No presentamos, rendimos pleitesía.
Es una sensación gozosamente ambivalente presentar el mejor trabajo jamás publicado en la breve vida de este blog y tener que reconocer que no es mío. Modestamente (o no), cuando trabajo, investigo y escribo aquí lo hago con la sana intención de ser el mejor y de barrer a mis compañeros. Imagino que ellos hacen lo mismo. Así que haber conocido a alguien que sabe mucho más que yo, que escribe mucho mejor, con más facilidad y en menos tiempo es una experiencia que te hace ser tan dolorosamente consciente de tus limitaciones como estar ansioso de aprendizaje. El invitado en cuestión, que tan amablemente se ha prestado a colaborar desinteresadamente con nosotros, es hijo de uno de los porteros latinoamericanos más grandes de la historia. Ha conocido personalmente a buena parte de los mayores cracks mundiales de siempre. Ha asesorado, guionizado y asistido en innumerables largometrajes, miniseries y documentales sobre el fútbol, su evolución y los grandes equipos y jugadores de todos los tiempos. Es además profesor universitario y conferenciante de extraordinaria fama. Os invitamos pues a leer y disfrutar de la generosa contribución del Profesor Antonio Domínguez.
Firmado: Imaginauta
ESPECIAL PIONEROS LATINOAMERICANOS
Tal vez también pueda haber habido alguna influencia de allegados británicos del Peñarol, a raíz del juego que en ese entonces simultáneamente también desplegaba el centrodelantero goleador de la selección británica bicampeona olímpica La inmigración desde el sur de Europa fue clave en el desarrollo del fútbol de Uruguay. 1908 y 1912, Viviam Woodward (Tercera Foto), pero dada la explosión de técnica e imaginación latina que posibilitó esos fundacionales años del fútbol criollo en el Uruguay, da la impresión de ser mas consecuencia de los cambios sociales que comenzaba a producir la masiva inmigración del sur europeo, que observaciones táctico-estratégicas de ultramar.Pues junto con José «El Maestro» Piendibene, aparentemente descendiente de la genética nórdica italiana y formado futbolisticamente en las desparejas arenas y en ese entonces aún desoladas playas de Los Pocitos en las afueras de Montevideo, surgió también la fabulosa generación integrada por ese otro fenómeno básicamente del Club Nacional, conocido como Angel «El Loco» Romano, quien obtuvo 50 títulos durante su carrera, entre ellos el de pentacampeón sudamericano y olímpico del 24, y de quién el legendario internacional argentino campeón sudamericano, perteneciente al Rácing Club y el River Plate, gran amigo además de Don Santiago Bernabeu, ese dandy llamado Natalio Perinetti, nos decía todavía a fines de los años 70 a quién lo quisiera escuchar, que aquellos que decían que Pelé fue el mejor jugador de todos los tiempos, era simplemente porque no lo habían visto jugar al «loco» Romano. Y como si no fuera suficiente con esos dos fenómenos aparecieron también los hermanos Scarone, Carlos y Héctor y ese otro fenómeno de la defensa Juan Benincassa, según dicen muy parecido a Baresi, y a quién se sumó también el inside derecho Pablo Dacal y posteriormente el atleta velocista de raza negra Isabelino Gradín (Cuarta Foto).
Presentación con el Fútbol Club Barcelona (1926) del que estaba oficiosamente considerado como el mejor jugador del mundo: Hector Scarone.
Por lo cual, a diferencia del Rácing Club de Avellaneda que gobernó futbolísticamente la segunda década del siglo 20 en Buenos Aires, conNacional de Uruguay fue el primer club compuesto únicamente por ‘nacionales’. su centrodelantero Marcovecchio un oportunista rebotero y rematador, dejando el armado de los ataques mas para sus insides Ohaco, frío y cerebral, y Hospital dribleador e individualista, y que además conservaba aún algunos reservas y hasta su propio nombre británico, el Nacional de Uruguay fue el primer club sudamericano integrado totalmente por «nacionales» y ello se vió traducido en su juego, comandado en ataque por el deslumbrante y electrizante goleador Angel Romano , tan brillante que se desempeñada con igual eficacia en cualquiera de los 5 puestos del ataque.
Por lo cual, tanto Uruguay desde 1912, como Nacional a partir del retorno de Angel Romano desde el Boca Juniors en 1915, y con su juego criollo plagado de apellidos latinos, le impusieron al multicampeón argentino Rácing como a las selecciones nacionales argentinas una superioridad incuestionable hasta de visitantes, y que se vió reflejada en los 3 sudamericanos ganados por Uruguay sobre los 4 disputados de 1916 a 1920, que después se prolongó con los otros 3 sudamericanos del 23, 24 y 26, asi como también al resto del mundo en los Juegos Olimpicos europeos del 24 y 28 y el primer mundial del 30. Aunque ya hacia el final de la tercera década del siglo XX, aprovechándose mas de la falta de nivel, visión y sabio liderazgo de la dirigencia del fútbol argentino, ante el retiro por edad de sus tempranos fenómenos Piendibene y Romano.
Una muestra del estilo criollo. Maniobras de juego rasante uruguayas, avanzando por la izquierda, mientras un suizo le pega hasta 3 veces a Romano sin poder sacarle la pelota.
Finalmente de José Piendibene (pleno de bienes) podriamos decir que su fútbol lo llevó a integrar selecciones uruguayas durante ¡¡¡ 15 años !!! desde 1909 hasta 1924, y que con su don de liderazgo dentro del campo, con sus órdenes al estilo Di Stéfano, fue quien impuso preferentemente el juego de pases mas cortos y rasantes, las combinaciones de los tres centrales con muchas aperturas a las diagonales de los wines para definir, todo adornado de una gran estética y elegancia del norte italiano , cuajado del arte y la imaginación latina, pero plena de astucia, picardías y vivezas «criollas» en una constante danza de inspiración improvisación creadora, en contraposición al anterior fútbol noble, de caballeros, mucho más físico sajón, del choque y la disputa eminentemente atlética con sus largos pelotazos y corridas.
Y asi lo reflejó para la posteridad el poeta Pedro Leandro Ipuche en su «Canto a Piendibene»:
«Maravilloso centro del ataque oleante, desata sus cuatro hombres sobre la red flotante. Allí acecha al golkeaper el tiro diagonal»
José Piendibene «El Maestro»
Vídeo y tango en honor al Peñarol glorioso y al Maestro Piendibene.
DBEcos 38p · hace 676 semanas
Historia de la táctica del fútbol (IV): Figuras de plata - 1ª parte - El 9 y Medio | La tinta del fútbol