Era la hora más los tres minutos que había dispuesto el señor colegiado. La pelota parecía esperar una patada fuerte y certera que irremisiblemente hiciera sonar el silbato y parara el reloj (y los llevara a las duchas y luego a casa que ya es lunes y son las tantas y mañana seguramente estemos a martes). Todos estaban esperando ese momento, rendidos y acomodados a un 0-0 que para empezar la liga tampoco era un suspenso, ni un delito, ni el partido que nos llevará a segunda. Todos menos Lass Bangoura, que no paraba y que seguía persiguiendo cada proyecto de jugada, cada sonido y cada imagen que le pareciera cercana. En esos instantes, volvía a acosar al balón y a su dueño momentáneo. Metió el pie y robó la pelota. El despistado delantero rumano Torje, metió la pata e hizo falta cuando menos la hacía. Un segundo para el 93. Un segundo que duraría un minuto. Un minuto que tardaría en pasar una eternidad. Por eso lo vamos a contar en presente. Trashorras coloca el balón. Lass le mira desafiante. Trashorras parece decirle, “venga primo, no jodas”. Lass le mira a él y al balón. El gallego, que ya era veterano con 19 años, sabe que por sus pies pasa cambiar el final del cuento y no le va a dar ninguna opción del guineano. Éste se agacha y toca la pelota y da unos pasos hacia atrás como un árbitro que coloca la barrera en un universo paralelo. Roberto no se lo piensa y golpea. Toño se lamenta. Vallecas estalla.
La historia termina bien. El príncipe, la rana o el héroe que salva al mundo (en este caso, un barrio donde cabe un mundo) en el último suspiro. Vuelo rasante de perdices con una franja roja en el corazón. ¿Pero dónde está Lass? Estaba reunido con su peor enemigo. Como pueden ya imaginar a esta alturas del cuento, el peor enemigo de Lass Bangoura no es Trashorras. Su talento es inconmensurable y su proyección da vertigo. Un grande de España o tal vez algún clásico de la Premier pueden ser su lugar en la historia. Su sitio en su tiempo. Su rol en el mundo. Corriendo por la banda del Emirates Stadium mientras Wenger se cruza de brazos y sonríe. Celebrando un gol en Anfield si los reds se quedan muchos años con la presencia y la esencia de Brendan Rogers. Tiene 20 años y talento como para hacer que los mayas retrasen unos lustros más su profecía. Solo por verlo hacerse la diagonal a sí mismo. Solo por verle correr y respirar. Pero le falla algo. Le falla él.
Onésimo fue el ejemplo de lo que no debe ser Lass.
Onésimo comentando el Betis-Rayo en la Sexta lo defiende: “Me gustan estos jugadores aunque se equivoquen”. No nos extraña. Onésimo fue lo que no debe ser Lass. Talento desaprovechado, un trotamundos de bandas y banderines que derramó su talento en una pelea contra sus propias circunstancias, estrellándose a veces contra un bosque de piernas y espinillas que se reproducían una detrás de otra, a veces contra la rechoncha sombra de su destino. Fue un grande que estuvo demasiado pequeñito (el verbo ser y estar que tanto inspiraba a Benedetti). Lass tiene que aprender a concederse la oportunidad de ser necesario, comprender que nadie se acuerda de los buscadores de oro que morían deshidratados y solos por no llevar compañeros con los que repartir el botín final, atender el desmarque, utilizar su inteligencia para algo más que justificar sus ausencias y derivas, encontrar a los aliados, destrozar al enemigo. Lass lo sabe y nosotros lo imaginamos: potencialmente es uno de los mejores jugadores de nuestra liga. Nosotros lo sentimos y él los tendría que imaginar: la sonrisa de Leo Baptistao conquistó la otra noche mucho más corazones que la magnífica temporada de debut del guineano.
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Ser y estar (Mario Benedetti).
@migquintana · hace 655 semanas
Lass tiene todas las condiciones del mundo para ser un jugador importante en una cantidad ingente de clubes, pero desde luego sólo lo será si incorpora a su mando el mítico botón de la x. Suena a tópico y simplón de narices, pero creo que en este caso es estrictamente así. En el partido contra el Granada, sus primeros 15' fueron alucinantes. Recuerdo poner en twitter el partidazo que estaba haciendo y, luego, mandar un mensaje a Abel porque sé que le gusta entre bastante y mucho. El Rayo mandaba gracias a él.
Sin embargo, fueron un espejismo. O, bueno, no. Pero sí irreales, al menos a día de hoy. Los siguientes 78' continuaron siendo una exhibición de desborde, verticalidad y talento para generar ventajas con balón en los que la línea de pase nunca existía, el compañero nunca estaba en ventaja y no había más opciones que intentar el cuarto regate de la jugada. Así pensaría él, claro. La grada de Vallecas tenía una opinión bastante contraria. Ya en el segundo tiempo y tras tres pérdidas infantiles que facilitaban el contragolpe del Granada, pitó estallando contra el chaval. Lo hizo en dos ocasiones y Lass, incluso, se disculpó. Sin embargo, al tercer balón que tocaba, iba a jugársela de nuevo ante tres rivales. Él los había atraído, pero su compañero era quién debía aprovechar la ventaja. Vallecas volvió a pitarle. No entendía nada.
Así fue su partido, quince minutos brillantes, casi ochenta desesperantes y, pese a todo eso, terminó forzando la falta que magistralmente chutó Trashorras. Lass ''está'' siendo esto, pero el puede ''ser'' mucho mejor.
@LolOrtegaP · hace 655 semanas
Y es innegable que si no fuera por él no habrían ganado el partido. Y es indudable que si fuera por él (habría tirado la falta) habrían empatado el encuentro.
La gente le pita y eso no es plato de buen gusto aunque a lo mejor le ayudaría a hacer la digestión de sí mismo. Tiene 20 años y puede acabar comiéndose el mundo
hg_fdz · hace 655 semanas
Pero contra el Granada no se le pita (solo) por ese partido. Se está pitando a un montón de partidos en los que has visto que el chaval que puede sacarte de pozo, que parece que lo tiene todo, intenta otro regate imposible y pierde el balón.
Esos 15 minutos fueron ilusionantes.
@DavidLeonRon · hace 655 semanas
@giorgioV10 · hace 655 semanas
@migquintana · hace 655 semanas
Muy pronto, ¿no? Yo al menos no te sabría decir... y eso que a mí el chaval me gusta bastante. Físicamente potente, bueno técnicamente, vertical y muy agresivo con balón, con buen disparo y cierta cuota de gol... Digamos que su ''best case scenario'' es ser un muy buen futbolista y que este año tiene una gran oportunidad con Paco Jemez. Como dice @hg_fdz, el Rayo depende mucho de sí da este paso (o pase, en su caso).
Martin · hace 655 semanas
En este caso, hablamos de un chaval cuya mayor carencia es su propia cabeza. Y ojo, la cabeza es imprescindible para ser alguien en este deporte. Si Jémez se da cuenta, y dedica su tiempo a asentársela, habrá un proyecto de jugador interesante. Y si no se le van los pájaros, se echará a perder.
Sin embargo, no me gusta que se le pite. A alguien con esa personalidad tan "extraña", y con trabajo mental por delante, sólo le puede añadir dificultades. Si a un joven que ha cometido un error técnico no se le pita, y se le dice "ánimo chaval, a la siguiente fijo que sí", se debería hacer lo mismo cada vez que a éste la cabeza le juegue una mala pasada.
@giorgioV10 · hace 655 semanas
@DavidLeonRon · hace 655 semanas
Esa pregunta se suele responder con un nombre de otro futbolista ^^
Pove22 · hace 655 semanas
Abel Rojas 130p · hace 655 semanas
@CAlvarezVillace · hace 655 semanas
Lass es un jugador que pasó de jugar en el Juvenil División de Honor a hacerlo en Segunda División con Sandoval. No jugó ni un solo minuto en el Rayo B, como sí ocurriera con Leo, y su transición tan prematura se debió exclusivamente a la gestión de Sandoval. Esto, unido a que la situación personal del jugador a los pocos días de jugar en el primer equipo cambió, no ayudó a que la afición en general admitiera ciertas actitudes fuera del campo. Esto es: cambio de residencia para dejar de ser tutelada por el club, favoritismo del entrenador ante jugadores de mayor "background" en la entidad, personalidad del jugador, estilo de juego individualista.
Lo que ocurre con este tipo de jugadores que tienen buenos ratos con un club semidesconocido es que la mayoría de los medios de comunicación los utilizan como reclamo cuando son cierta actualidad. Y claro, el desconocimiento general favorece a ello y a que se hagan juicios de valor sin tener conocimiento previos.
En cuanto a las aptitudes del jugador P. Jémez ha establecido este verano que lo que necesita Lass es tener una buena toma de decisiones en 3/4 de campo. Que ése es su déficit y que en eso trabaja, mayoritariamente, con él. No es tarea complicada porque hablamos de un chico acostumbrado a marcar diferencias en categorías inferiores (superó la veintena de goles en el División de Honor en veinte partidos jugados) y la frustración de ver que su velocidad ya no era determinante en el primer nivel afectó y afecta a su juego. Porque no hay que llevarse a engaño: Lass basa todo su potencial en su estado físico y en su acierto en los desbordes. Más allá de eso es un jugador bastante limitado.
Es más completo Leo y tiene las ideas más estructuradas. La formación de ambos no es equiparable y la progresión que pueden tener en la primera plantilla del Rayo Vallecano se postula, ahora mismo, bastante lejana en cuanto a importancia y peso específico.
Y el Rayo, obviamente, no depende del rendimiento de Lass para mantener la categoría, como he leído previamente en este espacio de comentarios.
pove22 · hace 655 semanas
@CarlosJimenez_B · hace 655 semanas
@AlexSM10000ft · hace 655 semanas
iniestinho · hace 655 semanas
Si alguien sabe donde cuelgan habitualmente partidos de la Russian Premier League que lo diga please
Abel Rojas 130p · hace 655 semanas
Te aseguro que fue tal cual. Date cuenta que optó por un 3-4-3 en principio pero el 10 era Leo, que es un segunda punta de manual, así que... 3-3-4.
@AlexSM10000ft · hace 655 semanas
A ver si puedo verlo esta noche o mañana, porque parece una cosa muy curiosa. Por lo que comentabais no funcionó bien, pero si acabas haciéndolo podría molar un montón.