber salido de la Lazio y de Italia.
Muy de acuerdo en el absoluto déficit de centrocampistas en el Brasil actual y lo peor de todo, en los síntomas de poca proyección que brotan en el actual proyecto de cara al 2014. Pero eso mismo también me deja un poso de que quizás, en esta selección, sí se deba -tampoco queda otra- apostar en el talento individual de los de delante. Recordemos que quien deba representar a la verdeamarelha sea uno de esos elegidos: Neymar. Y ya vimos en su anterior Libertadores como el jugador debe ir girando su cuerpo a entrar en mayor relación con el cuero.

Por cierto, se desprestigia en demasía a Lucas Leiva. Ya no digo Ramires.
Si fuera un prometedor centrocampista brasileño, mas que ilusionado, estaría acojonado : (
Pues a mi Sandro me mola bastante.
Mauro era mucho Mauro, pieza clave a partir de la cual formar un equipo, el medio centro que cualquier entrenador querría tener en su equipo. Como dices Brasil adolece de eso, y sin esa pieza puedes tener grandes jugadores y ganar muchos partidos, pero sera muy difícil tener un gran equipo y ganar campeonatos.

Luiz Gustavo al nivel actual y en una selección con semejante falta de presencia en el centro del campo debería ser titularisimo. Otro que siempre me gusto bastante en estos últimos años es Arouca de Santos. Menos posicional pero gran despliegue y con nociones ofensivas aceptables en el aspecto técnico.

Por cierto, llevo un tiempo leyendoos pero este es mi primer mensaje por aqui, aunque a algunos ya os conozco de otros sitios como a Wjcmha.

Un saludo
Bueno, un comentario típico de la prensa deportiva brasileira al respecto:

"Todo el mundo sabe que en un equipo hay que haber al menos un volantão (mediocentro defensivo) para que luzcan los mas talentosos que saben crear"

Esto lo leí en un períodico provincial donde había el perfil de un chaval que debutaba en el equipo local (de tercera división) .. así es la realidad brasileña, el ambiente en que se forman a los jugadores.

Es una ideología que aborda el futbol en términos simplorios, repleto de compensaciones y que etiqueta a los jugadores como si de carnet laboral se tratase ('volante' por si tiene que ser defensivo; 'meia' tiene que ser mago).
@ Quintana

Pues en el São Paulo, Hernanes (eso si, en el contexto de un 5-3-2) ejercía de iniciador - ahora como interior, ahora de acompañante al mediocentro - igual, él siempre era la primera pase.

Lo que pasa es que fueron los técnicos quienes nunca se confiaron en él como un activo viable en zonas tan retrasadas: ni Menezes (ni el 90 por ciento de los técnicos del país), ni por lo visto Reja en el Lazio. Y de vueltas al tema de la bifurcación del mediocampo ... de ese dogma nace la idea de que Hernanes, por su técnica y su ascético, no puede sino actuar más al frente, casi de espaldas. Lo veo más víctima que otra cosa: Brasil produce este jugador, posible solución, y no lo saben aprovechar.
Este articulo es un pasote, como lo va desarrollando todo para llegar a la conclusion que hace de titulo. Y ya el remate final con los ejemplos de los emigrados Senna y Deco..Pero tiene un grave defecto, Abel se olvida de Rockemback^^

"Hace unas semanas David León se encontró en el canal este de reposición de fútbol antiguo la final del Centenariazo y se quedó a verla. Me llamó totalmente fuera de sí para hablarme de Mauro Silva. Yo creía que se estaba muriendo o algo así. Su tono era como de ahogarse o qué se yo. Bastante histérico. "
Habria que plantearse hacer un zapping ecosiano porque macho a veces me haceis morir de la risa!
Discusión Luiz Gustavo-Ramires

A veces tenemos que ser prácticos. Chicos, Ramires fue absolutamente decisivo en los tres partidos más importantes que disputó el año pasado. Hablamos de un jugador que ante el mismísimo Barcelona tuvo un gran impacto. Está claro que sus conceptos son mínimos, pero en un determinado rol, cuanto más abierto mejor aunque no sea jugador de banda, es un jugador importante. Ya en el propio Benfica jugó muy bien, y recordemos que Jorge Jesús jugaba en 4-4-2 con Javi García de 5, Di María izquierda, Ramires derecha, Aimar de 10 y Saviola y Cardozo arriba. Aunque otras veces sacrificaba a Saviola y entraba Martins, si no recuerdo mal. Pero vamos, que él, derecha.

Luiz Gustavo a mí me decepcionó y mucho. Había oído cosas fantásticas del futbolista y las veces que me había cruzado con él me había entusiasmado; encima su presentación en Champions, quiero recordar que contra el Inter de Milan en 2011, fue tremendo. Desde entonces para mí ha ido hacia abajo un poquito, la verdad. Sobre todo porque me parece extremadamente lento de ejecución. No obstante, sí que estoy con vosotros es que debería ser fijo y casi que titular en Brasil.

@ Iarchondo

Con Marcelo pasa una cosa bastante extraña. El año pasado suyo fue objetivamente inferior al anterior, al 2010/11, por bastantes motivos. Una cuestión táctica -tenía menos espacio por dentro que en el primer año de Mourinho- y también porque él se dejó llevar. El recuerdo no es ni siquiera mediocre, sino malo. Año perdido del futbolista, que incluso ante muchos le quitó la consideración de mejor lateral izquierdo que en 2011 pocos discutían. El tema es que ahora te paras a ver cualquier partido de Marcelo del año pasado y, en fría, te parece igualmente una flipada que el resto no puede alcanzar.

Yo creo que es la posición más desequilibrada en cuanto a talento y determinación que hay actualmente en el fútbol sin contar a Messi. Es que no hay nadie que se le acerque.

De hecho, Marcelo es una de las incógnitas que definirán si el mejor equipo de este año en Europa va a ser el Madrid o el Barça. Así de bueno es.

@ Piterino

Para mí a Hernanes le mata lo mismo que ha transformado a Cesc: su cuota de gol. Ganó demasiados metros y pasó a jugar demasiado arriba. Compensa? Pues probablemente sí a la Lazio, sobre todo en su primer año, pero el jugador vio limitadísimo y su techo. Y ya no va a volver a la base. Ya ha cambiado y no se sentiría seguro ahí atrás...
@ Gons

"se desprestigia en demasía a Lucas Leiva"

Joé, tío... que De Grado y tú nos lo queréis meter ahí a presión y... es que no...

@ Stinson

A mí Sandro me molaba más en el Inter que en el Tottenham. Adoré a aquel Inter campeón de América:

--------------Sandro--Guiñazú
Taison------------Tinga----------D´Alessandro
--------------Walter/Alecsandro/Sobis

Con Giuliano entrando en segundas partes y haciendo cosas preciosas.

@ JJE

Pues bienvenido!! Cuanto más te animes, mejor ;-)

Por cierto, a mí Arouca... jugador casi idolatrado por los seguidores del fútbol brasileño y que a mí... pff... no me entra mucho... Reconozco su valor, pero... no. No soy muy de él.

@ Roberticus-Albertigues

Si es que yo coincido con ambos. Sobre todo Albertigues lo ha interpretado como ataque cuando yo voy más por el tema descriptivo: el fútbol brasileño está partido. Yo lo veo así, al menos, e identifico el principio de la ruptura en el 94.

En ningún momento digo que Brasil no saque nuevos Falcaos porque no pueda. Hablamos del país con más genios por década de casi todos los periodos de tiempo que queramos escoger. El problema en este caso es formativo: no se quiere producir al nuevo Falcao. No se trabaja para ello. Y como se subdivide tanto en trabajo y talento, al final acabas quedándote también sin Mauros Silvas.

@ Kevin

Infravalorado en su día, sobre todo en la Juventus, pero se demostró que no era grande, grande. Y al Olimpo no apuntó nunca, aunque a ser un jugador muy importante en la Champions, sí, que no es poco.

De hecho, yo he visto a Felipe Melo jugando a un nivel que, por ejemplo, no he visto en Luiz Gustavo o Lucas Leiva.
Si no lo tomo como ataque, tranquilo , y tienes razón en muchas cosas, el deficit en la base es enorme , mucho más de lo que pensais y aún así salen joyas cada dos por tres, pero se trabajan muy mal ciertas cosas , sobre todo en la CBF la cual mejoró un poco en los últimos años en este aspecto , desde bien pequeño les imponen unas ideas y una manera de trabajar que hace totalmente normal lo que está ocurriendo, aunque ya digo que pese a esto talento siempre sale y posibilidad de tener jugadores así siempre hay, es más tengo mentalizados a posibles proyectos de esto, gente como Alex cabeção (el crack del Fenerbahce) u otros son raras excepciones pero que surgen.
Sin duda, Albertigues. Por algo es el país del fútbol. La producción de talento nunca se detendrá. Si eso está clarísimo. Entre los que llegan y los que no, te producen al orden de 4-5 "proyectos de Balón de Oro" por década.
Estoy con Kundera: Giuliano Víctor de Paula.
Grande la mención de LeBron James.
@ Fill Nunes

Puedes estar seguro de que hemos entendido todo lo que has dicho ;-) Son idiomas similares los nuestros.

Te parece Souto superior a extranjeros como Bolatti o Guiñazú?
Como bien dice Gons, se desprestigia demasiado a Lucas Leiva, y ojo, me apunto el primero en esa lista. Tengo que decir que poco a poco va cambiando mi opinión sobre él, pero estamos frente al mismo problema que con P. H. Ganso: las lesiones. Si no tuvo suficiente la temporada pasada, donde se había convertido en el líder del centro del campo de los reds, con aquella lesión que le privó de media temporada; llega el inicio de temporada y te vuelves a lesionar, si bien es cierto que descnozco el alcance de ésta última lesión.

Señores, una vez más me quito el sombrero con este artículo. Hasta que ustedes quieran.
Ricky_Corleone

Pues Luquitas Leiva tiene para 2 o 3 meses con ese desgarro muscular, pero el bueno de Brendan le ha dado tarea, y es ni mas ni menos que como parte del scouting del Pool para analizar partidos y rivales, principalmente debido segun palabras del propio Brendan a que tácticamente es muy bueno y quiere mantener su espíritu positivo estos meses.

La informacion procede de Alvaro De Grado, supongo que por muchos conocidos por aqui y proviene de Sportyou. Saludosssssss
En 2004 Deco no tenía 27 años ni de coña. Ah, y como te cuesta meter a Busquets cuando tiene 100 veces más talento que Alonso. En fin, el tiempo te dejará en el lugar dónde mereces.
@Abel

Igual es que no he podido leer todos los comentarios, o si se ha comentado no lo he visto. Lo poco que pude ver de Libertadores y algo del tramo final de Brasileirão, hay un jugador que no es ni mucho menos "fino", ni elegante en la marca o recuperación como Mauro. No obstante, si que lo considero solvente en ese aspecto que demandas en el artículo. Hablo de Ralf, jugador de Corinthians. No sé que tal te parecerá a tí, pero a mi si que me sorprende que (quizás junto a Luiz Gustavo) no esté en la selección, pese a tener sus 28 años. También me sorprende mucho la utilización de Ramires como figura "descolgante" en el centro, cuando yo creo que Arouca gana más metros en ataque y lo veo un box to box solvente.

Puede que me equivoque, pero futbolistas en Brasil y lejos de Brasil hay. Lo que creo es que, como tu le comentaste a alguien, hay una división entre talento y trabajo; cuando en realidad, el talento es algo que hay que trabajar todos los días para llegar a lo más alto.

PD: os dejo una joya que alguno habrá visto: Dunga y Mazinho en la Copa América de 1989. La delantera era Bebeto y Romario frente a la Argentina de Diego. Fue la fase final de grupos (antes eran dos grupos de 5 y los dos primeros de cada grupo, jugaban una liguilla final): http://www.youtube.com/watch?v=PXE6qPamjg4&fe...
Nostalgia de Mauro Silva es la que siente Riazor desde que nos dejó...

Mauro era, para que os lo imaginéis los más jóvenes, un futbolista con una influencia y un despliegue similal de Pepe ahora mismo, pero 20 metros más arriba,

La mejor definición la dió un seleccionador brasileño cuando dijo que prefería jugar 90 minutos con 10 jugadores (Mauro entre ellos) que con 11 sin Mauro.

No es que dominara los partidos desde el gesto técnico pero casi siempre durante toda su carrera él fué el dueño del partido.

Raro verle protesar, siempre entrando limpio, siempre ejemplar, poco takling hacía, Abel, lo suyo era más bien meter culo y pura anticipación y lectura. No perdía un balón, arriesgaba poco el pase, no era su cometido, pero sus duelos contra los mejores casi siempre eran para él, mucha culpa tuvo de las dos décadas de síndrome madridista en Riazor.

Y sólo marcó un gol en 12 temporadas, era más que nulo tirando apuerta, pero siempre estaba donde hacía falta, de hecho si recordáis aquella final de USA'94 ante la Italia de Baggio, cerocerismo puro a 120 minutos, quien estuvo más cerca del gol fué Brasil, con un disparo lejano del 5 que no pudo atrapar Pagliuca y se fué llorando hasta pegar en el palo, ...qué poético hubiera sido que entrara!

@Derkin

Eras muy joven, aunque lo recuerdas bastante bien, te cuento , aquel partido de Tenerife fué en la 6ª jornada del Superdepor año I (92-93), llegaba líder el Depor tras remontar al Madrid 3-2, con dos goles y medio de Bebeto y al Dream Team 1-0 con gol de Jose Roberto Gama de Oliveira, y jeje, en Tenerife Redondo y Valdano no les dieron tiempo de imponerse, en el túnel de vestuarios ya estaba Redondo con insultos racistas hacia Mauro y amenazas de muerte, jeje, lo contó el propio Mauro que dijo que nunca le había pasado nada igual, pero Mauro aguantó todo el partido (3-1 para el Tenerife), quien no agantó fué Bebeto, que fué expulsado en el minuto 13 en una jugada en la que perseguía a Redondo que llevaba el balón, éste le soltó dos o tres veces el codo o la mano a la cara, una costumbre que tenía el chaval, en 10 metros de carrera, a lo que Bebeto respondió con la misma patadita tonta que visteis al Pipita en Sevilla este sábado, por lo que se fué a la ducha. Así compitió el Depor con los grandes una década.

En fin , siempre he pensado que el que gana haciendo trampas es porque cree que si no las hace no ganaría tantas veces, y a lo mejor es verdad, por eso cuando hay duda sobre quién fué mejor, si tal jugador o tal otro, o tal equipo o tal otro, siempre me decanto bajo el mismo criterio : el más tramposo no, el otro.
En el minuto 48'40" del video que enlaza Shark, Bebeto enseña cómo no hay que dormirse dentro del área, pa qué controlar el balón?

Hay un partido que se puede recomendar también con Mauro y Bebeto en gran nivel y con el mejor Romario que yo haya visto. Se jugaban la c lsificación para el Mundial USA'94 en Maracaná ante la Uruguay de Francescoli, el que perdiera se quedaba fuera, se recató a Romario tras unos partidos apartado por ser como era, en dertimento de Muller...si no recuerdo mal Taffarell // Jorginho-Aldair-Marcio Santos-Branco // MAURO SILVA-Dunga-Zinho-Raí // BEBETO y ROMARIO. La TVGalicia lo dió en vivo porque de aquella en España sólo el Deportivo tenía brasileños internacionales, con comentarios de Donato, que estaba hecho un flan el hombre, por si Brasil no se clasificaba.
buenas tardes, desde colombia, mucho gusto es mi primera intervencion, hace unos pocos dias hablaba con un amigo de exactamente el mismo problema, en brasil desaparecio, el mediocentro, jugador que marque la pauta, en brasil el mejor medio ahora es ramires, pero los partidos de brasil han demostrado la ausencia de un jugador que lo acompañe con categoría hace poco vi un jugador en corinthians en la mitad contra los dorados en copa libertadores y me sorprendio su solvencia, esperemos ese problema este resuelto para la copa del mundo o brasil no pasara cuartos de final, a los mejores de la historia agregaría a didi ese si era un volante de categoria vi varios de sus partidos en video obviamente y ahora el que mas se le acerca es xavi o alonso pero ese tipo la metia en el angulo en tiro libre y pateaba de media distancia ademas de categoría para jugar con el balon. gracias

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